Lust & Loss | Wandanat

5. Prize 101

Sonreía amable mientras explicaba la tarea de matemáticas a sus alumnos, se había habituado a esa desnudez en cada paso que daba, aunque estaba impaciente porque Wanda le devuelva su ropa interior; el almuerzo había sido ciertamente divertido, mientras estaban con los demás maestros, la directora posaba disimuladamente su mano en su muslo al hablar de lo más natural con todos mientras ella sentía que se iba a desmayar en cualquier momento, la mirada que le dirigía sentía que la invadía completamente, este juego acababa con ella poco a poco, se supone que tendría su recompensa esa tarde, estuvo esperando todo el día volver a su oficina, le encantaba enseñar, pero estar al lado de Wanda era mil veces mejor, faltaba poco para que suene el timbre, el sonido de unos tacones interrumpieron su explicación y sus pensamientos.

– Buenas tardes, chicos, maestra Romanoff – Saludó la mujer que no había podido salir de su cabeza en todo el día

– Buenas tardes directora – Los chicos respondieron en coro tratando de sentarse lo más rectos posibles y viendo la pizarra como si la clase fuera lo más interesante del mundo

– Buenas tardes – Emitió Natasha intentando no lucir los nervios que tenía con solo su presencia

– No se preocupen por mí, solo estaré los últimos minutos de la clase – Fue a una carpeta vacía atrás y se sentó viendo a Natasha directamente – Continúe, maestra, por favor – Posó su mentón en sus nudillos mientras veía hacia el frente y con la mirada le indicó a todos los adolescentes que hagan lo mismo

– Les decía... – La maestra respiró profundamente intentando no notar que Wanda la recorría con la mirada de arriba hacia abajo, no entendía si esto era parte del juego, pero la ponía nerviosa – Los polinomios que están en la pizarra son los que resolvimos en clase, del mismo tipo son los que les dejé de tarea, resolverán veinte ejercicios para la siguiente clase – El timbre de la salida sonó – Nos vemos chicos, hasta mañana, recojan sus cosas

Todos empezaron a tomar sus mochilas mientras se despedían de la maestra y de la directora, Wanda estuvo con una sonrisa aún sentada esperando que todos abandonen el lugar, Natasha volvió a su escritorio para organizar sus cosas, la directora estuvo atenta al pasillo esperando a dejar de escuchar pasos y voces.

– Señorita Romanoff – La pelirroja alzó la vista a Wanda tensándose un poco

– ¿Si, señora directora?

– Explícame el primer ejercicio – Ordenó

– ¿Qué? – Decía confundida

– Borra el procedimiento y explícamelo – Endureció la voz

Natasha asintió y se dirigió al pizarrón a hacer lo que le ordenaban, tomó el plumón y vio a Wanda de reojo, respiró profundamente para empezar con la explicación – Este es un binomio, la fórmula para resolverlo es... – Hablaba mientras escuchaba los pasos de la directora aproximarse a ella, estaba por empezar a escribir cuando sintió sus manos en la cintura – Wanda.. – Suspiró su nombre sintiendo el rostro de ella aparecer por encima de su hombro

– No le dije que pare, señorita Romanoff – Emitió demandante

Natasha respiró de nuevo e intentó tomar todo de sí para seguir escribiendo el ejercicio, los labios de la directora en su cuello no se lo hacían nada fácil aún así continuó escribiendo y puso la respuesta para poder finalmente solo cerrar los ojos y disfrutar de sus caricias y sus besos.

– Excelente, maestra Romanoff – Sonrió viéndola recostarse un poco hacia ella mientras cerraba los ojos – ¿Lista para tu premio, Nat?

– ¿Por qué tenías que venir en medio de mi clase? – Preguntó curiosa ignorando lo otro volteando entre sus brazos y tapando el plumón de pizarra