Lector masculino
- ¡Lo sabía! ¡Siempre lo hice!- exclama Eudora, dándole a Diego un empujón juguetón.
- ¿¡Sabías qué!?h responde el hombre.
- Siempre supe que también lo tenías para los hombres. Era solo cuestión de tiempo antes de que salieras de tu propio cráneo duro y te dieras cuenta de que está bien-
Diego mira a su amigo antes de hacer un puchero.
- ¡Callate la boca!-
Patch solo sonríe y le da palmaditas en el hombro.
- Entonces… ¿rosquillas? ¿Celebrar tu epifanía sexual?-
- ¡Está bien, no lo llamamos así!- Diego responde, haciendo reír a su amigo- Además, todo el asunto de las donas... ¿en serio?-
- Sí, en serio. Ahora... ¿cómo te sentirías si encontraras un novio ahora que finalmente has decidido ser feliz contigo misma?-
- Bien…-
- Vaya mi dos, ya tienes novio, ¿¡no es así!?-
- ¡¡¡Tranquilo!!!- Él sisea.
Ella jadea.
- No exactamente… ¿ahora te callarás antes de que toda la ciudad te escuche? Conozco a este chico y es lindo, simplemente… no sé cómo invitarlo a salir-
- ¡Entonces seré tu acompañante!-
- Por favor no- Diego suplica.
- ¡Ay vamos Diego! Si no puedo conseguir que este chico salga contigo... ¡entonces nunca volveré a entrometerme en tu vida amorosa!-
- Todos sabemos que eso no es cierto- murmura.
- ¡Oye! Ahora... háblame de este tipo. ¿Cómo es él?-
- Bueno… es lindo… e inteligente. Bastante divertido también-
- ¿Eso es todo?-
- Mira, solo hemos estado hablando por un rato. No sé mucho más sobre él-
Mantiene la puerta abierta para Patch, con los ojos muy abiertos cuando ve a una de las personas detrás del mostrador.
- Oh, mierda….- Él susurra.
- ¿Qué? ¿Estás bien hombre? Luces enfermo- Patch sigue su línea de visión hacia uno de los trabajadores detrás del mostrador.
Diego puede ver los engranajes en su cabeza girar antes de que todo haga clic.
- ¡Oh Dios mío!- ella susurra gritos, empujando a diego hacia una mesa. - Ese es él, ¿no?-
- Bueno… sí…- murmura Diego.
- No estabas bromeando acerca de que él era lindo, pero ¿¡cuántos años tiene!?- exclama, bastante segura de que Diego tenía al menos diez años más que tú.
- Él tiene… 23. ¡Ni siquiera me des esa mirada! ¡Eso es solo como 8 años de diferencia!-
- Oh, entonces quieres ser su papi- se burla.
Patch se ríe cuando Diego la fulmina con la mirada.
- No dijiste que no... hombre travieso- Ella se ríe- Bueno, estoy recibiendo donas. Te conseguiré tu señor gruñón de siempre-
Antes de que Diego pueda detenerla, ya se dirige al mostrador. Él observa mientras ella te habla y te das la vuelta para verificar el pedido.
Regresa a la mesa con una caja y se la pasa a Diego.