Trono sabor lujuria

24- La visita de los reyes

Rhaenyra:

Una semana había pasado tras recibir la carta de mis padres cuando ellos llegaron.

- Hija mía- dijo mi padre para luego abrazarme con amor, vi a mi hermano correr hacia mi y yo lo recibí con los brazos abiertos.

- Mira hermana, padre me ha regalado una espada- dijo mostrándome una espada no muy larga.- sir criston me entrena para poder entrar en la guardia real.

- Padre te deja?- pregunte con una ceja alzada y luego mire a mi padre tratando de encontrar alguna explicación, el me miro y dijo.

- Es uno de los motivos por los que estamos aquí, queremos discutir un par de asuntos.- vi como mi madre aparecía por detrás y sonreía al verme, trato de acercarse pero yo mantuve las distancias y ella pareció notarlo rápido porque simplemente dijo.

- Hola hija-

- Madre- le hice una reverencia y Daemon simplemente la miro- sentaos por favor.

Jace apareció corriendo con luke tras el.

-Madre, adivina que...- se paró en cuanto se dio cuenta de las presencias nuevas- Hola- dijo haciendo una reverencia que luke repitió.
- Mis queridos nietos, venir aquí- dijo mi padre abriendo los brazos, mis hijos corrieron y sé abrazaron para luego abrazar a mi hermano y por último a mi madre.
- Jace llamar a Rhaena y Baela por favor- dije y los niños salieron corriendo de la sala, se escuchó los llantos de Aegon y yo salí en busca de el para calmarlo.

Cuando entre vi que las niñas ya habían llegado, al acercarme mi padre se quedo viendo a Aegon- Este es Aegon, el miembro mas reciente de la familia- dije dejando que lo cogiera.

- Se parece a ti mi querida niña.- dijo mi padre con una sonrisa, vi como mi madre no sabia si acercarse o no y le hice una señal para que lo cogiera, ella se acerco y lo tomo en brazos y note como una lagrima resbalaba por su mejilla.

- Es igual a ti cuando naciste, tiene esos ojos que te hace mirarlo durante horas- dijo mi madre acunando a mi hijo, me lo paso- podemos hablar? por favor- yo lo reflexione durante unos segundos pero quería escuchar que tenia que decirme, asentí y emprendí camino hacia mi cuarto y ella me siguió. Al llegar deje a Aegon ya dormido en su cuna y me gire para encarar a mi madre. Ella se sentó en mi cama y me indico que me sentara a su lado, lo hice y al sentarme me miró y respiro hondo.

- Quería pedirte disculpas por todo lo que te he hecho estos años, quería tu bienestar pero me olvide de tu felicidad- reflexiono sus palabras antes de continuar- cuando tu hermano nació esperaba que todo se calamara sobre todo tu padre, el se centro en su heredero y yo hice lo mismo dejándote de lado, cuando tu padre me propuso la idea de casarte pensé que seria una maravillosa idea, que podrías tener tu propia familia y que al fin serias feliz pero entonces llego el rumor de lo del burdel y me enfade, muchísimo porque quería lo mejor para ti y tu tío no había demostrado ser el mejor sujeto. Al intentar separarte de el con la idea de que serias infeliz de que acabe separándote mas de mi pero al ahora ver como habéis formado una hermosa familia me he dado cuenta que me equivoque y quería pedirte disculpas- empezó a intentar aguantar los sollozos que amenazaban con salir mientras las lagrimas caían por su mejillas sin que ella pudiese hacer nada por evitarlo- te he echado tanto de menos mi niña, he estado ciega con la idea de un niño que me he olvidado de el rayito de luz que eras para mi vida... solo quiero recuperarte, por favor, déjame estar a tu lado de ahora en adelante hasta mi ultimo aliento.

Cogí sus manos y las acaricie- perdóname tu a mi también, cuando nació mi hermano me olvide de todo y me centre en mi egoísmo creando una brecha entre nosotras, ambas hemos cometido errores pero se pueden arreglar, juntas- tras eso la abrace y ella lloro en mi hombro.

Perdón por no actualizar hasta ahora pero no sabia como continuar pero ya estoy de vuelta y espero que os este gustando la historia.

besos.