✯Se rumorea que...✯

434 43 5
                                    

—Yo..yo...— Mikan comenzó a llorar. Hotaru siempre estuvo ahí para ayudarla en todo y salvarla de los problemas, pero recibir un disparo por ella había superado los límites. Su mejor amiga no debía arriesgar su vida por ella. —Lo siento...

—Deja de llorar — suspiró y le acarició el cabello — No es tu culpa, además ya sabemos que pasará, solo debemos evitar estar en ese lugar. Seguro me pondré bien.

Nunca se arrepentiría de esa acción,podría saltar a recibir el disparo una y otra vez con tal de que no le hicieran daño a su amiga.

Entre balbuceos y llantos logró calmarla.

—Prometo que de ahora en más no te daré problemas Hotaru...

—Eso espero tonta. Me debes una comida.

Sus compañeros de clase miraron a la pelinegra con preocupación, deseando en sus mentes que la herida no fuera nada grave.

Subaru mantenía un rostro inexpresivo pero en su interior comenzaba a despertar un sentimiento que no sentía hace mucho tiempo. La preocupación.

Sakurano suspiró —¿Estas bien?

—Claro que si.

—Si tu lo dices...

Los profesores se frotaron el rostro con cansancio y preocupación por las niñas que quedaron atrapadas en el tiroteo. ¿Cómo terminamos así?

Narumi no podía soportar que una de sus queridas estudiantes saliera herida. Sentía que falló en su trabajo como maestro. Cerró los ojos tratando de despejar su mente y esperando a que iniciaran a transmitir el futuro nuevamente.

Todos se fueron a comer, hablar y jugar un rato para distraerse. Decidieron irse a dormir y temprano en lo que ellos creían que era la mañana,se despertaron a desayunar.

Sin demorar se fueron a sentar en los cómodos asientos, recordando los últimos sucesos, especialmente la infiltración en la academia y la herida de la pelinegra.
Para suerte de todos los que no podían más de la preocupación pronto el show comenzó de nuevo.

En la academia pronto se extendió la noticia de la niña herida, mientras se decía que los intrusos habían escapado de la nada. Todos los estudiantes estaban sorprendidos.

—¡¿Como pudieron escapar de la nada?!

—Debe ser una broma...

En el hospital, Hotaru recién salida de cirugía era traslada en camilla a otra sala.

Hotaru se veía a si misma en la pantalla y no pudo evitar hacer una mueca.

Mikan apretó su mano en señal de apoyo resistiendo las ganas de llorar.

—Mikan por ahora...será mejor dejarla descansar — le dijo Narumi. De la sala de cirugías salió Imai Subaru.

—Narumi-senseeeei— se quejaron los estudiantes,por una parte entendían pero querían saber cómo estaba ella.

—El paciente se encuentra aún dormido por los analgésicos...uno o dos minutos no deberían hacer mucha diferencia cierto?— Subaru permitió que los chicos siguieran a la enfermera para ver a Hotaru.

Subaru elevó una ceja. Al escuchar esas palabras supo que algo andaba mal. El resto de los profesores que sabían cómo era el chico también lo sintieron.

La Oscuridad de Gakuen Alice | Watching |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora