━━━VI: The Unforgivable Curses

1K 138 4
                                    

Chapter six The Unforgivable Curses

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Chapter six
The Unforgivable Curses



Efectivamente se habían caído y Marlene había recibido un fuerte golpe en su espalda. Como toda persona normal, a pesar de la preocupación de sus amigos, se había hechado a reír a carcajadas.

Theo la miraba entre confusión, por saber si estaba bien o no, diversión ante la risa descontrolada y preocupación por el fuerte golpe, también culpa.

—Ya la rompiste—dijo Blaise mirándola con preocupación.

—más—murmuró entre risas Marlene—¡Ay dioses!

Se agarró el estómago y tanto Theo como Daphne se agacharon a ver como estaba. Sin embargo Marlene seguía riéndose descontroladamente.

—No se si llevarte con Madame Pomfrey o con un psiquiatra—murmuró Theo.

Y para que, Marlene soltó otra carcajada, algunos estudiantes los miraban con confusión, preguntándose si debían llamar a algún profesor.

—Probablemente la segunda—murmuró entre risas.

Estuvieron cinco minutos esperando a que Marlene se calmara, cuando lo hizo e intentó pararse, negó.

—no tengo fuerza —murmuró mordiéndose el labio, intentando no reírse otra vez.

Theo suspiro y la alzó al estilo nupcial, Marlene se agarro de su cuello y este empezó a caminar. Cuando llegaron a la sala común, algunos estudiantes los miraban de reojo, pero no hacían nada.

Subieron a la habitación de la pelirroja y allí se acomodaron, entre Malfoy y Blaise habian ido a buscar un colchón a la habitación de las chicas y lo estaban armando. Aunque primero Daphne había ordenado un poco.

—¿Porque esta tan desordenado?

—¡Juro que intento ordenarlo! Pero me distraigo y me olvido que estaba haciendo....—murmuró Marlene y miró a Theo —Estoy bien ¿vos te golpearte mucho?

El rizado negó—sólo un raspón, vos caíste de golpe al escalon rojita...

—Tranquilo T—tomo una de sus mejillas—Estoy bien, he recibido golpes peores... me tengo que bañar, cuando salgo no quiero ver nada roto zabini.

—¡No prometo nada!

Marlene rodo los ojos y se ducho rápidamente, vio en el espejo el moretón en su espalda baja. Mañana estaría entre morado y verde.

𝐒𝐮𝐧𝐬𝐡𝐢𝐧𝐞; 𝙃.𝙋 .𝙋𝙅𝙊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora