08

5.5K 795 592
                                    

▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄▀▄

Así como los días de diciembre, enero y febrero pasaron para Guillermo, también pasaron para Lionel.

Con la diferencia que para él pasaban más ligeros, pero sólo físicamente.

Mentalmente todo en Messi era un desastre.

— ¿Vos no lo notás diferente?— preguntó sentando en la banca.

— ¿A quién?

—A Guille. — musitó. —De repente algo en su rostro es distinto y mágicamente abandona las prácticas... ¿No te parece extraño?

—Bueno, un poco tal vez pero, escuchaste que le dijo al entrenador que quería enfocarse la recta final de la prepa, que iba mal en algunas materias y no las quería descuidar.

—No sé vos, pero yo no le creo. — respondió sacudiendo un poco la cabeza. — ¿Crees que esté saliendo con alguien?

—Si es así pues bien por él ¿No?

— ¿Bien por él? ¿Vos de qué lado estás pelotudo?— atacó molesto.

—Sólo digo que todo lo que ha pasado con el rulitos ha sido tu culpa. Te lo jodés y después tus prejuicios de mierda no te dejan en paz para que vos le pidás una cita ¿Qué boludez es esa?

Agüero sólo decía la verdad, Lionel lo único que había hecho desde aquel acostón con Memo había sido únicamente desviar el tema, él en el fondo sabía perfectamente quién era y sus preferencias.

Pero su miedo y cero aceptación podían más.

—Necesito hablar con ellos. — soltó Lionel sin más mientras a lo lejos observaba a Javier, Carlos y Andrés jugando y tonteando por el campo de futbol.

—Vos debés de tomar en cuenta que una vez que pongas un pie de ese lado de la cancha, te van a cagar a palos.

—Tomaré el riesgo. — respondió Lionel tomando un poco de aire antes de comenzar a caminar hacia el pequeño grupito de tres.

Quienes en cuanto vieron las claras intenciones de Messi por acercarse dejaron de hablar y jugar.

—Hola. — saludó el argentino después de carraspear un poco su garganta.

— ¿Qué chingados quieres wey?— preguntó Vela en un mal tono.

—Bueno, yo sólo quería saber si todo iba bien con Memo, se salió del equipo sin más.

—Mira, bien chingón ¿Te lo chingas y ya después bien salsas meses después preguntas por él? Qué poca madre la tuya, checito. — intervino Javier parándose justo enfrente de Messi.

Siendo evidente la diferencia de estatura.

—Escucha, lo que haya pasado entre Guille y yo no es de tu interés, sólo quiero saber si él está bien.

—Pues si quieres saber cómo está, pregúntale tú, pinche chaparro. — empujó ligeramente el pecho de Lionel con su dedo índice. — ¿O vas a rajar por pinche miedoso?

—Mi amigo es mucho para tí wey, que no fuiste ni capaz de aceptar que te lo diste en una fiesta. — completó Andrés haciendo que Lionel lo mirara.

La obvia molestia y el ceño fruncido comenzaron a formarse en el rostro del castaño.

—Ya después de eso no dijo nada, el puto nada más se dió la vuelta y se fue. — contó Andrés mientras mantenía la vista en la pantalla y movía el stick del control de Xbox.

𝘏𝘢𝘴𝘵𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘤𝘰𝘯𝘰𝘤í ||𝘔𝘦𝘴𝘴𝘪 𝘹 𝘖𝘤𝘩𝘰𝘢|| (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora