"pequeñas historias (1)"

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Dentro de la cede de la prestigiosa familia Hera dónde vivía cierta mujer considerada como un mounstro del talento.

Para muchas personas fuera de su círculo social reducido a solo pocas personas esta mujer era un punto inalcanzable para cualquier persona que intentará cortejarla.

Todos conocían a esta chica como "silencio" quien su poder podía comparar se con los más fuertes de orario aún estando en menor nivel.

Está chica normalmente se encontraba trabajando en silencio mientras pasaba los días uno tras otros.

Solo vivía por una persona y esa era su hermana metería.

Cuidando la como lo más importante que tenía alfia en su vida.

Adiferencia de ella su hermana era bastante débil pero con un corazón de oro.

Era como una princesa de porcelana a su ojos.

Bella y hermosa pero bastante frágil que podía romperse en cualquier momento.

Su extraña enfermedad hacia que tuviera que pasar mucho de su tiempo en cama.

Internamente alfia se culpaba de la condición de su hermana, sentía que mientras estaban en el vientre de su madre le quitó a su propia hermana toda posibilidad de tener una vida normal.

Por eso ahora como un auto castigo personal dedicaría su vida a proteger a su hermana quien parecía haber nacido con todo lo malo.

A diferencia de su hermana alfia nunca presentó algún tipo enfermedad como ella, alfia era una mujer sana y poderosa, sin problema ella podría ser la aventurera más poderosa de orario si se lo propusiera.

(Se que la alfia canon si estaba enferma pero está no y ya verán por qué en el futuro, no quiero comentarios de "pero alfia si tenía la misma enfermedad que su hermana" ya lo se, pero como en todos los fanfic siempre nos desviamos de la realidad de la historia oh por qué creen que existe la frase "no se le puede mentir a un dios" y luego el 80% de historias de traición si se les puede mentir, incluso yo uso esto)

O la menos si se lo volviera a proponer.

Ahora alfia tenía una nueva responsabilidad y una nueva forma de ver las cosas.

Todo gracias a cierta persona que dormía en una cuna frente a ella.

Alfia miraba la cuna donde yacía su primer y único hijo.

Desde la llegada de esta persona a su vida su rumbo cambio de sentido.

Ahora la gran "silencio" una mujer callada y que todos tenían por su furia.

Estaba al pendiente total de su hijo quien estaba recostado en una cuna frente a ella despierto.

Desde la mañana alfia lo a estado viendo de forma tranquila, o al menos la primera media hora, luego paso a una mirada de examinación para después una de preocupación y por última una de miedo.

Todo mientras su bebé estaba despierto jugando con sus propias manos observando sus dedos y bostezando en momentos.

La pierna inquieta de alfia se veía impaciente ante la vista de su pequeño de pelitos y ojitos de color plateado.

Alfia: mnn,-pensando- algo debe de estar mal, un bebé no puede mantenerse así por mucho tiempo.

Para la vista pública solo había un bebé despierto observando el mundo a su alrededor y una madre cuidando de este.

Pero a ojos de la madre las cosas parecían estar en una crisis.

Fuera de su habitación una diosa caminaba tranquila hacia la puerta donde se encontraba la pequeña familia de dos.

hijo del talentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora