Love And Shadows: Eternal (KookV)

Marcas Poderosas

Jeon leyó aquella nota y se la llevó instintivamente a sus labios.

-detective Kim, he de admitir que si sigue siendo tan tierno, ¡lo voy a castigar! Dijo riendo con picardía, mostrando sus dientes frontales como un pequeño conejito.

Jungkook salió a la calle radiante de felicidad, su energía desbordaba destellos azules, agradecía al cielo que nadie pudiera verlo.

Cuando llegó a la casa de sus padres, abrió la puerta con sigilo intentando sentir calma, una mezcla de alegría y pena por los últimos hechos le llenaba la mente y el corazón.

Sin embargo se detuvo al entrar, sintiéndose conmovido por lo que vió.

Yoongi se hallaba recostado en el hombro de Namjoon, mientras éste le acomodaba sus cabellos con tanta delicadeza y ternura que asustaba.

Aquello lo puso emocionado, sabía cuánto amor le tenía su padre Min a su padre Nam aunque no fuera correspondido; nunca antes Jungkook los había visto tocarse un solo dedo, ni para saludarse.

-¡Buenas tardes!

Yoongi se levantó de un salto,
-¡has venido temprano! ¡Pequeño ven acá! Dijo estrujandolo entre sus brazos.

-¿interrumpo? Dijo bromeando como siempre.

-¿Jungkook? Dijo en su tono sereno el ángel guardián.
-siéntate pequeño. ¿Has comido?

-sí, he venido temprano, la investigación en la que estoy trabajando ya casi llega a su fin. Dijo suspirando mientras se sentaba al lado de sus padres.

-necesito decirles algo importante sobre la investigación, dijo Jk poniéndose serio, después de aquel saludo.

-las personas asesinadas eran almas condenadas como yo, habían venido de diferentes partes del mundo, dijo con pesar.

Un silencio se hizo presente, el duelo por almas condenadas no era simple, todos cerraron sus ojos con dolor.

-no logro comprender la razón por la cuál se reunieron en este lugar. Jeon dijo aquello con suma curiosidad.

-te buscaban a ti. Dijo Namjoon con los ojos cerrados; -he de suponer que las víctimas querían reunir a todas las almas condenadas existentes en la tierra.

-¡imagina que hayas estado ahí! Sollozó Yoongi; -¡No podría vivir sin ti mi corazón hermoso!

-el causante de las muertes fue ese demonio legionario que mencionaste, no dudes que aún te busca, dijo Namjoon con mirada pensativa mientras calmaba a Yoongi dando pequeñas palmadas en su espalda.

-el texto que tenían las almas condenadas habla de un demonio encarcelado en la tierra y una profecía. ¿Es eso cierto? Preguntó Jeon sintiendo miedo en su interior.

El halo de energía de Nam se intensificó.

-¿puedes citarla? Dijo Yoongi nervioso.

"El demonio yace y espera en el umbral de la muerte,
sus ojos fieros él cierra, solo esperando inerte.

Con ira espera el momento donde será liberado;
Ansiando que un Alma perdida regrese al perdido rebaño.

Más un Alma luminosa, unida al amor y su fuerza,
podrá acabar con su reino, podrá acabar con su rumbo;
Alma bella, alma amada, la perdición de su mundo."

-es una total verdad, esa profecía existe hace mucho tiempo, tanto que se había dejado en el olvido.
El Ángel Guardián tomó la mano de Yoongi mientras hablaba y se dirigió a su pequeño hijo.

-¡el demonio legionario y su leal sirviente cometieron un error! Parece que aún no tienen la profecía en sus manos.

-Mataron a las almas condenadas del mundo, pensando que así no tendrían obstáculos, pero según la profecía, sólo un alma condenada puede liberar al demonio que habita en esta tierra.

