SOBRE PROTECCIÓN Y POR DOBLE
El tiempo pasaba, 4 meses transcurrieron, ya el embarazo de Sango era algo notorio, Miroku era muy sobre protector y eso solía ser a veces algo irritante también las náuseas de la exterminadora ponían al palacio de cabeza...
-Sango ¿puedes hacerme un favor?.- le pidió Kagome.
-Claro dime ¿en que te ayudo?
-Es que se me quedó en la habitación unos papeles e Inuyasha fue a patrullar los terrenos con Shippo, Shintani y Sakamoto (recuerden cap 23) ¿podrías ir a buscármelos?.- dijo suplicante.- Tengo mucho trabajo aquí.
-Esta bien, pero ojala que Miroku no este por ahi.
Sango se dirigió como si fuera una espía a la alcoba de su amiga procurando que su amado monje no la viera subiendo escaleras, cuando cumplió con su "misión" y bajo las escaleras iba tranquilamente hacia el despacho y cuando entro cio a un Miroku desesperado.
-Mi Sanguitoooo!.- exclamó Miroku.- Te busque por todos lados ¿Cómo estás? ¿No te tropezaste con las escaleras? Sabes que te dije que no podías subirlas solas....- el resto del discurso del desesperados monje fue puro bla bla bla para Sango y Kagome reía al ver el semblante indignado de su amiga.
-Miroku te preocupas de mas.- Dijo Sango cuando el monje se tranquilizó.
-Lo se, pero no soportaría que algo les pasara.- dijo cariñosamente.
-No nos va a pasar nada, y menos en el palacio, por doquier hay youkais asi que no te preocupes.
-Esta bien, lo intentare ¿quieres ir a dar un paseo por los jardines?.- le preguntó.
-Si, vamos al que esta en el área norte, el que tiene ese bonito lago.- Refutó y ambos se fueron.
-Fui ignorada todo este rato.- dijo Kagome sentada en la mesa del despacho con los papeles que Sango le llevó mirando la puerta por la que la pareja había salido.
-Jaken ¿Dónde esta Miroku?.- preguntó Sesshomaru caminando por un pasillo acompañado de Rin.
-Lo acabo de ver en el jardín de la parte norte con su mujer, amo.- contestó el youkai verde.
-Gracias señor Jaken.- Rin le dedicó una sonrisa.
-Silencio moc... digo, señora Rin.- se retractó al notar una amenaza que lo acechaba.
-Rin, vamos.- le dijo Sesshomaru.
Llegaron al jardín donde estaba el monje quien junto con la exterminadora estaban recostados en el pasto debajo de un árbol de sakura.
-Hola Miroku, Sango.- saludó Rin.
-Oh también dando un paseo?.- dijo Miroku.
-No, lo estábamos buscando.- contestó Rin.
-A mi? Para que soy bueno?.
-Los informes de los alrededores.- dijo el Daiyoukai.
-Limpios, no hay peligro cerca pero aun así Inuyasha quiso hacer una inspección por todos los terrenos.- dijo.- Los papeles los tiene Kagome.
-Bien.- Sesshomaru se disponía a marcharse cuando...
-Sango estas bien?.- preguntó Rin al verla cubriéndose la boca y encorvada.
-Oh no, rápido necesito una bolsa o algo.- pidió Miroku y Rin hizo gesto de no tener y Sango se agarraba de Miroku.
El monje fue el sustituto de la bolsa pues Sango vomitó encima de el justo cuando una sirvienta traía la bolsa llegando tarde y el Daiyoukai hizo un gesto de asco.