VIAJE DE DRAGONES

CAPITULO XX

-¿Príncipe esta ahí?

-Daemon

-Shh- dijo poniendo su dedo en mi boca para silenciarme y me tomo de la mano guiándome hacia el pasillo secreto por el que él había entrado hace un rato.

-Debes de salir por aquí si lo que quieres es que nadie te vea.

-Pero no conozco este pasillo, nunca he estado allí.

-Es fácil utilizarlo, si sigues de frente sin tomar ningun otro desvío te llevará a la salida de la fortaleza.

-Pero ..

-Ve tranquila, yo te buscaré luego para contarte lo que Viserys me diga.

-Príncipe el rey dijo que era urgente- dijo el guardia que había tocado la puerta.

-Esta bien Daemon , te estaré esperando.

Diciendo esto me interne en el pasillo y siguiendo las instrucciones que me había dado seguí hasta salir de la fortaleza lo cual seria un problema si Daemon no me hubiera dado su capa, ahora debía de volver a mis aposentos sin llamar la atención de nadie. Estaba tratando de caminar con la cabeza agachada y lo mas rápido posible cuando ante mi se interpuso una pared de carne y hueso que me hizo levantar un poco la cabeza.

-¿Muchacha a donde te diriges con tanta prisa?

Cuando no reconocí la voz , levante del todo mi cabeza para saber quien me hablaba pero no podía identificar a quien tenia en frente.

-¿Princesa?

-Disculpe no se con quien tengo el gusto.

-Mi nombre es Harwin Strong princesa.

-¿Strong? ¿Eres familiar de Lord Larys Strong?

-Desgraciadamente si princesa.

Cuando confirmo que era familiar de Larys sin darme cuenta retrocedí un paso por la conmoción.

-Princesa no debe temer , no soy cercano a Larys y por supuesto nadie en mi familia esta de acuerdo con lo que hizo en su contra, es mas estoy aquí para unirme a la guardia de la ciudad para compensar en algo el daño que mi hermano causo a la corona.

Cuando menciono la guardia de la ciudad por algún motivo hizo que mi mente recuerde lo que la historia decía de la princesa Rhaenyra y de los hijos que había tenido con un comandante de la guardia de la ciudad llamado Harwin cuando aun estaba casada, lo que hizo que sus hijos fueran llamados bastardos a sus espaldas e incluso algunos osados lo hacían en su cara. Esto hizo que se me hiele la sangre, tenia frente a mi a quien habría sido el padre de mis hijos claro si hubiera querido repetir la historia, cosa que no haría por supuesto aunque no podía negar que era realmente apuesto.

-¿Princesa se encuentra bien? - dijo intentando tomarme del brazo para ver si estaba bien, pero preferí retirarme amablemente.

-Me encuentro bien Lord Harwin, es solo que como entenderá no puedo evitar el desconfiar de alguien que este relacionado con el traidor que intento matarme.

-La entiendo princesa, y espero que pueda darme la oportunidad de demostrar que en mi si puede confiar.

-El tiempo lo dirá Lord, pero ahora si me disculpa debo regresar a mis aposentos o si no mi padre se preocupara.

-Por supuesto princesa.

-Gracias Lord, y por cierto usted nunca me vio por aquí ¿Entiende?

-Perfectamente princesa- dijo con una sonrisa que me pareció muy atractiva, ya entendía el porque la princesa lo había escogido como amante ya que parecía alguien en quien se podría confiar.