True Beauty || Sanayeon/Minayeon

XVIII

Sana golpeaba el saco de boxeo repetidas veces con su ceño fruncido mientras Ryujin lo sostenía con fuerza.

-Sana..creo que ya es suficiente...te vas a lastimar.-dijo Ryujin preocupada mientras era empujada por el saco.

-¡¿Por qué?! ¡¿Por qué?!-gritó Sana golpeando con más fuerza, su cuerpo estaba todo sudado, se tensaba con cada golpe y su cabello completamente mojado por el sudor, Ryujin soltó el saco y tomó a Sana de los hombros alejándola de este.

-Ya basta, lastimarte las manos no va a solucionar nada.-dijo mirándola fijamente y Sana soltó un suspiro

-Ven acá pequeña.-dijo atrayendo a Sana en un abrazo y esta aceptó haciendo un puchero.

-No sé que estoy haciendo mal..Nayeon me evita..y ahora se va con el chico que todos aman.-dijo Sana acomodando su mejilla en el hombro de Ryujin

-Tranquila...yo sé que Nayeon siente algo por ti..tu lo que tienes que hacer es nunca rendirte...debes seguir intentando.-dijo pasando sus manos por la espalda de Sana y haciéndole mimos

-Pero..pero..ella..-decía Sana en un puchero y Ryujin pasó su mano por su cabello callándola.

-Shhhh, escucha, eres Minatozaki Sana, la chica a la que cualquier persona caería a sus pies, ¿En serio te vas a dejar intimidar de ese chico? el solo sabe cantar..y..rapear..y bailar..y..bueno..sabe hacer muchas cosas..wow es muy talentoso y apuesto..-dijo Ryujin pensativa y Sana hizo un berrinche

-¡Si pero! em..tu eres muy talentosa también...eres muy buena en los deportes..sabes rapear..sabes bailar..sabes eructar como un hipopótamo..claro que puedes ganarle.-dijo Ryujin

-Tienes razón, yo puedo hacerlo.-dijo Sana alejándose decidida de Ryujin

-¡Sí, claro que puedes, así se habla!-gritó Ryujin dándole ánimos

-Ya se que voy a hacer, gracias Ryujin, eres la mejor.-dijo Sana dándole un beso en su frente y tomando sus cosas para irse

-¡Sí! ¡Eso! em...espera, Sana ¿Qué vas a hacer?-preguntó Ryujin preocupada pero Sana ya se había ido

-Mierda...espero que no le eructe a Jungkook...o que lo agarre a golpes...o que le haga calzón chino..o que, por Dios Sana no hagas nada malo.-dijo imaginándolo frustrada sin saber que había decidido esta.

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Una castaña caminaba por el restaurante buscando a Jungkook entre todas las personas, Jungkook estaba atento y este cuando la vio alzó su mano sonriente llamando su atención, Nayeon sonrió y se acercó a este.

Jungkook la había invitado a uno de los restaurantes más elegantes y costosos de la ciudad, la madre de Nayeon al enterarse le compró un vestido negro para la salida ya que Nayeon no tenía ropa para la ocasión, su outfit se completaba con unos tacones plateados, su cabello caía en ondas y utilizaba pequeñas joyas acompañándolo.

-Hola.-dijo Nayeon con una sonrisa

-¡Hola! ¡Hola! siéntate por favor.-dijo Jungkook amablemente mientras deslizaba la silla para que esta se sentara, Jungkook vestía un traje muy elegante y su cabello estaba perfectamente arreglado.

Nayeon se sentó y Jungkook ayudó a rodar la silla acomodándola muy caballeroso.

-Gracias.-dijo Nayeon dejando su pequeño bolso en la mesa y Jungkook se sentó al frente sonriente.

-Te traje esto..-dijo entregándole una rosa y Nayeon la tomó sonrojándose levemente

-Gracias..-dijo Nayeon oliendo la flor