Puro Fuego©✔️(+18) #2

4.- Palacio

Frente a mí, se eleva un impresionante castillo. Como es de noche, está totalmente iluminado y reluce en dorado, como si fuese oro. Miro impresionada hacia todas partes asimilándolo todo. Es inmenso. Doy la vuelta y me encuentro con una sorpresa. Me acerco hacia el muro perimetral del estacionamiento donde hemos aparecido. Debajo de nosotros, se extiende una ciudad completamente iluminada. Me giro nuevamente y entonces me percato de que está ubicado en una montaña.

—¡Wau! —exclamo impactada por tanta belleza.

—¡Oh oh! —eso no ha sonado muy bien.

—¿Sucede algo Warden? —inquiero mientras me acerco a él.

—Bueno hermano, esto ha sido toda una sorpresa— su hermano le coloca un brazo en el hombro—. Pero ya que estamos aquí, creo que tus problemas están por solucionarse mucho más rápido de lo que imaginábamos. —lo palmea varias veces en el hombro y comienza a caminar.

—¡Warden! ¿Dónde estamos?

—Estamos en el palacio real. —me responde en voz baja mientras yo vuelvo mi mirada hacia el opulento castillo que se alza frente a nosotros.

Ya veo que el vestido y las joyas, eran justo lo necesario para la ocasión. Me admiro nuevamente y entonces reacciono a lo que Warden me acaba de decir.

—¿Cuantos palacios hay en tu mundo? —inquiero curiosa.

—Solo uno.

—Entonces la boda...—no puedo terminar la frase. Las palabras se quedan atoradas en mi garganta.

—Vamos, ustedes dos, no queremos llegar tarde.

Me tambaleo hacia los lados y Warden me sostiene. Esto no me lo esperaba. No creo estar preparada para la magnitud de lo que esto significa. No creo estar lista para verlo casarse con alguien más.

—Vamos Lizzy, debes mantenerte firme.

—¡Warden! No creo que pueda.

—Yo estaré a tu lado en todo momento. Vamos.

Warden me tiende el brazo y me sostengo de él mientras me conduce rumbo a la entrada del impresionante castillo.

Justo antes de entrar y en el centro del enorme estacionamiento, hay una elegante fuente iluminada. Admiro entonces la entrada del castillo. Tiene tres puertas, una enorme y giratoria en el centro y a cada lado de esta dos normales y dobles, también grandes. Todas las puertas son doradas, al igual que los enormes ventanales de los que escapa una luz dorada resplandeciente.

Atravesamos la puerta giratoria y llegamos a un recibidor. Todo el interior está decorado en dorado y negro. El suelo es de mármol blanco, con dibujos de dos líneas, perfiladas en negro, formando cuadrados enormes. A nuestro alrededor hay cientos de personas caminando de un lado a otro o simplemente sentadas disfrutando de una copa de champagne que les ofrecen o algún aperitivo.

—Vamos a registrarnos. —me dice Warden haciendo que lo busque con la mirada.

—Sí, adelántate, estoy admirando el lugar. —me suelto de su brazo. Creo que dice algo más, pero yo no lo escucho. Estoy anonadada por tanta opulencia a mi alrededor.

Continúo explorando y avanzo, entre las personas, cruzando los enormes arcos del recibidor que dan paso a la estancia principal. Esta es mucho más impresionante.

El enorme suelo marmoleado se divide en tres secciones, quedando solo en blanco con el mismo diseño anterior en el centro, formando una especie de camino. Pero esta vez, las líneas doradas, se unen y forman un círculo por cada cara de los cuadrados. Dentro de estos, un símbolo celta que luce bastante familiar, como el que Aren tiene en su hombro.