Universo alterno.
Las leyendas, tienen pies y fundamentos.
A lengua de muchos las historias pierden forma y se quedan con la última versión, pero que pasaría si en la inmensidad de cada relato hay un tanto de verdad.
Mikey había escuchado mil histo...
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Si le preguntan a Shinichiro, podía poner a sus hermanos en una pirámide dejando como la más responsable a Emma por sobre los otros dos, la chica era mucho más consciente de las cosas y bastante responsable al cuidar no solo de ella, también de los otros dos y del abuelo, tenía esa gran capacidad, si Emma estaba, estaba seguro de poder irse a trabajar tranquilo, regresar sin que la casa se incendiar o algo por el estilo, porque Izana y Mikey en una solo habitación era muy peligroso. Sin amargo hoy, precisamente hoy que ella había salido, cuando volvió se encontró la una escena un tanto bizarra, la sala hecha un desastre y muchas coas regadas por ella, el culpable, o mejor dicho los culpables se quedaron estáticos cuando el entró, ver al particular gato siendo detenido por su hermanos pequeño mientras Izana levantaba en brazos a su pequeño erizo alejando lo del otro, manteniendo lo fuera del alcance del felino, un tanto gracioso debía admitir, pero pues la casa es la casa y se tiene que mantener limpia, casi como para hacerlo olvidar el desastre que estaba en la sala los dueños de los animales mandaron una mirada tierna. No funcionó, tenía suficiente experiencia liderando con sus chantajes como para caer esta vez.
-¿Que demonios esta pasado aquí? - Soltó entre molesto y divertido, pues era obvio el felino estaba tratando de comer se al otro animalito. Mientras que Izana hizo gala a sus reflejos al evitar magníficamente que este se lo llevara a la boca. En una con torsión casi digna de un gimnasta olímpico cuando el gato se safo del agarre de Mikey.
-¡MIKEY TRAJO UN GATO SALVAJE A LA CASA! - Grito el peli blanco metiendo adentro de su abrigo al erizo, para mantenerlo a salvo- ¡CASI SE COME A KA-KU!...
-Mi bebe solo estaba jugando... - Dijo lata volver a tomar lo apretó la al animalito contra su pecho, mientras el gato solo ronronea ante las caricias - Ken-chik no es malo, solo quería conocer a tu rata.
-¿Ken-chin?, Ya le diste un nombre sin saber siquiera si puedes quedarte lo Manjiro - Shinichiro llamo la atención de los otros dos, mientras que Izana miraba preocupado el ceño particularmente molesto del rubio, cuando este infló las mejillas supo que era momento de huir. No quería estar presente ante una rabieta del tamaño de las cuales se podía aventar el menor de los Sano.
Subió las escaleras rápidamente antes del discurso que Mikey le solitaria a Shinichiro con tal de querer conservar a su feo gato, a opinión del peli Blanco, pues el animal sí era más que bonito, pero trató de comerse a su pequeño erizo y eso sí no se lo podía perdonar. Al menos en un tiempo.
-Eso es tuvo cerca Ka-ku... - Dijo mientras lo dejaba a en la cama al pequeño ser, buscando en sus cajones algo en particular- No, no me agrada ese gato... - comenzó a hablar solo, como si el pequeño animal pudiera entenderle, contestar, afirmar o negar sus pláticas, siempre había sido así, desee que el pequeño llegó Izana había tenido en el al amigo que nunca tuvo- Aunque Mikey tiene razón, yo te tengo a ti, Emma tiene a su cotorra, así que si el quiere tener una mascota esta bien, solo espero que sea lo bastante inteligente y lo cuide bien... Y que no te como a ti o Hi-cha en el proceso- nombró al peculiar animal de su hermana, Emma había encontrado a su pequeña cotorrita en el parque mientras tenía el ala herida, se enamoro a primera vista de los matices rojo ámbar del animalito y fue inevitable quedarse la hasta que se repusiera, sin embargo esta se negó a irse tiempo después, ahora se la pasaba pegada a su hermana, particularmente en su hombro o en su cabeza. Escenas bizarras y graciosas que a Mikey le daban risa.
