Notas 3.0

La Ayuda de un Eterno

Debo ser franca, después de ver la serie y comenzar la búsqueda de su cómic, no podía evitar agregarlo aquí. Parezco una más del fandom The Sandman pero aprovecharé esto y escribiré agregando al club a nuestro invitado. No lo tomen a mal, adore la serie en lo que mostraron de su pj y estoy en la búsqueda del cómic para ver más allá.
N

anaOosaki_7 The_Cosmic_Archangel

Bueno aquí vamos~

Los libros caían de sus estanterías apenas Carol buscaba y no eran los correctos. Nana estaba ahí también, observando con admiración aquel cuarto muy amplio de libros y más libros. No tenía fin y cuando más se movían hacía el final, más amplia se veía. Admiraba tanto aquella magia de los reinos Lunar y Estelar.

— ¿Crees que deba ayudarte a ordenar?
—No te preocupes, se ordenarán solos, tienen magia en ellos y pueden restaurarse y volver a sus lugares sin que se los pida. Lo malo es que no encuentro lo que deseo — hablo Carol casi molesta dejando caer libros y libretas.
— ¿Sobre el libro de Kari?
— Si o algo que nos permita conocer el riesgo que tendrá estando allí, que ella misma sepa que debe dejar ese lugar y esos demonios — desvío su vista a su amiga — no es que los tome como enemigos a muerte pero entiende, muchas cosas han pasado frente a ambas que no es normal de nuestra Kari. Aunque conozcan a todos ellos por parte humana, yo los desconozco y desconfío. La naturaleza demoníaca siempre será dañina a una fuerza pura superior.
— ¿Piensas que pueda pasar eso?
— Pienso en muchas cosas, tantas que mi mente va a explotar por ello. Desde que vimos a Andy, han pasado momentos que no se cuando estoy despierta o durmiendo y menos en que tiempo estoy.

Nana entendía perfecto aquel cambio que habían recibido. Su entrenamiento comenzó a ser más forzado y duro con Mads y Richard, algo que le encantaba ver a ambos tan cerca y sin pelear como había pasado meses antes. En parte, odiaba su entrenamiento pero disfrutaba sus compañías.
Tomaron un descanso en uno de los sillones que aparecieron de forma mágica ante ambas y una bandeja de galletas y té.  Carol se quedó dormida producto de su cansancio mientras Nana leía sobre algunas magias ocultas en cartas, fue un libro que apareció a su alrededor llamando su atención.

Carol soñaba con la biblioteca pero no en la que estaba de su reino sino uno distinto, uno al que sus ventanas detallaban  figuras ajenas y el polvo era de menos ahí. No le parecía extraño hasta ver el libro con el nombre de Kari. Lo había encontrado y rápido.

Lo abrió buscando las páginas más adelantadas a las anteriores, su vida estaba allí desde la humana como su otra parte celestial. Estaba feliz de tenerlo en sus manos que, cuando llegó a la fecha donde aparecían los Ghouls y aquel demonio que los gobernaba, una voz la asusto por completo.

— Deja ese libro. — Carol volteo a ver quien le hablo tan amenazante que solo noto una figura oscura sentada con ojos brillantes — te lo pediré de nuevo, deja ese libro en donde lo encontraste. No debes estar aquí.

— Bueno yo... — comenzó a hablar en bajo casi en pánico, más cuando este se levantó caminando hacia ella y se notaba su presencia. Su saco oscuro, cabello negro y su rostro serio y frío. Carol solo cerró sus ojos con fuerza sin soltar el libro hasta escuchar la voz de Nana.

— ¡Carol! ¡Carol! ¿Estas bien? — la chica intento despertar a su amiga que había comenzado a verse pálida y como si tuviera una pesadilla. Carol se despertó rápido abrazada a un libro, el que había estado ojeando antes de ser sorprendida — ¿que paso?
— yo .. aaah soñe algo extraño y.. traje esto — susurro dejando en la mesa el libro — un hombre casi me da el susto de mi vida, no lo he visto nunca pero su presencia era extraña..

