44° [R - J]

2.6K 253 82
                                    

[ROSÉ]

—Le gustas, es obvio. —Kim niega y continúa leyendo los exámenes que debe corregir— ¿No me dirás nada?

—¿Qué podría decirte? Yo sé que no le gusto a Suzy, y sí así fuese da igual, a mi me gustas tú —continúa observando cosas en su laptop mientras analiza las hojas.

—No me gusta la forma en que te mira.

—¿Cómo me mira? —levanta la vista de la pantalla y se quita las gafas que la hacen ver como una verdadera milf.

—Como sí fueses su objetivo. Te sonríe mucho, toca mucho tus manos e intenta acariciarte el cabello cada cinco segundos —murmuro molesta.

—Sólo quiere hacer una amiga —giro mis ojos ante su comentario—. Ya habría notado otras intenciones.

—Claro. Kim ni siquiera notaste que era yo quien te mensajeaba en secreto.

—Pero lo presentí —se encoge de hombros y vuelve a lo suyo.

—No me gusta. Sé que hará lo que sea por tenerte.

—Que lo haga, Rosé. Tengo novia y te respeto, eso debe bastar... ¿No?

—Sí, confío en ti, Kim —murmuro—. Iré a ver dibujitos... ¿vendrás pronto a la cama?

—Me quedan dos exámenes. No te duermas —me lanza un beso y sonrío antes de irme a la habitación.

 No te duermas —me lanza un beso y sonrío antes de irme a la habitación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

[JISOO]

Continué corrigiendo los últimos exámenes. Aparentemente Yeji y su amiga Yuna tienen las mismas respuestas de desarrollo. Tendré que hablar con ellas mañana. No puede ser que en último año decidan tener faltas. Yeji siempre ha sido una buena alumna en cuanto a calificaciones, pero éste año... va de mal en peor.

Cierro mi laptop y camino en dirección a la habitación. Rosé está esperándome con una camisa gigante de rodillas en la cama.

—¿Y ésta sorpresa? —murmuro con un tono de voz sugerente.

(+18 contenido adulto)

—Es para que vengas y me folles, Kim. Te necesito —murmura la rubia separando sus piernas mientras se recuesta permitiendome ver su desnudez.

Mis ojos fueron directamente a su sexo, me sonrojé y sonreí. Tragué saliva para poder hablar bien y no quedarme en blanco. Rosé realmente me pone nerviosa.

—¿Vas a comerme o tengo que enviarte una invitación? —pregunta Rosé algo molesta.

Como me gusta ésta chica.

—Voy a comerte. Claro que lo haré. Separa bien las piernas.

Camino en dirección a mi guardarropa, busco unas corbatas que usé en mi época universitaria. Tengo muchísimas y ni siquiera entiendo por que las guardo, ya no me gusta usar camisas.

Maestra Kim | Chaesoo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora