SANGRE PREDESTINADA - secuela de la serie "Chica Vampiro"

Capítulo 19: Encuentro final

VanHelisng: Veo que tenemos una invitada más -rió fuertemente haciendo que los presentes se confundieran- Adelante, Lucía Bathory -pronto se acercó un grupo de tres personas, al medio estaba siendo custodiada la mencionada-

Condesa: Este es tu gran plan, cazador, ella no tiene que ver en esta pelea, ¡Te ordeno que la dejes fuera de todo!

Van Helising: Ese es un típico problema de los naturales, siempre creen que pueden dar órdenes -todos los vampiros que se encontraban ahí mostraron sus colmillos- Bueno nobleza -miró a la joven híbrida- se une a tiempo a esta gran reunión. Cómo ve - continuó con socarronería- tenemos presentes a emblemáticos personajes vampíricos, la mayoría naturales -sonrió- ¿se preguntará por qué?

Drácula: A quién le importa muchacho, solo estás jugando a ser un cazador, no llegas a la talla de tus antepasados. Aunque fue fácil acabar con ellos, como lo será contigo.

Condesa: Acaba con este pequeño juego si quieres seguir en la faz de la tierra.

Van Helising: La tierra - rio- dónde habitan los humanos, no seres inhumanos cómo ustedes.

Lucía: ¿Quién dictó que la tierra es solo para una especie? -miró directamente al cazador- Ustedes solo son una especie que la habitan, ¿no cabe en su mente que existen más seres? La coexistencia es un hecho, no una ilusión.

Van Helising: Parte humana, parte vampira, ni siquiera tu genética decide de qué lado estás. Pero tú existencia tiene un fin Lucía -miró al gran grupo de cazadores y de dentro de este salió alguien con una gran capa que tapaba su rostro- te presento a una de las descendientes de uno de los grandes clanes de cazadores originales, pero supongo ya se conocen. -la persona misteriosa se sacó la capucha-

Lucía: M... ¿Mamá?

M: Yo ya no soy tu madre, desde el día que se activó tu gen vampiro ya no eres mi hija Lucía, no sabes cuándo hubiera preferido que el gen cazador sea el que se hubiera manifestado en ti.

Lucía: Todo ello tiene sentido, si provenimos de los hijos de la Condesa, aquellos que se convirtieron en cazadores.

M: ¡Somos cazadores!, no despreciables vampiros, lástima que tú fuiste la predestinada de la Condesa.

Lucía: Mamá solo estás equivocada, soy yo Lucía, tu hija, mis genes no tienen nada que ver en esto.

M: Tienen mucho que ver - de su costado desenfundó una gran daga-

Condesa: ¡Ya basta! No te acercarás más a Lucía - intentó ir en dirección a su descendiente para sacarla de ahí-

M: ¡Dentente si no quieres verla morir ahora mismo! -con un rápido reflejo ,la mamá de Lucía había puesto la daga en el cuello de su hija-

Todo sucedió en un segundo, un gran lobo de pelaje oscuro se abalanzó sobre la mujer que amenazaba con la daga, haciendo que cayera. El lobo continuó sobre la cazadora mostrando su afilada dentadura, solo un movimiento más y la vida de mujer acabaría; Lucía lo reconoció, era Damián, él estaba decidido matar a quien amenazaba a Lucía.

Condesa: ¡Hazlo! - se oyó su voz, ella alzó su voluntad que controlaba al lobo-

Lucía: ¡Damián no!, es mi mamá -él la miró- no la mates.

Por primera vez, aquel vínculo que hacía que obedeciera incondicionalmente a la Condesa no surtió efecto, Damián empezó a luchar con ello y con su furia de licántropo, por la petición de Lucía.

Pero durante ese instante un chillido de dolor se escuchó por parte del lobo, segundos después cayó hacia un costado, jadeando de dolor, la daga, había sido clavada en las costillas de Damián.