Por fin el domingo llegó. Lali comenzó ordenar la casa, quería que todo se viera impecable. Preparó el desayuno y miró aparecer a su hermana, que la miraba divertida ante su nerviosismo.
— Buenos días. — saludó estrella.
— Sí dormiste enana. — le puso en plato con cereal. Mientras limpiaba la cocina.
— No soy enana, si no, una niña en crecimiento. — se llevó una cucharada a la boca.
— Dale niña en crecimiento.
— Por fin llegó el día que voy a conocer a mi cuñado.
— Sí.
— Lali. Sí no me gusta tu novio lo dejas ¿verdad?
Lali se preocupo abrió los ojos. No había pensado en eso. Al ver la cara de horror de su hermana, estrella comenzó a reír.
— Es broma Lali. Mira como te pusiste.
— No me hagas esa bromas, sabes muy bien que tu opinión me importa mucho.
— Lo sé hermana, te quiero ¿y en que te ayudo?
— No te preocupes ya tengo todo casi listo, solo debo lavar los camarones y preparar todo.
— Dale, iré a mi cuarto a leer un poco por mientras llega la hora.
Se levantó. Lavó el plato y se fue al cuarto. Lali fue a preparar la comida, esperaba que le gustara. Estaba haciendo un arroz con camarones y una ensalada. Dejó todo preparado y fue a ponerse otra ropa y arreglarse. Al salir, miró a su hermana que estaba ya arreglada.
— Mírate hermana, estás preciosa.
— Vos igual. Le va pegar un infarto a tu novio.
Las dos rieron y esperaron que él llegara. Se pusieron a ordenar la mesa a la llegada de Peter.
Peter estaba a punto de salir cuando escuchó la voz de su nana.
— Estás muy guapo, todo un galán.
— Nana, no seas exagerada. — la miró divertido.
— Respeta. — pegándole en el hombro levemente. — sí te digo que lo estás, es porque lo estás.
— Perdón mi viejita, te quiero — dándole un abrazo.
— No soy tan vieja. ¿cuándo la voy a conocer?
— Muy pronto ahora voy a su casa a conocer a su hermana.
— Qué Dios te cuido mi niño.
Le dio un beso y salió de la casa. Estaba a punto de subir al carro cuando el celular comenzó a sonarle, viendo que se trataba de Agus contesto:
— Hey Agus ¿qué pasa?
— Pues voy hacer la lucha. Quiero invitarte nuevamente a salir. Conste, cómo amigo y junto a los demás, no creas que es una cita. — Peter soltó una risa a causa de la broma de Agus. — ¡Oye! Es verdad no te rías no quiero que te confundas. — siguió con su broma.
— No puedo idiota. Voy donde mi novia. — Agus le quitan el celular. Solo escuchó un hey por parte de de este.
— ¡Hey! Nos estás olvidando, como ya tienes novia y nosotros nada. — fue la voz de Nico que lo hizo reír esta vez.— No seas exagerado Nico.
— No exagero, pero bueno diviértete. — lo escucha decir resentido, pero peter sabia que era broma. — Man, acabas de herir los sentimiento de Nico. — esta vez fue Agus que habló nuevamente.
— Dale Agus, parecen nenas los dos.
— Pero estas nenas te aman. — peter rompió a reír por la imitación de Agus haciendo la voz de chica.
— Ah, bueno, oye, yo no estoy en ese bando.
— Pero podes estarlo, amor.
— Basta..., Basta. — reía sin parar.
Pablo le quita el celular a Agus.
— Oye, no sabia que Agus le tiraba para ese lado. — ¡Oye, soy macho! — Agus gritó. — Estás loco.
— Sí es cierto, pero que se le va hacer. Tengo que dejarlos ya que se me hace tarde.
— Suerte amigo.
— gracias Pablo. — escuchó un adiós de los tres.
Canceló. Subiendo al auto; condujo hacia una florería, compró unas flores y a la vez unos osos de peluche, después pasó por una tienda de licor y compró una botella del mejor vino. Al tener todo condujo hasta la casa de su amor.
Lali no paraba de ver el reloj a cada rato. Iba de un lado a otro por causa de los nervios.
— Hermana cálmate, todo estará bien. — Estrella la intentó calmar.
— Lo se..., lo se.
Tocaron el timbre y Lali se levantó y miró a Estrella con una sonrisa al saber que se trataba de Peter.
— Llegó.
— Ve abrir. — la apresuró.
Lali corrió hacia la puerta. Abriendo, Peter estaba parado con un par de flore, un osos peluches y una botella de vino.
— Hola amor.
— Hola cariño, Pasa. — abrió mas la puerta.
— Les traje esto. — entró.
— Gracias. — tomó los regalos. Sabia que a su hermana le volvería loca el oso de peluche.
— Debes ser Peter. — Estrella se acercó.
Los tres se sentaron y él asistió.
— Así es. Encantado de por fin conocerte, Estrella.
— Bueno hasta que al fin te conozco. Ya era hora ¿sabes? Mi hermana no para de hablar de ti. — Lali se sonrojó. En el momento que volvió de la cocina ya que fue a dejar la botella de vino.
Peter se sorprendió como una niña tan pequeña habla como una adulta.
— Yo también quería conocerte. Te traje unas flores y un osos de peluche.
Al decir eso: ella se fijó en los regaló y sonrió encantada.
— Bueno, ya me agradas. ¿Sabes? eres muy lindo Peter.
Lali dejó de estar nerviosa al ver que su hermana aceptó a Peter y se relajó. Estuvieron platicando y Lali estaba encantada de ver lo bien que se llevaban. Escuchó el timbre sonar y extrañada fue abrir; cuándo lo hizo, se sorprendió al ver que de trataba de.....
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No me puedo enamorar.
FanfictionA los dieciséis años los padres de Mariana y Estrella Espósito, murieron en un accidente. Dejándolas a las dos solas y sin nadie, su hermanita apenas tenía seis años. Huérfanas y sin familia, tenía que llevarlas a un orfanato. Para no ser separadas...