Calidez | Wenclair AU

Epílogo

Sus cuerpos desnudos permanecían abrazados, siendo a la vez cubiertos por las sábanas blancas de su cama matrimonial. La respiración de la pelinegra chocaba contra el cuello de su amada, quien permanecía despierta.

Al cabo de unos minutos, la pelinegra despertó al sentir el cálido tacto de los labios de su esposa en su cuello, besándola con pasión y cariño mientras le susurraba tiernas frases de amor. Suspiró ante esto y acarició los cabellos de su amada, estremeciéndose ante el tacto.

Su cuerpo se tensó por completo al sentir sus colmillos enterarse superficialmente en su piel, le dio un zape por eso.

— Ya, no muerdas. — Gruñó la pelinegra. — Ni que fuera un juguete para perro para que me estés mordiendo todo el tiempo.

Enid rió ante eso y se acurrucó entre los pechos de la pelinegra, quien cerraba lentamente los ojos, dispuesta a seguir durmiendo.

— Mon amour. — Habló la licántropo, captando de inmediato la atención de su esposa. — ¿Sale un mañanero?

Merlina gruñó ante esto, riendo en sus adentros. Se levantó de la cama y dejó a la pobre rubia suplicando para que volviese, revolcándose en la cama.

— Más tarde, querida. — Comentó la más baja, quien ya se encontraba vistiéndose con lo primero que encontró. — Iré a darles de comer a los gatos.

Enid frunció el ceño al escuchar sus palabras — ¿Los gatos? ¡Son nuestros hijos, Merlina! No los trates así. Debemos tratarnos con cariño y amor, aun si cada vez que nos acercamos a ellos terminamos llenas de rasguños — Merlina rodó los ojos, divertida, y luego salió de la habitación. — ¿No me darás mi besito de buenos días?... — Lloriqueó como si de un cachorro triste se tratase.

La rubia se levantó, buscó algo de ropa en su armario y comenzó a vestirse. Y mientras lo hacía, dio un corto vistazo al calendario que se encontraba pegado en la pared del cuarto.

Hoy, 16 de Julio. era su primer aniversario de bodas. Enid no tenía nada especial preparado, pero eso no era algo que le preocupara a ninguna de las dos.

La pelinegra abrió la puerta de repente, parecía algo preocupada. Enid lo notó de inmediato, así que se acercó a ella y la tomó de la cintura con delicadeza, acariciándola.

— ¿Todo bien, querida? — Cuestionó, mientras que la contraria miraba inquieta a cada rincón de la habitación, parecía que buscaba algo.

— Meloncito se perdió, no estaba con los demás... — Enid, al escuchar eso, abrió los ojos como platos. Soltó a Merlina y fue corriendo hacia la sala, buscandolo por todos lados: bajo el sillón, en los cajones e incluso dentro de un zapato, pero no había rastro de él.

Meloncito era su cuarto hijo/gato, era el más pequeño de todos, teniendo apenas un mes. Era un felino tranquilo de pelaje negro y suave que un día simplemente apareció afuera de su hogar y decidieron quedárselo. Enid lo mimaba más a el que a su propia esposa, le recordaba a ella.

— Oh Dios mío... ¿Dónde carajos se metió? —Merlina la miraba desde la puerta de la habitación, algo enternecida ante su preocupación.

Y de pronto, uno de los tantos libros de Merlina cayó desde el estante. Ambas voltearon a ver, extrañadas. Y ahí estaba el pequeño y escurridizo gato... Al parecer tenía un gusto por la lectura, igual que Merlina.

— ¡Meloncito Addams! ¿Qué haces ahí? —Exclamó la más alta, acercándose al estante y tomando al felino entre sus manos, siendo mordida por este. —Eres igual de gruñón que tu madre, ¿eh? Y hasta te gusta leer, igual que ella.

Merlina reía desde la comodidad de su sillón, admirando la belleza de su esposa.

"Esposa"... Eso sonaba tan bien. Era su palabra favorita después de Enid. Esposa y Enid sonaban muy bien juntas.

La rubia se sentó al lado de su amada, aun con el gatito en sus manos, quien saltó hasta el regazo de su otra madre.

Enid se hizo la indignada. —¿Me estas traicionando, Meloncito? ¿Quieres más a esta cascarrabias que a mi?

La risa de la gótica solo cautivó más a su amada, quien no paraba de admirarla. Embobada, se acercó a ella y la besó sin previo aviso, acariciando su rostro con suavidad.

— Te amo. — Susurró con suavidad mientras besaba su cuello, expresando todo el amor que le tenía.

Merlina, encantada con las melosa muestras de cariño de su amada, dolo respondió con un "yo más". La manera en que su esposa la amaba como sin no hubiese nadie más en el mundo le hacía sentir tan especial... Se parecía a sus padres. Que pesadilla, Dios mío.

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— Bien, ya puedes abrir los ojos. — Susurró la rubia en su oído. Merlina obedeció, y al hacerlo, solo sonrió al tener frente a ella un paisaje hermoso, una obra de arte.

Enid la había llevado a un cerro cerca de su hogar que daba una hermosa vista al lago y las montañas lejanas.

Suiza era fascinante.

— Me dijiste que no querías hacer nada especial este día, así que quise traerte hasta aquí, porque dijiste que te gustaba este lugar.

La amaba, simplemente la amaba. Cada uno de sus pequeños detalles hacían que su corazón brincara de alegría.

Se sentaron en el pasto. Enid tomó su mano con delicadeza y la besó. La pulsera que le había regalado hace años aún estaba en su muñeca: no se la quitaban por nada en el mundo, morirían con ella si era posible.

Y después de estar por un buen rato admirando el colorido horizonte, sintiendo la fresca brisa primaveral chocar en sus rostros, Merlina decidió hablar.

—Te amo, Cara mia.

—Yo más, Mon amour.

Nunca se cansarían de escuchar esas palabras. Rogaban porque aquello fuese lo último que escucharan al morir. Con Enid, Merlina había aprendido que hasta el corazón más frío del mundo podía llegar a amar.

Nunca se cansarían de la otra, nunca se cansarían de sentir su  calidez.

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Épico final papu.

¿Este es el final definitivo? Si y no.
Ya que la historia llegó a las 100k haré algunos extra, unos 5 aproximadamente.

Muchísimas gracias a todos los lectores que se dieron el tiempo de leer esta cagada aberrante y vomitiva. Todo esto empezó por un meme, lit nunca creí que esta historia tendría tanto apoyo.
Los quiero mucho. Ver todos los mensajes y comentarios de apoyo que me dejan es algo que me ayudó a afrontar la compleja situación por la que estoy pasando.
Quiero agradecer de manera especial a ciertos lectores que me hicieron cagarme de la risa con sus comentarios y me hicieron apreciar mas mi trabajo.

HoneyCoffe_
hye_yeji
RaraSinAmigos
UrSpookyGirl
THEKINGNOTHING

Nuevamente les agradezco a todos los que se dieron el tiempo de leer.
Recuerden que si quieren seguir disfrutando de mis historias tengo 2 más en mi perfil: "El balcón" y "En tu hombro"
Una vez que la historia esté 100% terminada estará en edición, así que probablemente les lleguen notificaciones de nuevas actualizaciones.

Sin más que decir, me despido.
Estoy profundamente agradecido con todos, los quiero :]

—Potoxaurioxx