Llamada 90

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El fin de semana trajo consigo la tranquilidad que Takemichi tanto deseaba.

Aquella mañana los rayos del sol traspasaban las cortinas del apartamento con intensidad, el arrullo de las aves y el clima era perfecto para dormir a gusto. Eso sí, aunque fuese el día ideal para vagar en su departamento, Takemichi decidió limpiar finalmente todo su chiquero. 

El azabache se encontraba con una mascarilla, guantes y dos escobas en ambas manos mientras observaba el panorama.

—Bien, hagámoslo. —Se animó a sí mismo mientras se arremangaba los costados de sus mangas hacia arriba de los codos.

Comenzó recogiendo las pequeñas bolsas de basura que contenían empaques de comida chatarra, ropa sucia y objetos innecesarios. Después de aquella acción, en cada rincón roseaba un ambientador, así sucesivamente iba de regreso a continuar moviendo y retirando sus cosas.

El azabache estuvo moviéndose sin parar mientras se desplazaba de un lado al otro por toda la extensión del cuarto, llevando a cabo su labor. Después de transcurrir varias horas, llevándose en un abrir y cerrar de ojos la mañana, finalmente Takemichi termino. El pequeño apartamento relucía de lo limpia que había quedado, y el sentimiento de euforia se instaló en el pecho del azabache, ocasionando una sonrisa satisfecha en su expresión. Ahora a esperar otro mes para limpiar otra vez.

Justo cuando el de orbes azules se estaba limpiando los restos del sudor de su frente, dispuesto a lanzarse al futón pulcro y perfumado, el timbre sonó a sus espaldas.

Sin tener en cuenta quien podría ser, simplemente se aproximó a la entrada, y apenas la puerta fue abierta, una cabellera oscura inconfundible se asomó en su campo de visión. Takemichi reconoció de inmediato a su pareja, y cuando iba a saludarlo, el contrario fácilmente lo esquivo, pasó de largo dentro de su vivienda y se dejó caer en su futón.

Una gota de sudor sin limpiar cayó de su frente, y Takemichi solo se quedó ahí, mirando como Mikey se frotaba tranquilamente de su almohada sin presentación ni saludo. Takemichi sabe que debería de estar molesto por haber sido pasado de alto, pero la vista ante él lo distraía bastante.

Mikey se veía muy lindo de esa forma. Pero, Mikey no lo había saludado. Aunque, Mikey estaba despeinado, quizás debía de intentar nuevamente hacerle una trenza. Aún así, Mikey lo había ignorado. Sin embargo, Mikey lo estaba mirando tan tiernamente justo ahora que podría derretirse. Joder, Takemichi tenía un problema con dejarse llevar por los caprichos de Mikey.

Finalmente el azabache se acerco sin palabras de por medio hacia su novio, y cuando estuvo arrodillado frente al cuerpo de un Mikey derrotado y semi somnoliento, Takemichi decidió formular su pregunta en voz alta.

—¿Mikey, está todo bien?

Los orbes oscuros, como dos piedras obsidianas, se fijaron en su persona por varios segundos más en los cuales se sintieron una eternidad. Aquellos ojos se mantenían brillantes y difíciles de describir en palabras, con una luz singular cuando lo tenía a él a simple vista. El sentimiento de tener toda la atención de Mikey era gratificante para Takemichi, era como si él fuera el centro de su universo.

Y quizás, aquella definición no era una total exageración viniendo de Mikey. 

No era una sorpresa después de todo, ya que con anterioridad el más bajo había dicho que él era su propia luz que iluminaba su mundo. Aquel día Takemichi había llorado demasiado ante aquella confesión. El azabache definitivamente era afortunado de recibir el inmenso amor de Mikey, y así mismo como mantenía esa idea en mente, necesitaba comprender qué le sucedía para poder ayudarlo. Si supiera qué le pasó, podría darle todo su apoyo y comprensión

Así como él lo hizo.

El silencio entre los dos continuo hasta cierto punto, porque fue cortado abruptamente por el grito ahogado que salió del fondo de la garganta de Takemichi para así ser atrapado por unos labios que lo devoraban salvajemente. Mikey había jalado el brazo del contrario, ocasionando que el cuerpo del azabache cayera encima suyo y juntaran sus labios en un beso apasionado.

La lengua cálida de Mikey exploraba la cavidad vocal de Takemichi. Mordisqueando, saboreando y succionando sus labios, luego de sentir que la temperatura subía y el placer pronto nublaría el juicio del azabache, contra su voluntad decidió separarse. Después de todo aún tenían una plática pendiente.

—M-Mikey-kun...

—¿Qué sucede, cariño? 

La voz ronca y seductora de Mikey lo hizo temblar con deleite, solo un poco. Jodida voz caliente que se cargaba su novio, pero eso no lo iba distraer, claro que no.

—No puedes venir aquí, simplemente tomar lo que quieres. Esperando que yo ceda fácilmente.

—¿Quieres apostar? 

El apretón fuerte en su trasero lo hizo estremecerse con fuerza. Aún así, Takemichi no desistió de su objetivo.

—Te preguntaré de nuevo, Mikey-kun, ¿Esta todo bien?

Con solo haber pronunciado la pregunta, nuevamente la atmosfera cambió, pero no para bien. Mikey soltó un suspiro bajo, dejando de lado la máscara que suele usar para aparentar que todo esta bien, y simplemente escondió su rostro en el espacio entre el cuello y hombro de Takemichi para así abrazarlo contra él suavemente. Takemichi correspondió el gesto, esperando pacientemente que Mikey se desahogue con él y así aquel peso que no se ve a simple vista desaparezca. Al menos un poco.

Mikey contra su piel, movió sus labios tímidamente, y finalmente habló.

—Takemitchy, ¿recuerdas aquella vez que te conté que me encontré con un viejo amigo, y la razón por la que me sentía culpable?

Takemichi asintió en silencio, motivándolo a continuar.

—Pues, verás, ese hombre... su nombre es Hanemiya Kazutora, y fue mi amigo de la infancia junto a Ken-chin, Baji, Mitsuya y Pah-chin.

—Oh. Entonces, tienen muchos años de conocerse.

—Sí, y eso no es todo. Él... mas o menos estuvimos saliendo un año.

La falta de respuesta hizo que los nervios de Mikey se dispararan, y cuando finalmente abandono el espacio que autodenomino su lugar seguro, pudo percibir en la expresión de Takemichi miedo y estupefacción.

Tendra que contar la historia desde el principio.

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¡Primera actualización del año! Y aquí seguimos, con tu llamada favorita ~ espero hayan disfrutado del capítulo, nos leemos en la próxima actu, los tkm<3

Llamada Entrante | MiTakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora