𝙘𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧: 𝙩𝙝𝙞𝙧𝙩𝙮-𝙩𝙝𝙧𝙚𝙚

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Changbin caminaba por los pasillo del instituto con sus audífonos. "Custer" de Slipknot sonaba a todo volumen.

Esa tarde tuvo que quedarse (obligadamente) más tiempo de lo usual debido a que debía asistir a sus clases de tutoría... Inglés definitivamente no era su asignatura favorita.

Su concentración en la música se disipó al chocar con alguien, provocando que uno de sus audífonos inalámbricos se cayera al suelo.

ㅡ Lo siento, hyung. ㅡ Pronunció el chico, tomando el audífono del suelo y extendiéndoselo a su propietario.

Seo tan sólo miró a Hyunjin a los ojos por un segundo y tomó su audífono, sin responder a sus disculpas. Se dio media vuelta, pretendiendo continuar con su camino.

ㅡ Bin. ㅡ Le llamó la atención el pelirojo.

El pelinegro paró en seco, sin mirarlo. Sabía que Hwang tendría una sonrisa cínica en el rostro, podía sentirla detrás de él.

ㅡ ¿Qué quieres? ㅡ Indagó vagamente el mayor.

ㅡ Uh, creo que despertaste del lado equivocado de la cama. ㅡ Hyunjin rió, Changbin se impacientó y volteó a verlo de la forma más amenazante posible, clavando sus afilados y oscuros orbes sobre el menor. ㅡ Tranquilo, tigre, sólo quiero sacarme una duda de encima.

ㅡ Habla, no tengo tiempo ahora.

ㅡ ¿Te sucede algo conmigo? ㅡ Preguntó el pelirojo, acercándose a Seo poco a poco. ㅡ Presiento que tienes mucho por decirme.

ㅡ ¿No crees que sólo estás perseguido, Hwang? apenas cruzamos palabras en todo el año, ¿por qué tendría que suceder algo contigo?

ㅡ Mi intuición no se equivoca, Changbin, créeme. ㅡ Hyunjin sonreía, casi como si tomara aquella conversación como algo casual.

ㅡ ¿Quiéres que te sea sincero? ㅡ El azabache elevó una ceja, recibió silencio como respuesta, y se volteó completamente, quedando cara a cara con el menor. Pasó su lengua por sus dientes, y luego continuó. ㅡ No me caes nada bien, no te debo explicaciones, es todo.

ㅡ Aún así me gustaría saber la razón, estoy seguro de que no se debe a una razón vaga.

ㅡ No te la debo. ㅡ No dijo más, dio por terminada la conversación y volvió a voltearse, caminando para lograr alejarse del pelirojo, pero nuevamente aquella voz lo aturdió.

ㅡ Uhm, bien, cuídate entonces, Changbin... y no vayas solo por los pasillos. ㅡ Aquel comentario sonó casi como una despedida normal, pero Seo sabía que no lo era.

Las palabras del menor hicieron que volviera a frenar en el lugar.
Respiró, pensó, e inevitablemente soltó una risa.
Tan sólo volteó ligeramente su cuello para que el menor pudiera oírlo.

ㅡ No pretendas asustarme, Hyunjin. ㅡ Sintió, muy en su interior, que lo que estaba por decir era firmar su propia muerte, (y no una rápida) pero aún así, termino por volver a acercarse a Hwang, quedando a centímetros de él, ambos con sus miradas clavadas sobre el otro, desafiantes y amenazantes. ㅡ No eres el único que tiene sangre en sus manos, si es que por eso que te crees tan gran cosa.

Changbin pudo ver através de los ojos oscuros y profundos de Hwang, pudo ver su alma y lo aterrada que estaba por un momento al oírlo. De pronto, la máscara de Hyunjin se cayó por un segundo, y no pudo evitar sonreír ante eso.

ㅡ Y por favor, no olvides tus honoríficos, Hyun. Puede que seamos compañeros de salón, pero sigo siendo tu mayor, me gustaría que me trates como tal. ㅡ La sonrisa en el rostro de Changbin era imborrable. Tomó el hombro del menor, palmeando este antes de darse la vuelta y, por fin, continuar su camino.

