Greta es una joven de 19 años que vive con su hermana y su hermanito. La suerte no parece estar de su lado ya que no encuentra un empleo.
Sin embargo, conocerá la mansión la mansión Heelshire, la cuál será una gran sorpresa que no se esperará. ¿Qué...
En fin, ¿a quien no le ha pasado eso de sentirse observado? Greta no le da importancia al asunto.
Sale del baño y baja las escaleras, obviamente lento esta vez, no querrá caerse de nuevo. Llega abajo y va a la cocina. Entra a la sala del lavado y levanta a Brahms de sobre el lavarropas. Lo lleva a la cocina y lo sienta en una silla de la mesa. Cambia de opinión, van a merendar ahora, no a las 5, ya tiene hambre.
Se acerca a la lacena, la abre y saca unos saquitos de té y unas galletitas dulces, los deja sobre la encimera. Prepara el agua para la pava. Una vez caliente, sirve el agua en dos tazas y a las dos les pone saquitos de té. Lleva las tazas con las galletitas a la mesa y se sienta en una silla en frente de Brahms.
Pone una taza enfrente suyo y otra enfrente del muñeco.
La merienda no es silenciosa debido al tema musical del tocadiscos. Aunque después de unos minutos se detiene. Greta se levanta de la silla y sale de la cocina. Corre hacia el salón.
Ya allí escoge otro disco y lo pone en el tocadiscos y comienza a sonar otra música. Por suerte el nuevo tema ya no es tan irritante. Regresa a la cocina.
Al llegar observa que en la taza de Brahms ya no hay té, está completamente vacía. Ella vuelve a su taza y termina su té también, luego levanta la taza y la de Brahms y las lleva al lavado. Esta vez se anima a lavarlas ya que anteriormente no lavó el plato del almuerzo.
A partir de ese momento Greta dejó de contar las horas. Hizo cosas como pegarle otro llamado a Sophia, escoger un libro de cuentos adecuado, y luego cenar. Hasta que por fin llegó la hora de dormir.
Greta se dio un baño caliente y luego se cepilló los dientes. Al terminar fue con el muñeco a la habitación de éste, le puso su pijama, lo recostó en la cama y le tapó el cuerpo con la frazada.
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Tomó el libro de cuentos que había dejado en la pequeña mesita alado de la cama y se sentó en una sillita.
_ Ok, escucha con atención Brahms - abre el libro y comienza a relatar la historia, la cuál trata sobre un niño y una niña que van en busca de sus sueños y en medio del camino tienen miles de aventuras. A Greta le parece un cuento hermoso.
Pero a pesar de eso el deseo de dormir se hace más grande para ella. Cada tanto sus ojos se cierran sólos y luego los abre de golpe. No recuerda si llegó a terminar la historia ya que se queda profundamente dormida.
Se despierta de golpe, sus manos aún sostienen el libro y ella está como recostada en la silla y a la vez en la cama (sólo la cabeza en la cama). Se levanta rápido y mira al muñeco que está tapado con la frazada hasta la cara.
¿¿Espera qué?? ¿Cómo llegó a eso sí ella sólo le tapó el cuerpo? Le destapa rápido dejando ver su rostro que... ¡Está destruido! Pedazos de porcelana rotos hay sobre la frazada. Greta grita de horror.
Las luces de la casa comienzan a parpadear cada vez más. Se escuchan ruidos escandalosos por las paredes. Cae polvo del techo. Algo muy malo va a pasar. Una espantosa mano traspasa la pared y le toca la espalda...
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