005.

19.7K 2K 808
                                    

Las palabras de Neteyam la helaron, su mirada la lastimaba, parecía ansioso por una respuesta.

Era la primera vez le entregaban una mirada tan dolorosa, cosa que hacía que su pecho se oprimiera, obligando ella misma a desviar su mirada.

—Yo... —mordió su mejilla por no saber que decir exactamente, tenía sus orejas bajas al igual que su compañero.

Ambos eran el reflejo del otro con respecto a las expresiones que tenían ahora.

Aunque una parte de ella se sintiera cálida por la reciente confesión, la otra no podía quitarse esa idea de que él estaba haciendo esto por el incidente y ella no quería que él se sienta atado a eso.

Sabía lo que sentía ser presionado a casarse con alguien que ni siquiera ames o llegues a armar con el tiempo, si no era ella, sería Aonung y Le'ah no quería que su hermano pase por eso, menos Neteyam.

Él tenía una expresión de dolor, como si hubieran matado su ilusión, y así era. Se sentía un tonto, ¿cómo alguien como ella iba a sentir lo mismo en tan poco tiempo? Le'ah era una futura líder, heredera al clan, criada y educada como tal.

¿Qué era el? nadie, un simple Na'vi escapando y ocultándose con su familia.

—Lamento mucho si... —su voz salió quebradiza, obligándose a aclarar su garganta— te presioné a algo, no quería hacerlo —bajó su tono de voz.

Le'ah aún sentía aquellos pensamientos dar vuelta en su cabeza, pero eso no impidió que moviera un poco su cabeza, observando como Neteyam tenía su mirada perdida en el agua.

—Es algo que me tomó por sorpresa —enderezó su postura—, Neteyam, sé lo que se siente estar destinado a comprometerse con alguien que no amas, y no quiero que sientas eso.

A pesas de la situación, él sentía como las palabras de ella eran suaves, como un pequeño murmullo que desearía escuchar en las noches antes de dormir.

Le'ah también tenía una expresión un tanto dolida, y eso lo terminaba de lastimar más a él.

—Quizá somos muy jóvenes, pero en realidad no me importa quién seas —aun con su tono bajo llevó su mano al pecho de él—, eres alguien amable, dispuesto a defender a sus hermanos, con un buen corazón, eso importa más que el puesto que llevas o las joyas que te identifican.

Neteyam abrió sus ojos, sorprendido, como si sus pensamientos iniciales hubieran sido leídos, para Le'ah, él era como un libro abierto y ansiaba seguir conociendo más de él.

—Aún así no soy lo suficiente ante tu padre —él llevó su mano a su pecho, encontrando así la mano de ella, la apretó suavemente.

—No te preocupes por eso —ella le brindó una pequeña sonrisa—, es mejor que vayas a descansar, la noche ya está muy avanzada.

Neteyam apretó sus labios, no disgustado, aunque no había tenido una respuesta concreta las palabras de ella habían logrado apaciguar aquel remolino de confusiones en su interior.

No la iba a presionar ante eso, ya que de algún modo percibía aquella conexión que ambos sentían, y eso lo hacía feliz.

Ambos se levantaron, separando sus manos en el proceso.

—Lamento haberte evitado —ella quedó frente a el, notando la poca diferencia de altura—, no volverá a pasar.

—Trato de comprender lo que sentías, así que no tienes que disculparte.

Ambos caminaron de regreso a la pequeña aldea, en silencio. No era incómodo, para ambos la presencia del otro era algo que los hacía sentir bien, serenos, tranquilos y completos.

Aloha Oe - Neteyam Sully (Avatar) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora