¿Quién es el hombre de mis sueños? [The Sandman I ]

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Leah

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"Tren con destino a Detroit. En marcha dentro de 10 minutos"

Anuncio la voz detrás de la bocina colgada en algún lugar de la estación subterránea. Llamando mi atención. El lugar se encontraba repleto de personas. Quienes corrían con desesperación de un lado a otro, temiendo perder su pasaje. O que el tiempo los consumiera.

El sonido de las suelas de los zapatos ser golpeadas contra el piso con rapidez, abucheos, y la fricción de los metales de las vías del tren. Eran sonidos insoportables. Que por suerte lograba escuchar muy poco debido a que portaba auriculares.

Sentada, en una de las sillas amarillas de espera. Me encontraba yo. Observando el caos que me rodeaba. Pero no era de tal mi importancia, por lo que continué con mi dibujo. Hasta que nuevamente la voz detrás de la bocina volvió a hablar.

"Tren con destino a Detroit. En marcha dentro de 5 minutos"

Mi viaje está por salir.

Tome mis cosas. Quitándome los auriculares me puse de pie. Caminando en dirección contraria a las personas de mi alrededor. Y de vez en cuando, mi cuerpo chocaba con otros debido a eso.

—¡Señorita!

La voz de un niño detuvo mi trayecto. Anonadada y con la incertidumbre de saber si era yo a quien llamaban. Me gire. Y efectivamente, ese pequeño me estaba volteando a ver. Su cabello oscuro cubría una parte de su frente. Y me acerque a él, curiosa.

Era un niño de aparentemente unos 8 años. Por lo que su estatura era la de un niño promedio de esa edad. Y procedí a agacharme, sosteniendo mi peso en mi rodilla izquierda.

—¿Sucede algo?—pregunté. Y sus ojos azules me miraban con detenimiento.

Me pareció recordarme a alguien.

El niño señaló a mi lado, e inmediatamente mi vista fue ahí.

Donde se encontraba de pie esa mujer. Era como una mancha, sin ser completamente visible o clara.

Y regrese mi vista para ver nuevamente al niño. Pero este ya no se encontraba a mi lado.

Junte las cejas en confusión. Y la voz del aparato volvió a resonar por los pasillos.

"Tren con destino a Detroit a punto de salir"

Pero esta vez, como un eco. De forma entrecortada.

El sonido de los metales golpear con las vías del tren llamó mi atención. No estaba entendiendo nada de lo que estaba pasando.

Pero pronto el aire causado por el tren pasar a unos cuantos metros de mí, me golpeó en la espalda. Moviendo fuertemente mi gabardina roja. Y de manera inmediata el escalofrío se apoderó de mi cuerpo. Haciéndome temblar en mi lugar.

Y voltee a ver a este tren pasar con una gran velocidad frente a mis ojos. Sin poderlo distinguir con perfección. Pero su imagen se volvió transparente. Hasta que de un momento a otro pude ver al otro lado de la estación.

Era un bosque cenizo. Con humo y destrucción cubriendo su suelo.

Los árboles se encontraban en llamaradas. Y de ellos colgaban... almas.

Retrocedí un paso atrás, perdiendo el equilibrio hasta quedar en las sentaderas.

Cerré los ojos con fuerza. Pero la imagen reciente no se despegaba de mi mente. Por lo que con temor volví a abrir los ojos, y esta vez el escenario a través del veloz tren que pasaban entremedio, era mi casa. Y por la puerta salió una mujer. Su silueta se hizo más clara conforme se acercaba al borde de la calle.