Cap. 17

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17. Ron quiere un reembolso.

Los días de escuela de Harry eran, con mucho, algo desepcionantes.

Antes de poder hacer grandes actos de magia, tenían que comenzar con mucha, MUCHA, teoría. Y si bien a Harry le gustaban los libros que se encontraban en Hogwarts, comenzaba a aburrirse un poco de ellos.

La clase que más disfrutaba, por el momento, era Herbologia, cuando grandes cantidades de sol atravesaban los cristales del invernadero y lo bañaban, otorgándole energía. Es obvio decir que era el único que salía de esa clase sin parecer agotado... Bueno, estaba Neville, que si bien se veía cansado, siempre salía con una enorme sonrisa.

Pero saltando su vida escolar, por las noches, Harry recién empezaba su jornada de estudio.

En su baúl, entre varios libreros, Harry estaba intentando su primer hechizo en pársel.

-Agralescit vita -pronunció, apuntando a una pequeña maceta.

De entre la tierra comenzó a crecer una pequeña flor de colores cálidos. Ciertamente Harry no había puesto ningún tipo de semilla, lo que crecía era puramente magia. Un aroma dulce comenzó a recorrer el lugar y, cansado por la gran cantidad de magia que puso, nuevas fuerzas comenzaron a recorrer al niño de ojos verdes.

Luego de un par de minutos, la flor que apenas había alcanzado una altura de cinco centímetros, comenzó a marchitarse.

Harry suspiró, decepcionado. Este era un hechizo que creaba un tipo de flor que en realidad no existe. Depende de cuanta magia y emoción le pongas es cuando el tiempo de vida de la flor se decidirá.

Depende de con que la nutraz que tendrá ciertos efectos en las pociones. Aunque sólo pueden crecer con emociones positivas.

Alimentala con ternura, y podrás hacer una poción que puede curar casi cualquier enfermedad que no sea mágica.

Alimentala con gratitud, y tendrás una poción que aumenta un poco las capacidades físicas.

Alimentala con felicidad, y podrás hacer una poción que ayuda al desarrollo de las artes mentales.

Es esta última a la que está apuntando Harry.

El enfrentamiento que tuvo con el profesor Snape lo dejó algo temeroso por la intrusión a su mente. Si no fuera por el anillo de Salazar, Severus ya hubiera visto hasta la vida pasada de Harry. Pero ese anillo no lo salvará por siempre.

El hechizo que puso Salazar comenzó a deteriorarse desde que Harry se puso el anillo, ya que no existe objeto alguno que pueda proteger la mente de forma permanente.

Por eso quiere lograr esta poción. Claro, que ya se había mentalizado de que para cuando haga la poción ya habrán pasado algunos años debido a los demás ingredientes difíciles de encontrar. Como algunos nervios de corazón de dragón, unos dientes de un perro de tres cabezas, lágrimas de fénix, espinas de la flor diamante del Nilo(la cual es sumamente ilegal para comerciar), etc.

Pero para cuando llegue el momento en el que pueda hacer la poción, Harry tendrá que mantener viva a la flor durante 2 horas como mínimo.

Por eso debe ir practicando. Además, al usar la magia pársel su núcleo mágico, por teoría, debería ir acostumbrándose para lograr hechizos silenciosos, ya que son pronunciados en un lenguaje que unicamente existe por la magia.

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