Abrieron el libro pero las letras estaban al revés  de lo normal y algunas en tamaño gigante y pequeñas. Nada podía ayudarles, Carol estaba segura que en sus sueños las hojas estaban perfectamente escritas y no de esa forma. Cada vez estaban más lejos de su objetivo de ayudar a su amiga.

—¿que harás con ese libro? — pregunto Nana observando el libro extraño, reconocia el tipo de portadas de algún lado — dime ¿como era quien salio en tu sueño?
— Apariencia oscura, ropa negra como un saco y su cabello negro.. solo eso y sus ojos, brillantes y...
— ¡Has visto a Morpheus! — el grito de Nana resonó por la biblioteca de sorprendida a su amiga.
— Al fin he encontrado este lugar — ambas chicas voltearon al escuchar esas palabras notando a alguien más en ese lugar.

Camino hacia ambas con seriedad y la vista fija en el libro que Carol había sacado del sueño. Le pertenecía y no iba a dejarlo en sus manos.

— ¿Porque estabas en mi reino y te robaste este libro que no es tuyo?
—  Fue por un buen motivo, verá.. estoy buscando una solución y respuestas para ayudar a una amiga. No es por hacer daño a su biblioteca — trato de decir Carol, muy pocas veces en su vida intento no enfrentarse a alguien pero esta vez la misma presencia del contrario lo hacia.
— ¿Tu eres Morpheus?  Dios de los sueños, un eterno ¿verdad? — Nana pregunto segura, había leído años atrás sobre los eternos y en especial aquel ser que llamaban Sandman. No creyó que aquellas historias eran ciertas hasta ese momento.
— Así es, lo soy. Y ustedes no son simples humanas en este reino distante a la Tierra. Una de ustedes brilla como una estrella en la noche más oscura y la otra destella esencia de la muerte y azufre, como un dragón.
— Por favor, permite que busquemos información en tu mundo. Necesitamos saber so... — Hablo Carol pero fue interrumpida por Morpheus.
— No lo permitiré. No deben sacar nada de ese mundo.

Tomó el libro de Kari y comenzó a caminar para alejarse de ambas pero Carol no se daría por vencida, nunca lo haría ni en casos de peligro extremo. Se acerco rápido al contrario tomando su saco para detenerle.

— Daría hasta mi vida por algo que pueda ayudar a salvar a una vida. No dudo en entregarla si es necesario por esa información — Carol miro fijamente al Eterno del sueño que este notaba lo decidida que estaba. Pocos se han atrevido a hacer eso y mucho menos detenerlo.
— De acuerdo, hablaremos esos términos en mi mundo.
— ¿Quieres decir que iremos ahora? — el rostro de Nana mostraba una sonrisa completa, aquellas historias leídas en su edad más rebelde estaban por cumplirse.
— Irán cuando duerman, no puedo llevarlas aún. Las espero allá — Morpheus termino de hablar y desapareció antes sus ojos.

Nana corrió hacia su amiga y la tomó de los hombros dejando ver su felicidad.

—¡las historias son ciertas! ¡veremos un mundo increíble! ¡oh por dios, ya quiero dormir!
— Aun tiemblan mis piernas, es la primera vez que siento miedo por una presencia. Ni siquiera me da miedo Wilder — susurro viendo a Nana festejar aquel sueño cumplido.

Ambas entrarían al mundo de Ensoñación de Sandman, a la tierra de un Eterno. Un dios que jamás un Estelar había llegado a tener cerca, mucho menos la realeza como Saida.
Ya casi a media noche, ambas amigas se quedaron dormidas apareciendo en un gran salón frente al dios mencionado. Este observaba un libro con su nombre escrito por un humano, levantó la mirada hacia ellas y sonrió.

—Bienvenidas, señorita Nana y princesa Saida..