𝑫𝑬𝑳𝑰𝑪𝑨𝑻𝑬

capítulo 28: las personas cambian.

𝐂𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬 𝐒𝐚𝐢𝐧𝐳

Hablar con Devora, últimamente era parte de mi rutina, ambos compartíamos más gusto de los que alguna vez llegue a imaginar, además tenía tema de conversación para cualquier situación.

Devora era todo un personaje.

Muy a pesar de que nuestro comienzo no había sido el mejor estaba claro, que conforme el tiempo pasaba, las personas comenzaba a madurar.

— Creo que la pasta es un buen plantillo, incluso mejor que la pizza.

— No lo sé, tengo mis dudas al respecto.-defendí, seguro de que ella lanzaría algún otro comentario.

— Eso es porque nunca has preparado pasta, créeme que es todo un acontecimiento.-agregó.

— Tal vez.

Discutír sobre ¿cuál era el mejor platillo?, ¿o la mejor película?, era ese detalle que distinguía nuestras conversación de las demás.

— Algún día te compartiré un receta familiar seguro que al prepararla me darás la razón.-prometió, mientras bebía un poco de su café.

— Hasta ese entonces, seguiré opinado que la pizza es mejor.

— De acuerdo.-respondió mientras se mantenía atenta al paisaje frente a ella.

— ¿Ya hablaste con Charles?.-le cuestione, sabiendo que se trataba de un tema algo delicado.

— No, la verdad siempre esta ocupado.-respondió afligida.— Por eso me extraña que estando en la misma escudería, tú te des el tiempo de hablar conmigo.

— Estos días han sido pesados para él, entre las exigencias y prácticas, creo que todo ello lo absorbe.-mentí, sabiendo el porqué de su ausencia.

Más bien la persona por la que él estaba actuado de tal forma.

La respuesta era sencilla: Lottie su irreparable pasado, ese que nunca lo dejaba ser completamente feliz.

Nunca entendí del todo su relación pero estaba seguro que no era la mejor, ni tampoco había terminado de la forma más sana.

— Lo entiendo, creeme que lo hago, pero no sé a veces me siento rara, como si él me estuviese escondiendo algo.-una mueca se formó en su rostro.

— Tranquila, él tendrá sus motivos, no creo que lo haga a propósito.

— Eso espero en verdad.-suspiró exasperada.

Pobre Devora-pensé al notar como aquel brillo en sus ojos de a poco se desvanecía.

— Bueno cambiemos de tema.-sugerí, cuando observe al monegasco entrar a los boxes junto con Lottie.

— ¿Qué tal las cosas con Karlie?.-cuestionó, un poco más alegre o al menos lo sabía fingir.

— Mal, bueno es difícil competir contra él encatador e insistente Arthur.-confese con una sonrisa nerviosa. Cuando la pesada mirada de Charles recayó sobre mí.

— ¿Tan rápido te das por vencido?.-habló nuevamente la castaña.

— Tal vez.-respondí, sin saber cómo actuar de la manera más normal posible.

— Él Carlos que yo conozco no se daría por vencido jamás.-respondió entusiasta. Claro se refería a aquel Carlos que se negaba a olvidar los sentimientos que ella le provocaba.

— Karlie es maravillosa, pero no llegamos a conectar como pareja.-me sincere.

— Claro, bueno algún día encontráras a alguien. A veces el amor de nuestra vida esta parado frente a nosotros y no somos capaces de verlo.