Queens Of Noise || Moreau's ©

17. Weddings & Conversations

📍 10 de Mayo de 2021 | Londres, Reino Unido

Vega P.O.V.:

Luego del momento depresivo de mi parte me sentí mejor, con un par de calientitos abrazos de parte del rubio y el ofrecimiento de galletas que aún quedaban escondidas de Sara en la alacena.

Mi hermana pasó al rato tomándonos por sorpresa ya que comíamos galletas como unos tragones y las escondíamos de ella mientras veíamos alguna película de comedia para quitarme la cara de muerte, aunque eso no paró a Sara de unirse a nosotros al mismo tiempo que robarme unas galletas las cuáles peleamos por un gran rato.

Ya pasando página al día que empezó mal y termino bien, ya estabamos a otra fecha del año y una fecha especial.

¡Hay una boda!

No si se estaba emocionada por la pareja que se iba a casar o que por primera vez en la historia, todos los hermanos ibamos a estar juntos en una misma velada. Dejando a un lado las cosas que hizo mi parentesco masculino engañando a mi mamá, la existencia de ellos no nos iban a molestar desde el momento que supimos de su verdadera relación genética con nosotros. No tenían la culpa de todo ello, además ¿quién no queria tener a María, Diego y Diana Villalobos como hermanos?

Son tan asombrosos que los adoro, y más a Diana. Diana tiene mi corazón ganado, pero no se lo digan a Sara o se ponen celosa.

Alisé mi vestido verde esmeralda y me dislumbré al observarme, de lo tanto que había cambiado y que nunca me había atrevido a ponerme tal vestido que me quedaba tan bien. Agarré el lápiz labial y lo pasé de nuevo por mis comisuras, dándoles un volúmen mayor a estos. Creo que con eso estaba bien.

Una bocina se escuchó afuera y rodé los ojos sabiendo que esa era Sara. Cuando anda emocionada anda fastidiosa, claro como va a ver a Ben Barnes, tiene que echarle el chismecito de la semama. Hermana mía tenía que ser.

Tomé un suéter porsia las moscas, una pequeña cartera con lo justo y lo necesario y las llaves de mi casa que se encontraban al lado del florero de cristal con los hermosos lirios blancos y rojos los cuáles se mantenían hermosos desde la última vez que los revisé hacía un mes.

Esos hermosos lirios que me fueron mandados con una nota que al leerla me derritió mi frío corazón.

Sonreí bobalicona, aún puesta con ella cuando me monté al auto y mi hermana me vió pícaramente, sonriendo.

—Estás enamorada de él—pronunció asi de fácil y me volteé a verla con brusquedad como si acabara de decir que voy a conocer a Nikolai Lantsov.

Lo siento, amo a ese personaje.

—¿Q-Qué dijiste?—ella se rió y negué varias veces. Imposible, no—No, te estás buscando cosas donde no las hay. Somos amigos.