Enamorada de mi mejor amigo.

12. La quiero, la necesito

Narra JJ:

— ¿¡Me estas diciendo que besaste a Die?! — me grito John B, habíamos dejado a Die en el Chateau después de haberla convencido de que durmiera un rato, y ahora estábamos en la va llenado a la casa de la viuda de Grubbs para preguntarle por la brújula y en el camino decidí contarle a John B.

Ya que antes de venir aquí estuvimos de acuerdo de que podíamos decirle a el, pero nada mas a el. Kiara me mataría por estar así con su hermana y Pope... Pope es Pope y hasta que no sea nada mas serio decidimos no decir nada.

— No grites, y por milésima vez, si John B. Si la bese — dije yo con una sonrisa .

— Dios mío, Dios mío, ¡Dios mio! — grito el emocionado.

— Cálmate — le dije feliz — Pero amigo eso no es todo — dije y el me miro y abrió los ojos como platos.

— ¡¿QUE?! — me grito el y paro la van, cosa que hiciera que me golpeara la cabeza con el vidrio — ¡¿Que?! — volvió a preguntar.

— ¡John B! — grite y apunte al camino que venía un auto de contramano.

El miro al frente y salió del camino rápido, se estaciono — Ahora me cuentas, por que me cuentas — dijo el apuntándome.

— Tranquilo amigo — dije yo y subí las manos — La bese por impulso pero no me arrepiento, fue el mejor impulso que hice en mi vida — dije yo feliz — Amigo es la chica mas hermosa de el maldito mundo, y no me aparto de una patada como pensé que lo haría — dije yo recordando ese momento, en donde la bese por primera vez, y oh Dios mío. Fue lo mejor que he hecho en mi vida — Me siguió el beso, y luego me sonrió y creo que casi se me cae el mundo — dije yo recordando esa sonrisa.

— Osea ¿Que aceptas que te gusta? — pregunto el feliz.

— Déjame terminar — le dije con una sonrisa — Me dijo que hablaríamos después y antes de que abrieras la bolsa con la brújula de tu papa me volvió a besar — dije una sonrisa — Y luego antes de que llegaras, que por cierto nos arruinaste el momento — dije molesto al recordar cuando estábamos tan juntos y por su culpa nos tuvimos que separar.

— Mierda, lo siento hermano — dijo el — Sígueme contando — dijo el.

— Bueno antes de que nos interrumpieras, ella me dijo que no sabía que es esto que tenemos, pero dijo que le gustaba y que quiere que sIgamos así hasta que sepamos bien lo que sentimos, pero amigo creo que me va dar algo la próxima vez que la vea y no la pueda besar, amigo — dije yo pensando en ella.

— Wow, JJ enamorado — dijo el con una sonrisa — Espera ¿Estas enamorado, verdad? — me pregunto.

— Se que me gusta, pero estoy muy seguro que creo que va más allá de eso — dije pensando — Mierda, claro que estoy enamorado de ella — dije yo pensando en todo lo que había pasado con ella.

— ¡Al fin lo aceptas! — grito el — Hermano, eres mi mejor amigo pero ella es como mi hermana y si la llegas a ...— iba a seguir hablando pero yo lo interrumpí.

— John B, yo me mato antes de hacerle daño — le dijo y el asintió — Vámonos, un segundo mas sin ella y te mato a ti también — le dije y el empezó la van y se hecho a reír.

Ahora ya íbamos en camino — Yo digo que no entiendo por que no lo intentas con Kiara, es obvio que les gustas — dije cambiando de tema — Está como "John B" — dije tratando de copiar la voz de Kiara.

— ¿Eso hace? — pregunto el siguiéndome el juego.

— Se puso nerviosa cuando buceaste y, luego, te beso — dije yo.

— Me beso en la mejilla — se excusó el — No es que nos besáramos ni nada — termino.

— Es presa fácil. No finjas que no lo notas — hable tratando de convencerlo — Lo veo en tus ojos. Estas como "Me gusta" y empiezas a sonrojarte — termine de hablar.

— ¿Me sonrojo? — me pregunto.

— Sí — le dije quejándome.

— ¿En serio? — pregunto otra vez inseguro.

— Sí — le dije cansado.

Tome la brújula o bueno trate por que el se puso a la defensiva — Solo quiero verla cálmate — le dije — Debo admitir que la brújula de tu padre en el barco de Scooter es raro — dije.

— Sí, por eso hablaremos con la Sra. Lana — me respondió — Para resolver todo esto — termino de decir.

— Le encantara hablar con nosotros — dije sarcástico — No es que su esposo se haya ahogado ni nada — dije recordando de que ahora la señora es viuda.

Llegamos a la casa que parecía un lugar donde se vende hierba o que consume mucha hierba, me alegra que Die no este aquí se que no le gustan estos lugares. Pero la extraño, quiero ir con ella y abrazarla por toda la tarde, pero no se puede así que mientras más rapido salgamos de aquí más rápido puedo verla.

Se escuchaban unos vidrios rompiéndose y los gritos de una mujer muy asustada, nosotros nos preocupamos pero John B decido seguir acercándose yo me quejaba y decía que deberíamos venir otro día o más tarde pero — No, cállate, JJ — mi mejor amigo me mando a callar.

— ¡Dime dónde esta o te joderé! — grito un hombre un llanto se escucho — Te hundiré en el maldito ... — dijo un grito seguido de un golpe hicieron que nos agacháramos para que no nos vieran.

— ¡Me lastimas! — grito la señora Lana.

— Yo... — no me salían las palabras de la boca y otra vez me mandaron a callar.

— Vamos — dijo y nos seguimos acercando.

Saber que Diana no esta aquí me relaja, ella no le tiene miedo a NADA, creo que lo probo con lo de Topper. Y si ella estuviera aquí medio país se enteraría por lo que esta pasando por el escándalo que haría, ella es muy linda y protectora con quien sea, una vez incluso un Kook. Raro lo se pero así es ella, no le tiene miedo a defender a las personas ni ayudarlas en una situación de peligro, y si estuviera aquí se que hubiera entrado a esa casa y hubiera empezado a gritar para que dejen a la pobre mujer en paz.

— ¿Donde mierda puede estar? — le grito un hombre.

— No se — dijo llorando.

— ¿Ésta en esta casa? ¿O en otro lado? — pregunto molesto otra voz.

John B corrió a un ventana y yo corrí atrás de el y hice que se agachara — Cállate — me dijo y ambos nos escondimos.

— ¿Aun crees que debemos quedarnos? — le pregunte asustado.

— ¡La brújula no estaba en el barco! — grito un hombre  — ¿Dónde está, Lana? — pregunto.

— No se — dijo entre lagrimas y un montón de pintura seca cayo, yo me empece asustar más, todo esto me recordó las peleas que tuve con mi padre, mis ojos se cristalizaron. Quiero a Die, ella siempre me ayuda en esta ocasiones, la quiero, la necesito, no se como calmarme solo. Por que ella SIEMPRE está ahí.

— No escuches — me aconsejo John B al verme en este estado.

— ¿Es pintura? — pregunte quitándomela del cabello.

— Sí, es pintura — me respondió.

— Larguémonos de aquí, viejo — dijo uno de los hombres y salieron de la casa.

— Vámonos. Tiene contraban... — dije pero el me volvió a callar.

— Contrabandistas escrito sobre él — dije sin importarme que el me callara.

Salieron de la casa y nos asustamos — Cállate — susurro John B.

— Amigo, esos fueron los que nos dispararon — dijo el y yo los analice, y si, en efecto eran ellos. Toda esta mierda se esta volviendo más y más confusa.