"Con ira espera el momento donde será liberado;
Ansiando que un Alma perdida regrese al perdido rebaño."
pensó Jk entendiendo aquel fragmento. -¡Claro! Las almas condenadas pertenecieron a él antes de arrepentirse...

-mientras indagamos en eso, debes protegerte más aún, ellos te quieren a ti, vivo o muerto, porque desconocen lo que puedes hacer.
Todo el poder que has evitado usar, debes explotarlo ahora, es momento que uses y lleves contigo las últimas marcas del ritual.

Jeon suspiró, "las últimas marcas del ritual" aquello le causaba cierto temor.

-una cosa más, dijo Nam, -el detective debe alejarse de todo esto, ¡no debe interferir!

Jeon tragó saliva, -así se hará padre.

Después de pensar algunas cosas preguntó -¿cuándo se harán las marcas?

Yoongi se acercó y viéndolo a los ojos, habló con calma.
-hijo mío, es necesario que se hagan hoy, quedate a cenar y a dormir, así será más seguro.

Las marcas de las que hablaba su ángel, eran palabras y símbolos grabados en su piel, le permitían a Jeon tener un mayor poder, año con año había recibido una; sin embargo en esta ocasión le correspondía la última de ellas.

Cuando todo estuvo listo, Yoongi tomó una pequeña liga y le acomodó los mechones de cabello largo en una pequeña coleta, quitó la parte de arriba de la ropa de Jeon dejando a la vista su torso desnudo.

Con nerviosismo fue observando sus brazos llenos de "tatuajes" los había utilizado pocas veces, en ellas había sido más poderoso y había terminado más débil.

Nam y Yoongi pusieron a Jeon de rodillas sobre un almohadón en el centro de la sala, mientras dejaban caer pétalos de rosa a su alrededor, colocando velas en forma de un círculo perfecto.

Jeon suspiró, su alma se sentía agobiada por los últimos días, algo fuerte se acercaba, algo malo y tenebroso; aún así su corazón enamorado le exigía atención en su murmullo.

"¿por qué ahora?"

Sus marcas estaban divididas en dos partes, una en cada brazo; cuando se unían hacían salir su poder como un sello.

"vita" y "mors" ambos al unir las muñecas formaban un círculo cruzado por una estrella de cinco puntas.
-vida y muerte, musitó Min tocando las palabras.

Al juntar ambos codos se podía leer "virtus" e "infirmitas" formando un nudo fuerte.
-fuerza y debilidad, continuó Yoongi.

Los antebrazos tenían las palabras "lux" y "tenebrae" su unión formaba un hermoso eclipse.
-luz y oscuridad, habló Nam con voz suave, dejando su halo en ellas.

Sus hombros tenían las palabras "Caelum" e "infernumen"
-mi cielo y mi infierno, repitió Jeon.

Finalmente en la parte superior de los brazos habían dos símbolos, una daga junto a "damnatio" y una flecha junto a "salus"
-salvación y Condenación, dijeron los tres al unísono, provocando que se iluminara cada marca.

Aquellos tatuajes habían sido hechos por Yoongi, grabados por su energía púrpura, como un sello eterno en su piel blanca.

Yoongi dejó emerger su luz púrpura en la mano derecha con ímpetu; cuando su luz se impregnó en la espalda de Jeon, palabra por palabra fue marcando, dejando salir pequeños hilos de sangre por toda el área.

"Angelus et dominus tibi benedicat In nomine lucis, In nomine vitae, In nomine Altissimi, In nomine animae Damnatae"

Jeon sólo pudo hacer muecas de dolor mientras repetía una y otra vez junto a sus padres la inscripción de su espalda:

"El ángel y el maestro te bendicen En el nombre de la luz, En el nombre de la vida, En el nombre del altísimo, En el nombre de las almas condenadas"

Y mientras algunas lágrimas salían de sus ojos, su mente sólo pudo pensar en el humano que le había robado el corazón y sintiéndose lleno de energía y poder renovado, sintió en su interior una pequeña luz de esperanza.