Capítulo 15: Una traición inesperada

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Todos en la fiesta se asombraron al ver a la princesa humana en una jaula. La rabia que sentía Song Qi Yue estaba apunto de explotar, pero Qing Fei no lo dejaría. Sin que nadie se diera cuenta paralizó el cuerpo de su primo y ella tomó el mando de la situación.

-Nos alegra que te haya gustado. -Dio un paso al frente. -Espero que nuestra gente esté bien.

Song San analizaba los movimientos y gestos de su prima. Finalmente decidió darle el beneficio de la duda.

-Ellos están bien, no te preocupes querida. -Sonrió amablemente con un tono de malicia.

En la cabeza de Song Qi Yue se le vinieron un montón de imágenes de lo que podría haber sucedido si se hubiese quedado en su reino protegiendo a la niña de sus ojos. Desde que llegó a ese mundo en el cuerpo del rey demonio, Xiao Zhan se había prometido cuidar de la pequeña Yan Li, lamentablemente había fracasado dos veces en su intento de protegerla.

-Yan Li, ¿en qué estás pensando? -Se preguntó él.

Ella estaba maldiciendo mentalmente a todo Dios... ¿En qué momento su historia cobró vida para hacer y deshacer a su antojo? No se podía creer que el villano de la segunda novela estuviera aquí, no le tocaba. Sin embargo, pensó que como ella había llegado a este mundo de forma inesperada, tal vez la historia había cambiando por su culpa. Claro, poco se imaginaba que no era la única que había cambiado el rumbo de ese mundo.

-Princesa de los humanos, ¿cómo te llamas? -Preguntó Song San mirándola juguetón.

Ella se levantó y caminó un poco por la jaula en la que estaba metida.

-No pienso contestar a un ser que va secuestrando personas. -Comentó Yan Li.

El rey de esa facción demoniaca la miró serio y luego soltó una carcajada. Todos rieron menos Song Qi Yue y Qing Fei.

-Me gusta, tiene carácter. No sé porqué tenía la sensación de que eras una criatura bastante débil.

-Débil tu abuela...-Se dijo para ella misma. -¡Sácame de aquí!

Las exigencias de la pequeña princesa estaban haciendo mucha gracia a Song San.

-Me gusta mi regalo querido Song Qi Yue. -Miró a su primo mayor que no gesticulaba ningún músculo de su cara. -Al menos que no haya sido mi regalo...

Intervino sutilmente Qing Fei.

-Lo es, simplemente que Yue gēge está demasiado cansado por el viaje. Sabes que no soporta mucho el frío de estas tierras. -Dijo Fei Fei mientras sostenía a Song Qi Yue.

Yan Li escuchó la voz de su shijie y dirigió sus ojos hacia ella y a su acompañante. Ahí estaba su protector sin decir una sola palabra, ni hacer ningún gesto.

-¡Song Qi Yue! -Ella lo miró con una cara de decepción y volvió a dirigir su mirada al demonio que la tenía secuestrada. -¡Eh tú! -Cambió de tono a uno más grave, porque estaba cabreada. -¡Sácame de aquí! No tengo planes de quedarme aquí toda la noche.

Song San la empezó a analizar y como le molestaba el sonido de su voz, él levantó el brazo y emitió una energía que hizo chocar el cuerpo de Feng Yan Li contra los barrotes y quedó noqueada.

Los ojos del demonio del Sur estaban rojos de la impotencia y la ira.

-Yo mismo me la llevaré. -Song San dejó que sus sirvientes sacaran a Yan Li y se la entregaron a él. La olió un poco. -La llevaré a un lugar seguro.

Todos aplaudieron su salida con la princesa de los humanos. Qing Fei aprovechó el revuelo y se llevó a Song Qi Yue hacia una de las habitaciones.

Una vez ahí le desbloqueó los puntos que lo tenían prisionero y sin pensarlo se abalanzó sobre ella apretando su cuello.

Cuando la luz conoce a la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora