Capítulo 31: ¡Lucha honorable

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Al principio, las misiones diarias de Gary lo habían recompensado con 10 Exp cada una. Desafortunadamente, ahora que su sistema lo clasificó como Nivel 2, cada Quest solo pagaba la mitad de esa cantidad. Dado que el requisito para alcanzar el siguiente nivel ya se duplicó, no hizo falta ser un genio de las matemáticas para comprender que le llevaría mucho tiempo progresar confiando solo en este método para acumular Exp.

Sin embargo, esto no significaba que Gary tuviera la intención de dejar de hacer ejercicio pronto. Después de todo, en este momento era el único método confiable para que él aumentara su Fuerza sin ninguno de los puntos de estadísticas que parecía estar obteniendo para subir de nivel.

Durante su breve tiempo con el sistema, Gary había ganado la mayor cantidad de Exp después de luchar contra otros como los estudiantes de Eton High. Aunque aún tenía que confirmar su sospecha, creía firmemente que también podría ser una forma efectiva de obtener otras estadísticas como Resistencia.

Como no estaba dispuesto a salir a buscar problemas en las calles, su conjetura eventualmente llevó a Gary a simplemente desafiar a los clubes de artes marciales en su propia escuela. El profesor del club de Karate era un anciano, cuyos brazos se cruzaron tras escuchar la declaración de Gary.

“Me gusta tu espíritu, chico, pero las cosas no funcionan como en las películas. Este es un club escolar. No puedo dejar que nadie entre aquí y permitirles pelear contra mis estudiantes”. El profesor explicó en un tono tranquilo.

Tom estaba muy complacido de que este maestro pareciera razonable y no hubiera aceptado simplemente la loca solicitud de su amigo. Ahora solo tendría que sacar a Gary del gimnasio. Desafortunadamente, justo cuando estaba a punto de agarrar a su amigo por el brazo, Tom vio una mirada extraña en los ojos de Gary.

'¡¿P-por qué tiene esa mirada otra vez?!' Tom sintió que temblaba, todo en su cuerpo le decía que era una idea corporal tocar a Gary en este momento. Sin saber qué era, escuchó este sentimiento y dio un paso atrás.

Al escuchar la respuesta del maestro, Gary sonrió.

“Solo quería saber si valía la pena aprender Karate en estos días”. dijo Gary. “En estos días, las peleas alteradas se muestran en Internet y en la televisión. Todo el mundo sabe que los mejores luchadores son aquellos que no solo confían en sus formas alteradas, sino que incorporan las artes marciales en su estilo de lucha. Sin embargo, a pesar de ser un gran admirador, nunca he visto a uno solo de los mejores luchadores Alterados usar Karate”.

Según la experiencia de Gary, los profesores de deportes, y más aún los profesores de combate, se enorgullecían de las artes marciales que habían aprendido durante años. El cinturón negro era prueba de que su maestro debió pasar incontables horas perfeccionando sus habilidades y Gary no podía imaginar que dejaría pasar que básicamente había llamado a su oficio 'inútil'.

“¿Y eso te hizo pensar que podría no valer la pena tu tiempo y esfuerzo? Muy bien. ¡Steven, por favor ayuda a nuestro entusiasta amigo a encontrar un gi de su talla!” Instruyó el profesor.

Inmediatamente, un estudiante con cinturón verde dio un paso adelante. Steven tenía el pelo corto similar al de Tom y era un poco más grande que Tom y Gary, pero no tan grande como los jugadores de rugby como Gil y Barry.

Mientras Steven y Gary habían desaparecido en los vestuarios, los otros estudiantes rápidamente colocaron tapetes en el piso, creando una arena improvisada para que los dos muchachos pelearan. No mucho después, los dos combatientes salieron.

Gary ahora también vestía el uniforme blanco como todos los demás. Tanto él como Steven tenían puesto equipo para la cabeza, así como espinilleras para proteger sus piernas y, finalmente, una gran cubierta en la parte delantera de su estómago. Todo este conjunto de equipo de protección solo hizo que a Gary le resultara más difícil moverse, pero incluso él entendió que no había forma de que el maestro los dejara pelear sin ellos.

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