𝘮 á 𝘴 𝘤 𝘢 𝘳 𝘢 𝘥 𝘦 𝘳 𝘢 𝘵 ó 𝘯 ☆ 🄷🅈🅄🄽🄺🄽🄾🅆

𝙘𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧: 𝙛𝙤𝙪𝙧𝙩𝙚𝙚𝙣

alerta de smut¡!

ㅡ Sigue, por favor.

Y con obediencia acompañada de una sonrisa lasciva, Hyunjin nuevamente unió sus labios a los del mayor, desesperado, chocando cada tanto sus dientes con los ajenos y moviendo sus caderas sobre la entrepierna de Minho, ocasionando un roce tortuoso que le quitaba jadeos a ambos.

Minho, ahora con más confianza, bajó ambas manos que sujetaban la cintura del menor hasta llegar a sus glúteos.
Exploró el nuevo terreno, soltando un suspiro al apretar la superficie y sentir sus dedos hundirse sutilmente sobre ambos músculos del pelirojo.

Hyunjin se removió, sus manos tomaron la prenda superior del castaño, y con cuidado se deshizo de ella.

Poco a poco, entre besos y mordidas, fueron despojándose de sus prendas, hasta que por fin, ambos quedaron tan solo con sus ropas interiores.

Minho se tomó el tiempo de apreciar la figura de Hyunjin.
Poseía un bonito cuerpo marcado, con una cintura diminuta y una tez pálida pero con un dulce color cremoso. El cuerpo de Hyunjin era digno de una escultura, el arte no sólo era parte de la vida diaria del pelirojo, sino también de su propio cuerpo.

En cambio, el cuerpo de Minho había cambiado en los últimos dos meses, sus músculos habían disminuido ligeramente y ahora su cuerpo era más delgado, pero aquel abdomen marcado con una bella cicatriz en él se hacía notar.

Los labios del pelirojo ahora viajaban sobre la piel acaramelada del mayor, dejando algunas cuantas marcas sobre sus clavículas.
Minho, mientras tanto, suspiraba, metiendo sus manos sin pena dentro del boxer del menor, amasando con firmeza sus nalgas.

La impaciencia de Hyunjin era demasiada, su miembro lloraba por atención también, por lo que no dudó más antes de quitarse su propia ropa interior y hacer lo mismo con la del mayor.

ㅡ ¿Qué es lo que quieres, hyung? ㅡ La voz, ahora ronca y seductora de Hyunjin, invadió los tímpanos de Minho, ocasionándole un cosquilleo en su espina.

ㅡ ¿A qué te refieres? ㅡ La confusión en el tono del mayor era notoria, haciendo reír al contrario.

ㅡ Seré más directo esta vez... ¿quieres estar dentro mío o prefieres que sea yo quien entre? ㅡ La poca discreción en la voz del menor impactó ligeramente al castaño, pero aún así, este lo pensó.

ㅡ ¿Por qué no probamos ambas?

Minho supo, en ese entonces, que su respuesta había más que complacido a Hyunjin, puesto que su sonrisa lo delató.
El pelirojo asintió, y sin dar muchas más vueltas, continuó con su labor, cortando la distancia de sus pelvis y tomando ambos miembros con una mano, masturbándolos a la vez y quitándole jadeos ruidosos de los labios a su mayor.

Por otro lado, el castaño mantuvo sus fuerzas, llevándose dos dedos a su boca, humedeciéndolos con saliva suficiente para lograr acercarlos a la entrada del menor.

El primer dedo entró, y el primer gemido de Hyunjin se escuchó por la habitación, haciendo que el cuerpo de Minho reaccionara naturalmente y su miembro palpitara.
Movió entonces, su dígito de forma lenta, profunda y amplia, lo suficiente para lograr introducir un segundo dedo y robarle otro gemido más de los labios al menor.

Continuó dilantando su entrada por un momento, y al momento de tantear terreno para introducir un tercer dedo, Hyunjin lo detuvo con su mano libre.

ㅡ Ya está bien, te quiero dentro de una vez, hyung... ㅡ Los jadeos escapaban de la garganta de ambos.

Minho no respondió más que con un simple asentimiento, y luego, quitó la mano de Hyunjin de ambos falos para lograr tomar sus caderas y elevarlas.
Alineó su miembro rápidamente, y antes de siquiera soltar las caderas de Hwang, este ya se encontraba empalándose a sí mismo, soltando un gemido tan fuerte que fue capaz de recorrer toda la habitación.

