𝘮 á 𝘴 𝘤 𝘢 𝘳 𝘢 𝘥 𝘦 𝘳 𝘢 𝘵 ó 𝘯 ☆ 🄷🅈🅄🄽🄺🄽🄾🅆

𝙘𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧: 𝙚𝙡𝙚𝙫𝙚𝙣

ㅡ Buenas noches, oficial, ¿qué se le ofrece? ㅡ Hyunjin sostenía la puerta, asomando sólo una parte de su cuerpo mientras mantenía una sonrisa suave, pero con obvia incomodidad, con su frente sudada y la respiración irregular.

ㅡ Buenas noches, soy la oficial Park Jihyo. Por si no sabía, desde esta mañana hemos iniciado una operación de búsqueda intensa para encontrar el paradero del joven Lee Minho, quien lleva desaparecido ya casi dos meses. ㅡ La mujer sacó una fotocopia, con el rostro del castaño impresa en ella, junto con algunos datos básicos del chico.

ㅡ Oh, Lee Minho... ㅡ El pelirojo se enderezó, tomando la fotocopia entre sus manos y analizando esta con cautela. ㅡ Sí, lo sabía, de hecho, él es mi compañero de clase.

ㅡ ¿En verdad? ㅡ El interés en la voz de la policía era notorio y real. ㅡ Y entonces, ¿qué tan cercanos eran?

ㅡ No mucho, para ser sincero, creo que habremos cruzado palabras unas pocas veces en el salón... pero también fue mi tutor de inglés por una tarde, sólo que no volvió luego de eso. ㅡ Hyunjin soltó una risa tenue, aún con su mirada clavada en la hoja que traía entre sus manos. ㅡ Supongo que habrá notado mis tontos intentos de coqueteo y lo ahuyenté.

ㅡ ¿Coqueteo? ¿acaso tenía sentimientos románticos por Lee?

Hyunjin negó repetidas veces, casi evadiendo por completo la pregunta, pero luego agregó.

ㅡ Para nada, sólo me parecía demasiado atractivo, apenas lo conocía, ¿cómo podría sentir una atracción más allá de lo sexual con lo poco que conocía? ㅡ El menor se tomó una pausa, queriendo reír en su interior por lo convencida que se veía la mujer con sus respuestas inventadas. ㅡ Espero que no le incomode, pero no me suelo guiar por el corazón, si entiende lo que digo.

ㅡ Comprendo bien... por último, y espero no ser ya una molestía, ¿me dejaría dar un vistazo a su propiedad? ㅡ Jihyo sonrió con suavidad, tomando el cinturón de su uniforme. ㅡ Será superficial, a no ser que encuentre algo sospechoso, obviamente.

ㅡ Oh... claro, no habría problema si no fuera porque estoy en una situación un tanto... íntima.

ㅡ ¿Cómo dice? ㅡ La castaña preguntó con confusión, ladeando su cabeza y frunciendo el ceño.

ㅡ Invité a un chico a cenar a casa mientras mis padres no están y, justo antes de que usted llamara a la puerta, el ambiente se estaba poniendo algo... privado. Tuve que vestirme antes de abrir, obviamente.

ㅡ Oh, no, no se preocupe, lamento haber arruinado el ambiente. ㅡ Las mejillas de la mayor se tornaron de un color rosado, mientras desviaba la mirada, avergonzada. ㅡ De cualquier forma, aquí está mi tarjeta. Si sabe o necesita algo, no dude en llamar, será de gran ayuda.

Hyunjin asintió, tomando la tarjeta que le era entregada, y antes de cerrar la puerta, se despidió amablemente de la oficial, dándole una sonrisa dulce.

Una vez dentro, golpeó una de las paredes con furia, causando un estruendo, pretendiendo liberar su estrés de aquella forma.
Volvió al comedor, mirando a Minho, quien se encontraba sentado en la silla, esposado y con los ojos rojos, repletos de enojo y lágrimas de angustia.

El pelirojo se acercó al mayor, poniéndose en cuclillas frente a él y respirando profundamente antes de poder hablar.

