Las Tres Lunas

Flores de otoño

—¿En qué tanto piensas Rossie?— Victoria se quedó viendo a su hermana

—Es complicado tener un ser vivo a escondidas de la familia ¿Sabes?— Sonrió y bebió de su café —Cada vez se siente más grande mi panza—

—Ya deberías de decirle a nuestros padres, no estoy de acuerdo de que ese bebé esté aplastado todo el día—

—Ya falta poco para que nazca, lo que me tiene con el pendiente es  que nazca el día de tu boda—

—Para mí sería mejor, mientras más se retrase esa boda para mí mejor—

—Ya no me mientas linda, NamJoon sabe algo que nosotros no—

—Tal vez, después te vas a enterar de eso— Sonrió y se acercó a el vientre de su hermana —Si puedes escucharme, si quieres nacer en la semana de mi boda me harías un gran favor—

—No la escuches, está loca— Cada quién se acomodó en su lugar —Te voy a extrañar cuando te vallas a Roma—

—Yo también, pero ya cumplieron el año aquí, si lo pláticas te puedes ir con Cristopher y el bebé a Australia—

—Ya he hablado de eso con Criss, no es mala idea pero nos queremos esperar a que te vayas y que no se vea tan repentina nuestra partida—

—Bueno, solo les falta un mes y ya cada quien a dónde les pertenece—

—¿Un mes?— Victoria asintió —Ay, entonces falta poco para que nazca—

—No sé si alegrarme o tener miedo cuando empieces en labor de parto— 

—Voy a tener que sacar a alguien por la vagina, Cristopher se va a tener nada de nada mínimo en un mes —Se pusieron a reír—Ayúdame a pararme, cada vez me duele más la espalda—

—Sin ofenderte, ¿Estás embarazada o estás envejeciendo?—

—Cállate que algún día también tendrás hijos y me voy a burlar de ti cuando ya no te puedas mover—

—Créeme que estando con NamJoon no va a salir ningún hijo de ese matrimonio—

—Bien, pero tus escapadas con Yoongi no creo que te hayas cuidado—

—Es imposible que esté embarazada, mi periodo llegó con regularidad—

—Eso me calma— Empezaron a caminar hacia la entrada —¿Para que tengo que acompañarte?—

—Vas a venir conmigo porque vamos a comprarte un vestido muy bonito—

—¿Vestido?  Ya tengo muchos, y el que voy a usar para los próximos eventos ya están apartados—

—Eso ya lo sé, quiero comprarte un vestido para que te sientas cómoda, porque siendo sinceras, esos vestidos están a punto de romperse—

—Si me siento incómoda— Lo meditó un poco  —Bien, por única ocasión te voy a aceptar el favor—

—¡Gracias!, sirve que después comemos algo y ya después vemos que hacemos—

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—Ya me compraste muchas cosas, ¿De dónde sacaste tanto dinero?—

—Te recuerdo que yo trabajo y gano mi propio dinero— Sonrió y empezó a caminar —Y mi sobrino merece estar cómodo aunque sea el último mes— 

—¿Y que has estado pensado en todo el camino? ¿Es sobre la boda?—

—No es eso— Se detuvo y tomó las manos de su hermana —Rosé creo que tenemos que hablar antes de que haga todo lo que tengo planeado—