Y Lee tampoco se quedó atrás, liberando un gemido ruidoso al sentir las paredes internas del menor estrangular su miembro.

La dilatación evidentemente no había sido suficiente, pero aún así, entre los fluidos de ambos, no costó demasiado trabajo que entrara de una sola estocada.

Ambos respiraron profundamente, intentando relajarse antes de que Hyunjin comenzara a moverse poco a poco, aumentando cada vez más la velocidad y la profundidad de sus saltos sobre el mayor, gimiendo contra el oído de este mientras sus temblorosas manos se sujetaban casi sin éxito de los hombros del contrario.
Minho aún así, sostenía con firmeza las caderas de Hyunjin, ayudándolo a brincar también, soltando, cada tanto, algunas fuertes nalgada que resonaban por la habitación y provocaban que el pelirojo liberara algunos gritos agudos.

El morboso sonido de las pieles chocar junto con sus respiraciones agitadas, la cama rechinar y los gemidos poco discretos inundaban cada vez más el cuarto.
El ambiente era intenso y caliente, poco a poco Minho sentía que estaba por llegar al clímax, por lo que de pronto, detuvo los saltos de Hyunjin, quien lo miró entre confundido y molesto.

Ahora era el mayor quien se encontraba entre las piernas del pelirojo, apoyándose en sus brazos para no aplastar el cuerpo ajeno y tomando el cuello del menor antes de comenzar a moverse con fuerza.

El movimiento de sus caderas era tosco y veloz, casi violento. Hyunjin se aferraba con fuerza a la espalda de su mayor, arañando inconscientemente su piel y sintiendo cómo su punto dulce era maltratado sin piedad, haciendo que sus ojos lagrimearan suavemente.

ㅡ H-hyung... ¡hyung!

El primero en llegar exitosamente a su orgasmos fue Hyunjin, manchando su propio torso y también el de Minho, soltando un gemido alto y largo mezclado con un jadeo ruidoso y arqueando su espalda por culpa de los espasmos de su cuerpo y los movimientos del mayor que no se detenían.

Pronto, el castaño logró correrse también, llenando el interior del menor y gimiendo ruidosamente contra la piel ajena, jadeando con desespero e intentando recuperar aire.

Ambos se quedaron en aquella posición por unos pocos segundos antes de que Minho saliera del interior del pelirojo y se echara a un lado de este.

El silencio volvió a reinar. Un silencio cómodo, donde sólo se oía cómo poco a poco la respiración de ambos se iba regularizando.

ㅡ ¿Te molesta si me esperas hasta que me recomponga, hyung? porque no creo poder mover las caderas como se debe aún, y la verdad, me gustaría follarte como corresponde.

Minho no pudo evitar reír, sin notar lo ronca que su voz se encontraba.

ㅡ No te preocupes, tómate tu tiempo, Hyunnie.

ㅡ Gracias... ㅡ De pronto, la voz cansada de Hyunjin cambió el ambiente. El cuerpo exhausto del menor se volteó hacia el lado del mayor, rodeando la cintura de este y ocultando su rostro dentro del espacio entre su cuello.

Minho no movió ni un músculo, procurando no molestar al pelirojo, tan solo se voletó al lado contrario, tomando la mano del menor que rodeaba su cintura y entrelazando sus dedos, con la intención de descansar.

Pero le era difícil conciliar el sueño. De un momento a otro se encontraba sumido en sus propios pensamientos, pensando en que si lo que había ocurrido era lo correcto, en cómo afectaría a futuro su relación con... su secuestrador.

ㅡ Hyun... ㅡ Llamó el mayor, pero no hubo respuesta, por lo que no quedó más que asumir que el menor ya estaba dormido.

No mucho tiempo tardó en darse cuenta Minho de que, sin notarlo, Hyunjin no había vuelto a encadenarlo, y frente a él, estaba la puerta de la habitación, completamente a disposición suya.

Tenía todas las opciones abiertas, a su merced, tan sólo tenía que ejecutar aquello que creía... creía que ansiaba; escapar.

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1274 palabras

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abro espacio para mí, y para agradecer el apoyo que está teniendo esta historia. no saben lo feliz que me hacen sus comentarios positivos y lo mucho que me alientan a seguir escribiendo (y también lo mucho que me divierte y entretiene leerlos, porque sí, leo absolutamente todo).

ahora, dejando de lado lo sentimental, jdnfkd, sean sincerxs, ¿créen que Minho intente siquiera escapar? lxs leo.👀