Mientras, la amargura en el interior de Hyunjin subía por su garganta, y sus ojos, ardían en ira.

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ㅡ Quédate quieto, Han Jisung. ㅡ Minho intentaba ser cuidadoso, quería que todo quedara lo más prolijo posible, pero el inquieto cuerpo del menor se lo impedía.

ㅡ Lo siento, pero si sigues poniendo canciones de Taylor, ¿cómo no quieres que cante y baile, hyung? ㅡ Han suspiraba, enderezando su espalda e intentando contenerse de no cantar a todo pulmón "Lover" de Taylor Swift para que su mayor lograse terminar de colocarle la tintura de cabello.

Minho sólo volteó sus ojos, y luego de unos minutos, acabó con su arduo trabajo.

ㅡ Ya, pronto dejarás de ser Jisung pelinegro para ser Jisung pelinegro con mechones azules.

ㅡ Dios, estoy demasiado nervioso... ¿crees que me quedará bien? ㅡ El menor se volteó para ver a su amigo con los ojos brillando, como los de un cachorro asustado.

Lee soltó una risa, asintiendo con seguridad, pero aún así, reforzando su creencia con algunas palabras.

ㅡ Te verás genial, serás como uno de esos chicos lindos de Pinterest.

El pelimorado logró sacarle una risa a Jisung, y también, algo del peso que llevaba en sus hombros.

Esperaron el tiempo suficiente para que la tintura en el cabello del chico se absorbiera mientras conversaban de temas triviales o cantaban canciones y bailaban juntos.
Y una vez cumplido el tiempo, Minho se encargó de lavar la cabeza del menor y secarle el cabello.

Al terminar, se puso de pie frente a Han, apreciando el nuevo estilo de su mejor amigo, estilo que él mismo había creado.

ㅡ Tenía razón, te ves genial, Sung. ㅡ Minho sonreía en grande, mientras las mejillas de Jisung se tornaban de un fuerte carmín.

De pronto el timbre sonó, y seguido a este, tres golpes se escucharon en la puerta principal.

ㅡ Oh, pasa al baño y mírate, tengo que ir a ver quién es.

Jisung asintió, y luego Minho salió de la sala para dirigirse a la puerta principal.

Al abrirla quedó petrificado por un momento.
Los ojos de Hyunjin se clavaban sobre los de él como dagas, sentía que el menor le observaba el alma tan sólo para torturarlo.
De pronto se sentía pequeño, diminuto, indefenso.

Hyunjin sólo permanecía allí, observándolo, con una expresión casi muerta, a excepción de sus ojos que ardían en furia, y el mayor lo sabía, lo notaba.

ㅡ H-hyun... ㅡ Antes de siquiera terminar, Lee ya se encontraba siendo empujado con brusquedad y estampado con violencia contra la pared del interior de su casa. ㅡ ¡¿Qué demonios te sucede?!

ㅡ Changbin lo sabe. ㅡ La voz rasposa y grave de Hwang, casi dominante, hizo temblar al mayor. O tal vez había sido sólo lo que dijo, Minho en ese momento no lo sabía descifrar.

De pronto Jisung hizo presencia, confundido y hasta exaltado por la escena.

ㅡ ¡¿Qué mierda, Hyunjin?! ㅡ Un furioso Han amagó a acercarse al pelirojo, pero antes de siquiera hacerlo, Minho ya lo había detenido.

ㅡ Vete, Jisung.

ㅡ ¿Q-qué?...

ㅡ Vete ahora, estoy bien, pero tengo cosas que resolver con Hyunjin. ㅡ Minho miró a su amigo, incluso aunque le fuera casi imposible quitarle los ojos de encima a Hwang, y Jisung no se encontraba nada convencido al respecto. ㅡ Por favor... ㅡ Insistió, y al menor, no le quedó más que obedecer.

Jisung se fue, inseguro y algo atemorizado. Algo en su interior le decía que la vida o integridad de su mejor amigo estaba en peligro.

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1191 palabras

se vienen cositas.

𝘮 á 𝘴 𝘤 𝘢 𝘳 𝘢  𝘥 𝘦  𝘳 𝘢 𝘵 ó 𝘯 ☆ 🄷🅈🅄🄽🄺🄽🄾🅆 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora