Las Tres Lunas

Verano

Unos días después de haber llegado al castillo de, todo parecía aún más hermoso que en sus recuerdos. El verde intenso de los arbustos y las hojas de los árboles, el crujido del sendero de grava bajo sus pies, el aroma del aire limpio y fresco del campo, y la luz del sol haciendo brillar los vidrios del castillo como esmeraldas.

-Buenos días.- dijo Ji-hyo, algo cansada.

-Buenos días, a ti también, querida.- Respondió Victoria.

-Buenos días, a todos.- Respondió NamJoon.

-¿Como pasaron la noche?.- Preguntó Ji-hyo, mientras preparaba el desayuno.

-La verdad es que mucho mejor de lo que pensé.- Respondió Nam, mientras se sentaba a la mesa.

-Sin duda, todo sigue igual que antes.- Dijo Angeline, con un tono un poco sombrío.

-No, eso no es cierto.- Respondió Kim, tomando la mano de Victoria y sonriendo. -Ha cambiado mucho, y ya se siente como un hogar, mi hogar.- Victoria sonrió y se sentó en silencio, mirando a NamJoon, que seguía hablando con las demás.

-Nam, he estado pensando algo.- Dijo Ji-hyo, con cautela en la voz. -Aprovechando que estás aquí, quería preguntarte si puedo salir a pasear con Victoria por el campo. Si no te importa, claro.-

-Por mi parte, no hay problema, solo prometan regresar pronto.-

-Lo prometemos, volveremos a tiempo.- dijeron Victoria y Ji-hyo al mismo tiempo.

Angeline sonrió y dijo: -Bien, en ese caso, desayunen algo ligero y prepárense.-

[ . . . ]

-¿Cómo que te vas a casar con Marianne?- preguntó Jin, incrédulo.

-Sí, pero no ahora.- Respondió Yoongi, con calma.

-¡Aún así, te vas a casar!.- Exclamó, agitando sus brazos.

-Tienes razón, pero no te preocupes, todavía me queda mucho por vivir.-

-A mí no me importa si te falta por vivir o no, pero me sorprende que en tan poco tiempo hayas encontrado a alguien más.- Dijo Jin, con sorna.

-Estoy haciendo lo mismo que hizo Victoria.-
Respondió Min, encogiéndose de hombros.

-Mi hermana.- dijo, haciendo entonación en la palabra. -No se casó por amor, y dudo que tú lo hagas.-

-Las razones por las que ella se casó son asuntos suyos, y mis razones son asuntos míos.-

-Casarse por venganza no es una razón.- Dijo Kim, agachando la cabeza.

-No me estoy casando por venganza, esto es lo que me hace feliz.-

-Pero cuando fuimos a Roma, estabas convencido de recuperar a Victoria.- Habló, con una mirada desafiante.

-Sí, pero después de ver su hogar y cómo era su vida, supe que yo ya no formaba parte de su vida.-

-No tienes que arrepentirte de intentarlo.- dijo Jin, dando una palmadita en el hombro de su amigo. -¿Aún la amas?.-

-Y tú ¿aún lo amas?.- Respondió Yoongi, con una sonrisa irónica. -Aún la amo.-

-Aún lo amo. Pero, si ellos están bien, nosotros también.- Dijo Jin en un suspiro.

-Son felices ellos, ¿y nosotros?- Preguntó Yoongi, con una expresión interrogativa en la cara.

-No tengo nada que quejarme.- Respondió Kim, aunque su sonrisa no parecía tan sincera.

-Pero sabes que aún no has encontrado a alguien con quien compartir tu vida.-