ㅡ Lo lamento... de verdad lo lamento, hyung, no quise asustarlo así, sólo que... la situación de Jeongin es un tanto complicada, pero no tiene que temer por él, está con vida.

Minho quiso hablar, pero la cinta en su boca se lo impedía, y Hyunjin, al notar esto, se la quitó con sumo cuidado.

ㅡ ¿Está aquí? ¿lo tienes aquí? p-por favor, déjame verlo, quiero verlo, Hyunjin, te lo suplico... ㅡ El castaño sollozaba, y aquellas últimas tres palabras dejaron en shock al menor.

ㅡ Yo... no puedo, no aún, no es seguro, pero prometo que lo verás otra vez, por favor, confía en mí, hyung. ㅡ Hyunjin acarició con cuidado la mejilla del mayor, intentando quitar las lágrimas que caían de sus bonitos ojos café, hablándole con un tono de voz suave y extrañamente dulce.

Minho sólo lloró, no dijo más, únicamente lloró, bajando su cabeza y sollozando con desespero.
Y Hyunjin se acercó a él, abrazándolo con una calidez que Lee nunca había podido sentir, pero podía asegurar que era genuina y cómoda.
"Extraño" pensó, sintiendo lo irónico que era recibir tal comodidad de parte de la misma persona que acaba de hacerlo llorar, y además, lo tenía secuestrado.

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El cabello de Minho había crecido demasiado, incluso podía asegurar que faltaban sólo unos dos centímetros para que llegara a sus hombros.
Fuera de afeitarlo o haberle brindado una higiene básica pero constante, Hyunjin no había tocado el cabello del mayor.

ㅡ Hyunjin... ㅡ El castaño llamó la atención del menor, y los felinos ojos de este, se clavaron sobre los suyos al instante. ㅡ ¿No crees que mi cabello está demasiado largo?

ㅡ Uhm, tal vez, pero te queda bonito. ㅡ El pelirojo sonrió con dulzura, mientras seguía dando pinceladas sobre el lienzo hasta acabar con la capa de barniz. ㅡ ¿Acaso te molesta o sólo quieres cortarlo?

ㅡ No lo sé, la última vez que lo tuve tan largo fue cuando apenas era un niño... ¿de verdad crees que me queda bonito? ㅡ Las mejillas de Minho, por alguna razón, se tornaron de un suave rosado, haciendo que desviera su mirada al sentir el calor en su rostro.

ㅡ A mis ojos, eres completamente bonito, hyung, incluso si decidieras raparte el cabello, seguirías siendo bonito... pero sí, eso creo, y estoy seguro de que no me equivoco. ㅡ Hyunjin se levantó, tomando el lienzo y mirando este por unos segundos, apreciando el resultado con una sonrisa. ㅡ Dime, ¿qué piensas?

Hyunjin volteó el lienzo hacia el mayor, mostrando con orgullo su obra.

Minho apreció también cada detalle mínimo de esta, y apenas al final, notó que el rostro reflejado, no era de nadie más que el suyo.

El perfil de Minho, angelical y perfectamente simétrico, rodeado con unas bonitas flores color morado, pareciendo casi una fotografía al haber sido creado con tanto detalle era plasmado en aquella obra de arte hecha por el menor.

Las mejillas de Minho tomaron mil veces más calor que antes, su boca se abrió con asombro y sus ojos volvieron a brillar por un instante.

ㅡ ¿S-soy yo?... es increíble, parece casi una fotografía, estoy sorprendido, Hyun.

El notorio sonrojo ahora en las mejillas del pelirojo, no tardó en aparecer también.

Se acercó al mayor, aún sosteniendo el cuadro, y sonrió.

ㅡ Entonces, ¿sí te gustó?

ㅡ Claro que sí, no tengo palabras, nunca nadie se había tomado el trabajo de plasmarme en alguna pintura o dibujo. ㅡ La sonrisa suave de Minho era sincera al igual que sus palabras.

De pronto, los labios aterciopelados y carnosos de Hyunjin chocaron contra los de Minho, envolviéndose en un beso suave y corto, finalizando con los labios entreabiertos del mayor por la sorpresa y una bonita y, casi, inocente sonrisa en los del menor.

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