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Hoy mi visa expiraba, por lo que estaba buscando un juego antes de que anocheciera, luego de un par de minutos buscando por fin lo conseguí, era una especie de edificio. Al entrar en este sentí unas cuantas miradas sobre mi pero no presté mucha atención.
Tomé un celular el cual luego de hacer el reconocimiento facial me dió la bienvenida con un "Bienvenida, jugadora 9"
Me quedé en una esquina esperando a que los registros se acabaran.
"Los registros se han cerrado, hay un total de 13 participantes. El juego está por comenzar" bajé mi mirada al celular que traía en manos, hasta que una voz masculina me sacó de mis pensamientos. Subí la mirada encontrándome con un jóven de gorra.
— Hola, oye... ¿Sabes adónde se fueron todos? ¿De qué juegos habla esta cosa?
— Concéntrate, y sobrevive. -Le dí una última mirada cuando el celular comenzó a sonar nuevamente-
"Dificultad: cinco de espadas"
Metí el celular en uno de mis bolsillos y comencé a estirar, si mal no recuerso espadas era esfuerzo físico. Cuando el celular sonó otra vez me reincorporé y lo saqué de mi bolsillo.
"El juego será: tocado. Las reglas: tendrán que escapar de la cosa" todos comenzaron a murmurar a lo que yo solo los ignoré, estaba acostumbrada. "Condición para ganar; Encontrar el símbolo escondido en uno de los cuartos, dentro del tiempo límite. Ganarán el juego al tocar el símbolo... Tiempo límite, veinte minutos." Esto va a ser fastidioso. "Después de que pase el tiempo límite, el edificio explotará por completo."
Culminó por decir provocando que los demás se miraran entre si con pánico de morir. Ya sea por la "cosa" o por los explosivos.
Até mi cabello en una coleta alta y me quité el suéter amarrándolo a mis caderas.
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Me parece gracioso que no me haya reconocido, no, ni siquiera me miró. Me pregunto si habrá cambiado, este mundo cambia a quien sea.
Tomé mi teaser y caminé tranquilamente al ascensor, subí al último piso, al salir a una especie de balcón caminé a una de las esquinas de este recargándome en el muro.
