28: pasado.

809 138 142
                                    

Sunghoon gruñó, viéndose en el espejo para luego chillar molesto cuando sus ondulados cabellos eran difíciles de peinar. Sus rulos caían sobre sus orbes y eso le dificultaba ver un poco.

── ¡Papá! ¡Ayuda a tu hijo!

El Alfa mayor tiró a un lado los snack, limpiando las migajas de su boca para ponerse pie, acercándose a su cachorro quien estaba luchando consigo mismo para verse atractivo: hoy irían a buscar a Jake a la escuela.

── ¿Por qué no te cortas el cabello? Lo tienes largo.

Sunghoon negó.

── Jake dijo que me veo muy bonito, así que no lo haré.

── Dominado, quién diría ──mofo, agarrando el peine para tratar de peinar al menor.

── ¡Papá!

── ¿Qué? No dije dicho nada malo.

Sunghoon gruño, cruzándose de brazos.

── No soy domino.

── Dominado, hijo. No domino.

── ¡Como sea! ──puchereó── Pero no lo soy. Solo... solo quiero verme guapo para mi Jakey. Quiero ver su sonrisita.

── ¿Y a mí? ¡Me tratas como tu sirviente! ──exclamó indignado── No puedo creer que mi cachorro sea cruel conmigo.

── No soy cruel. Además siéntete feliz de que Jakey es parte de nuestra familia.

Suho no podía creer lo tontito que estaba su niño por el hijo de Min-Ki, a pesar de los celos que sentía ya que su bebé no quitaba sus ojitos del niño, le hizo notar que estaba creciendo y no sólo eso, Sunghoon no dejaba que nadie se acercara a Jake, cuidándolo demasiado y el peligris en vez de reprochar, mimaba al pálidito celoso. Segundos después, agarro las llaves y Sunghoon se apresuro a ponerse perfume. 

Minutos más tarde, los Park yacían partiendo a la escuela del pequeño Jake.

Sunghoon suspiró del aburrimiento en el recorrido, decidió distraerse en tirar bolas de papel a su padre.

Ah, era un cachorro molesto.

── Hijo

── ¿Sí?

── Puedes... ¿dejar de tirarme papel?

── De poder puedo, pero mis manitos dicen otra cosa, papá.

El Alfa mayor suspiró, negándose a las palabras del menor.

── Solo... ──mofo── me saldrán cañas ──dramatizó, deteniendo el vehículo en cuanto el semáforo cambio a rojo y mientras estaban esperando, miró un momento lo ansioso que estaba su hijo por ir en busca del otro niño. Entonces, en su cabeza recordó cierto tema── Cachorro, sabes que siempre hacemos viajes por unas cortas semanas, ¿uhm?

Sunghoon asintió sin mucha importancia, viendo con entretenimiento a una persona hacer trucos en medio de las calles «¿será difícil aprender trucos?»

── Sí, papá.

── Bien ──remojo sus labios, no sabia como reaccionaria su hijo y decepcionarlo era lo menos que quería── Haremos un viaje después de año nuevo, iremos un tiempo al extranjero.

──Oh... ¿Dónde están esos parques gigantes? ¿Estaremos en la enorme oficina? ──el mayor asintió── ¿volveremos en unas semanas?

Suho se negó a mirar la inocencia de su hijo y asintió.

── Tal vez... el viaje sea un poco largo ──apretó el volante, arrancando nuevamente el camino.

── ¿Un mes?

¡𝗡𝗢 𝗦𝗢𝗬 𝗚𝗢𝗥𝗗𝗜𝗧𝗢!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora