CAPITULO 37

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KELLID.

-Y... ¿D-Dónde está Asher?

-Posiblemente huyo como la cobarde que es- con cada paso en la oscuridad sentía mi cuerpo doler, estaba débil, pero aun así logre captar los pasos a lo lejos gracias a mi don, trague saliva, debía asegurarme de que él no los oyera.

Tenía que seguir distrayéndolo.

Respire hondo y lo veo de soslayo -Creí que... ustedes quizás...

-¿Ustedes?- se ríe sin gracia -Nunca hubo un ustedes, ella está obsesionada conmigo, no es mi culpa nada de lo que decidió hacer.

Arrugue el ceño -Ella hizo todo por ti.

-Quizás- farfullo con altivez –Pero yo no se lo pedí.

Me resistí a insultarlo, aún tenía el arma en mano y estaba demasiado desquiciado como para provocarlo ahora. Veía de reojo como temblaba como un manojo de nervios, apretaba la mandíbula cada diez segundos, como si estuviera resistiéndose a algo.

Empujó mi cuerpo a un lado haciendo que entrara a un pasillo de la izquierda, podía sentir en mi espalda la humedad de las paredes y el moho del suelo lodoso bajo mis dedos de los pies. Era claro que estábamos en una especie de alcantarilla o algo parecido, estábamos saliendo de la residencia.

-En este ducto solía jugar a las escondidas- murmura sin verme -Mientas mamá encerraba personas arriba yo encerraba animales del bosque aquí abajo, solía creer que si practicaba sería tan bueno como ella, que podría hacer lo que hacía, pero nunca pude hacerlo... nunca pude impresionarla...

Ruedo los ojos -¿Crees que de entre tantas personas soy yo la que quiere oír tus problemas?

Gruño presionando el cañón en mi nuca -No me provoques.

-Estoy harta de tus amenazas.

-Y yo de tú terquedad- apreté mis puños queriendo parar la ira acumulada que comenzaba a drenarse en mis venas, alce la vista cuando un rayo de luz me dio en la cara, luz de luna... -Sal- me empujó hacia una escalera que estaba pegada a la pared haciendo que las subiera, alcance la alcantarilla por la que se colaba la luz y la aparte abriéndome paso.

Salí recibiendo el frio invierno en mi piel como una puñalada satisfactoria, me arrastre por el suelo hasta poder ponerme de pie, el pasto estaba húmedo por las lluvias de los días anteriores, el cielo estaba totalmente despejado dejando ver una gran circunferencia plateada brillando. La luna resplandecía sobre mi cabeza al tiempo que Sawyer me tomaba ambas muñecas inmovilizándolas en mi espalda comenzando a caminar hacia el frente de la residencia Stenz.

Mi garganta se secó cuando a lo lejos vi la verja de entrada con la cabeza de Lú colgando de ella como si fuera un adorno, mi pecho se hundió un impacto dejándome sin aire por un momento.

-Camina- mis orbes se negaban a ver a otro lado plantando mis pies al suelo.

-¿Pero qué...?- susurre con los ojos llenos de lágrimas -¿Por qué lo hiciste?

-Por favor, esa criatura no te importaba en lo absoluto.

Me giro con furia a verlo -¡Tú que sabrás!

Apretó su agarre en mi piel centrándome –Si te importara... no lo hubieras traído a su muerte.

Infle mis mejillas reteniendo las lágrimas que sentía arder en mis ojos, no dejaría que me viera llorar.

-¿Qué harás conmigo ahora?- murmure con ira mirándolo fijamente.

Sus ojos azules brillaron con fuerza -Lo que debí hacer desde que te vi la primera vez.

CACERÍA [+18] (completa✔️)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora