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21 𝑁𝑜𝑣𝑖𝑒𝑚𝑏𝑟𝑒
01:53 a.𝑚
𝑈𝑛𝑖𝑣𝑒𝑟𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑄𝑎𝑡𝑎𝑟

LOS CHICOS ESTABAN GRABANDO TIK TOKS mientras yo los observaba quietita desde mi lugar, estaban haciendo el baile ese del tiburón, mientras beboteaban a la cámara.

unos cracks los pibes concentrando.

Saque una bikini blanca de mi valija y me metí al baño para poder cambiarme, tenía pensado ir un rato al jacuzzi de afuera.

empecé por tratar de desenganchar los botones de atrás de mi top, saque mis shorts y me puse la prenda elegida.

Pequeño detalle que no me traje toallas y no puedo pasar así entre medio de todos los jugadores.

Abrí un toque la puerta y asomé la cabeza, viéndolos a todos concentrados en el resultado del tik tok.

-Enzo! podés venir?

Automáticamente tenía nueve pares de ojitos mirando a mi dirección, hubiera llamado a mi tío di maria o a mi papá pero no estaban lamentablemente.

-eaea! hoy uno la pone- festejaba de Paul en un costado.

-cerra el culo triple T, Enzo pásame una toalla que me olvidé!

Cerré la puerta nuevamente y me apoye en la larga mesa del lavabo.

Lo ví entrar y cerrar con seguro.

-y eso para qué?- cuestioné algo divertida.

-pasa que es una tarea muy difícil ponerse una toalla, yo te tengo que ayudar.- metió verso.

-seguro- tome la toalla y le señale la puerta- gracias por tus servicios, ahora vola.

-nono para!- se puso serio, pegando su cuerpo al mío y dejando un brazo de cada lado- necesito algo.

-qué cosa?

-mi beso de la suerte...

vieron mi tanga? no la encuentro.

-en un rato anda a buscarlo.

Salí de la habitación y camine hasta el jacuzzi, al llegar me adrentre y sentía una paz increíble.


EL RUIDO DE LA PUERTA me desconcentro, Enzo venía con su maya blanca con el logo de la AFA.

Se metió al agua y se sentó al lado mío.

-vengo a cobrarme mis servicios.

-me pasaste una toalla nada más - le hice montoncito.

-eso es un montón, no cualquiera te pasa una toalla.

Estuvimos peleando un rato como siempre hasta que me hizo poner de mal humor.

-no sabes nada Martina, river es otra cosa.

-uh me cansaste, te guste o no, boca le rompe el orto a tu equipito.

Estaba dispuesta a irme pero en un rápido movimiento quedé a ahorcajadas encima suyo.

-𝑡𝑒 𝑐𝑜𝑔𝑒𝑟𝑖𝑎 𝑑𝑒 𝑙𝑎 𝑏𝑟𝑜𝑛𝑐𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑑𝑎𝑠 𝑀𝑎𝑟𝑡𝑖𝑛𝑎.

-𝑛𝑜 𝑠𝑒𝑎𝑠 𝑡𝑎𝑛 𝑝𝑎𝑗𝑒𝑟𝑜 𝐸𝑛𝑧𝑜.

Pegó nuestros cuerpos y junto nuestros labios en un suave beso, el cual fue tomando otro rumbo.

Mis manos estaban en su nuca, las suyas en mi culo, lugar donde apretaba o acariciaba constantemente.

Empecé a moverme inconscientemente sobre el, por su lado trataba de pegar mucho más nuestros cuerpos.

Empezó a dejar besos húmedos en mi cuello, y yo a bajar mi mano por su abdomen.

me tocan el cuello y me pongo fácil.

El por su lado corrió la parte baja de mi bikini, masajeando la zona y causandome uno que otro jadeo.

Metió dos dedos, y empezó a besarme nuevamente para callar mis gemidos.

Baje un poco su maya y saque su miembro, empezando a hacer un vaivén con mi mano, sacándole algunos quejidos.

-no aguantó más Enzo- me queje en un suspiro.

El se adentró en mi de una estocada, después de unos segundos empecé a subir y bajar, el me empujaba con fuerza hacia abajo mientras seguía dejando besos en mi cuello.

-sos mía morocha- susurro mientras aceleraba los movimientos.

Nada |Enzo Fernández|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora