Aloha Oe - Neteyam Sully (Avatar)

007.

Le'ah trenzaba cada hilo con agilidad, mirando de vez en cuando a su hermana, quién se encontraba a unos metros de ella junto a Lo'ak.

Sonrió ante aquella escena, al inicio su hermana era la que parecía más feliz con la llegada de la familia Sully y con el pasar de los días se pudo empezar a notar con fuerza aquel vínculo que formaba con Lo'ak.

Ambos se estaban salpicando agua, tal cuál jóvenes enamorados.

Agrandó más su sonrisa y volvió a su manualidad, una pequeña pulsera la cual traía caracolas del arrecife y unas cuantas piedras que se podían hallar en el mar, a Le'ah siempre le gustaba hacer aquel tipo de cosas para sus hermanos, los cuáles siempre las recibían gustosos.

Actualmente llevaban un collar compartido, demostrando simbólicamente aquel cariño de hermanos que se tenían entre si, cada collar era tan distinto pero a la vez tan similar, que era algo que destacaba de Le'ah, su forma de ponerle sentimiento a aquellos regalos, haciéndolos únicos e inigualables.

Enganchó la última caracola, dando así fin a la pulsera, sintiéndose orgullosa de su resultado.

—Hey —él llegó y se posicionó a su lado.

Le'ah dió un pequeño brinco de imprevisto, puesto que la repentina llegada del muchacho la había asustado.

Eso causó que Neteyam soltara una pequeña risa al ver el estado de ella.

—No llegues así de imprevisto —murmuró, mirándolo con un leve ceño fruncido—, te pondré un collar con caracolas, así sentiré su sonido cuando estés cerca.

—Llevaría ese collar a todas partes —él mantuvo una sonrisa, volteando su mirada a su hermano—, lo miro más tranquilo desde que está con ella.

—Ella se la mira más feliz —Le'ah llevó su mirada a dónde él la tenía—, tu hermano la ha llevado a un nuevo camino.

Neteyam suspiró.

—Me alegra que haya coincidido con alguien, creía que se quedaría solo toda su vida —comentó, apoyando su cuerpo en sus brazos.

—Lo dudo mucho, Lo'ak tiene su atractivo, alguien se iba fijar en él —a diferencia de Neteyam, Le'ah mantuvo su postura, piernas cruzadas y espalda recta.

—¿Así que mi hermano te parece atractivo?

Ella movió su cabeza a ambos lados, con una pequeña expresión de indecisión.

—Indícame tu mano —Le'ah extendió la suya para recibir la de él.

Algo confuso, pero no desconfiado entregó su mano en la palma de ella, sintiendo la suavidad de esta.

Le'ah la jaló un poco, obligando a Neteyam a cambiar su postura para acercarse más, ubicando su mentón en el hombro de ella, sintiendo su aroma.

Observó como ella hacia ciertos nudos alrededor de su brazo, eso lo desconcertó un poco, pero se sentía feliz y su cola lo demostraba.

—Ya está —avisó, aún sosteniendo la mano de este.

Neteyam pudo observar en su muñeca un brazalete, algo simple pero con ahora un valor sentimental inigualable para el.

—Está precioso —murmuró.

Le'ah sintió escalofríos al sentir el aliento de él cerca de su mejilla y parte de su cuello.

—Me alegro que te guste —imitó el volumen de voz.

Neteyam entrelazó su mano lentamente con la de ella, temiendo por su reacción, sin embargo se sintió pleno cuando ella hizo lo mismo.