No me puedo enamorar.

capitulo 15

Cuando terminaron de besarse, Peter sacó las maletas y entraron a la casa. Lali quedó sorprendida de lo grande y hermosa que era.

— Es preciosa. — dijo casi sin voz.

— Sí. Mis abuelos tenían un buen gusto. Cuando murieron y me la dejaron no quise cambiar nada. Porque está perfecta tal como está. Además dejarla así, me hacía sentir que ellos estaban cerca de mi cada vez que venía, pero mis padres me han dicho que debo cambiar y quitar algunas cosas, pero creo que no hay nada que cambiar ya que para mí hacia esta perfecta.

— Estoy contigo. No la cambies nunca, todo es hermoso. — le dió un beso en la mejilla. — te agradezco por traerme y compartirme este lugar.

Le dio una calidad sonrisa y la tomó de la mano.

— Te llevaré a tu cuarto.

La condujo por un pasillo. Abrió una de las cinco puerta, al ver lo grande y acogedor que era el cuarto, Lali se quedó encantada por el aspecto del cuarto. Era igual de impresionante como la casa.

Miró la gran cama y era el doble de grande que su cama y de su hermana. Tenía un bello tocador y siempre había deseado uno como ese. Lo que la dejó sin respiración fue que había una ventana y se podía ver el mar. Acercándose; la abrió y cerró los ojos al sentir la brisa.

— Este será tu cuarto. — sintió a Peter detrás de ella.

— Es hermoso. — se apoyó en él. — ¿Tú dónde dormirás?

— En el cuarto de frente. — señala ya que no había cerrado la puerta. — preferí dejarte este cuarto ya que este tiene la mejor vista del mar.

Por un momento pensó que iban a dormir juntos, pero le agradeció el gesto ya que seria incómodo para ella.

Peter no la quería presionar así que prefirió dormir en un cuarto separado, quería que todo sea natural y sin presiones. Además no la trajo para estar con ella íntimamente, si no, pasar unos día tranquilos y conocerla más y proponerle matrimonio. Ese era su objetivo para este viaje. Pedirle que sea su esposa.

— Bueno, te dejo para que puedas desempacar tus cosa. tienes un cuarto de baño para ti. — toma la mochila y la pone en la cama. — Yo iré a desempacar. — le da un beso y sale del cuarto.

Emocionada, se tiró a la cama y abrazo una de las almohadas. No podía creer lo que le estaba pasando, conoció un hombre que la ama y la respeta y ella también lo ama, respeta y sobre todo le tiene paciencia. Lanzó un suspiro emocionada.

«Lo amo, lo amo con todo mi ser. Espero que me siga amando, cuando sea capaz de contarle mi secreto.»

No sabía cómo se lo diría o si sería capaz de hacerlo. Decidió irse a dar un baño, levantándose; entró al cuarto de baño y abrió la llave de la ducha, pero no salía el agua. Volvió a intentarlo, pero era lo mismo. No había Agua. decidió ir a pedirle ayuda a Peter, ya que él sabía más como era todo de la casa. Estaba frente a la puerta y no sabía si entrar o tocar.

Peter entró a su cuarto y acomodó sus cosas. Decidió darse un baño ya que estaba muriendo de la calor, entró al cuarto de baño; se sacó toda la ropa, abrió la ducha y entró dejando que el agua lo relajara. Cuando terminó de asearse, se secó y se puso una toalla amarrada a su cintura.

Salió y sacando la cajita donde estaba el anillo de compromiso, lo miró. Estaba seguro de dar el paso de pedirle matrimonio, pero le daba miedo que ella no aceptara casarse con él.

Un sonido lo hizo levantar la vista. Miró como la puerta se abría y rápidamente escondió la cajita.

Lali entró y quedó paralizada al verlo con el pecho desnudo y con solo una toalla tapando su partes bajas. La boca se le secó y sintió como sus mejillas se calentaban.

« Que bello se ve... es tan sexi, quisiera lamer su pecho y...»

Se sonrojó por el pensamiento inapropiado que tuvo.

—  Lali, amor. ¿Qué pasa? — la voz de él la sacó de su aturdimiento.

— Y-yo... vine para verte desnudo... Digo.... —, mueve la cabeza. — Digo para pedirte un favor... — sentía las mejillas calientes. Volvió a quedarse embobada viendo el cuerpo de él.

— Tierra llamando a Lali, ¿amor estás?

— Sí...., sí..

— ¿Qué querías pedirme?

— Ah sí, yo quería decirte que me ayudaras con la ducha de mi baño ya que no cae agua. — se mordió el labio inferior.

— Ah, ¿pero por qué te pones así? —  la molestó un poco. Ya que sabía porque causa ella estaba así.

— Pues... Tú estás desnudo y... yo...no. — agachó la cabeza avergonzada.

Él se dio cuenta que la estaba poniendo incómoda y prefirió no seguir molestando.

— Perdón amor. No quise ponerte incomoda.

— No... Peter yo.. Fui la que no tocó la puerta.

— Nena no debes ponerte nerviosa con verme. — Se comenzó acercarse a ella.

Lali empezó a respirar agitada- mente al verlo acercarse a ella. Él estaba a solo unos metros, por auto reflejo; ella puso su manos en el pecho de él, sintió una descarga eléctrica al sentir la piel cálida de Peter. Se miraron a los ojos, él acercó su labios a la boca de ella y comenzó a besarla de la manera mas delicada posible.

Lali entre-abrió la boca para permitirle el paso de su legua y unirse a la de ella. Empezó a acariciarle su pecho y se dejó llevar por lo que estaba sintiendo. Era muy diferente a los besos que se daban, era casi igual como el de aquella vez, pero está era más fuerte.

Peter comenzó a sentirse excitado por las caricias que ella le estaba brindando. Empezó a caminar con ella hacia la cama, situándola en el colchón; quedó arriba de ella. Comenzó a darle suaves caricias en su piernas, dejó de besar su boca, para comenzar a besarle el cuello. La sintió temblar y fue más despacio con sus caricias.

Lali sentía como su respiración se tornaba agitada por las suaves caricias de él. Comenzó a cegarse por el deseo sintió como Peter comenzó a subirle la camisa y.....