CAPITULO 9

31.9K 1.2K 26
                                        


Hoy, tuve que enviar una excusa a mis profesores excusándome que estaba enferma y por eso no pude presentarme hoy, en realidad tenia demasiado trabajo así que tuve que quedarme a ayudar con los preparativo de la fiesta
—Cuarto día y sigues sorprendiéndome Mey.
—Señor Clark. —le entrego la lista y los documentos que me pidió terminar —He terminado todo, incluso ayudé aquí un poco. —el me felicita porque todo esta impecable. —Bueno, si no le molesta.. —murmuro mientras veo la hora en mi muñeca —Quisera llegar a mi ultima clase y...
—Se que es importante para ti tus estudios, pero quisiera molestarte esta noche, —no puedo decirle que no porque me echaría de mi trabajo —él me entrega un sobre al abrirlo me quedé paralizada cuando vi el efectivo —Quisiera que estuvieras presente esta noche como una de mis invitadas ¿Qué dices?
—¡Woow!... —torpemente me rio —Señor Clark... esto es.. mucho...
—Es lo suficiente como para que puedas comprar un vestido ideal para la ocasión y para que puedas ir al salón.
—P-Pero...
—Te veo a las 8:00 pm.
Contesta la llamada y cuando estaba saliendo, una chica me dio una invitación, era dorada. con una sonrisa sonrío emocionada porque no esperaba poder asistir a un evento como este, "el vendrá también"
Esperé que el me invitara pero jamás lo hizo, algo que no lo esperaba, incluso no he sabido nada de el en estos tres días que pasaron, le he llamado pero no responde así que pensé que estaba ocupado
—Bien.
inhalo profundo cuando veo el salón mas costoso de la ciudad. Había comprado un vestido hermoso aunque al principio esas estúpidas dependientas no me quisieron atender ya que según ellas esa tienda era exclusiva y ni soñando podría pagar un vestido de su diseñador exclusivo, cuando entré al salón un hombre me recibió y me miro de pies a cabeza
—No te preocupes, puedo pagarlo si no, no estaría aquí.
—No, no... solo observo lo horrible que tienes el cabello, cariño ¿hace cuanto no lo hidratas como se debe?
—Yo... Escucha, necesito verme impactante, mi jefe me invito a una fiesta que parece ser muy... y no quiero decepcionar a alguien en especial,
—me pregunta donde es la fiesta y sonríe emocionado —Bueno, entonces no tenemos mucho tiempo ya que eso es en cuatro horas así que ¡¡Niñas!! —me estremecí cuando grito. Cuatro mujeres se acercaron —Hay que transformar a esta bella chica en un hermosa princesa. Rápido chicas que también debo verme impresionante.
—¿Qué?...
Después de cuatro horas sentada sin saber que me estaban haciendo, el hombre que me dijo que se llama Dani, me envió a vestirme, al salir me acomodo el cabello y dio unos retoques, cuando me miro saltó emocionado, me llevó a un espejo y me quedé en shock cuando me vi.
—¡Mierda, ¿Qué me hiciste?!
—¿Espera, no te gusta? —dijo borrando su sonrisa
—No. Me fascina. Dani, estoy... irreconocible, parezco una mujer de la alta sociedad, Gracias. —lo abracé y saqué el dinero para pagarle.
—No, no, no... —me sentí confundida, ¿acaso no es suficiente? —A cambio quiero que me lleves contigo, es que... muero por ir ahí pero solo entras si vas con alguien que tiene invitación y...
—Ok, —Sonrío —Bueno, ahora solo debemos buscar un taxi....
—¿Cómo que un taxi?.
Cuando llegamos, eran las 8:15 y mi jefe ya estaba afuera como si buscara a alguien, Dani quien hasta ahora ha sido muy amable conmigo, me ayudo ya que no dominaba bien los tacones.
—Escucha, solo debes sentirte una diosa, y veras que te sentirás mejor usándolos.
Mi celular comenzó a sonar y vi que era el señor Clark, nos acercamos a el y cuando me vio su rostro se desencajó por completo, guarda su celular sin quitarme los ojos de encima.
—¿Mey?
—Si. —Sonrío de lado —Me estaba llamando.
—Eres mi invitada y pensé que no vendrías... ¿y tú eres?.. —dijo al ver a Dani.
—Soy Dani, soy el responsable de este milagro perfecto, y ella me invitó.
—¿Qué yo que?
Dani me dio un piñizco que me dolió como un demonio y le sigo el juego afirmando lo que dijo y mi jefe le dijo que no había problema y Dani nos dejó a solas. Mi jefe dice que no se había equivocado conmigo al decir que no solo era talento.
—Ven, hay que entrar, se que tienes buena memoria así que necesito que te mantengas a mi lado y me ayudes a afirmar si lo que dicen algunos clientes son ciertas o patrañas sobre los contratos que estaban en la iPad.
—Ok.
Me ofreció su brazo y cuando estábamos por entrar algunos fotógrafos le pedían una fotografía y claro que el señor Clark aceptaba. Mis nervios se incrementaban ya que en cualquier momento el iba a parecer y quería sorprenderlo cuando me viera, quería ver su reacción al verme con este cambio
Seguí a mi jefe y tal como me lo pidió hubieron algunos que se quisieron aprovechar de el por ser nuevo como el dueño de todo pero yo le ayude diciendo lo que seria beneficioso para ambos y lo que seria bueno solo para ellos y no para la empresa
—Cariño. —Dani se acerca a nosotros, tu.. eres mi amuleto de la suerte. —el se da cuenta que estoy buscando a alguien —¿Se te perdió alguien?
—Bueno yo...
Cuando vi entrar a Lucas con Erika, usé a Dani para que no me vieran, el se dio cuenta y me preguntó si los conocía, y le resumí todo en unos segundos, y el me dice que jamás debo confiar en las mujeres ya que siempre son traicioneras, cuando se da cuenta que lo veo molesta el se corrige diciendo que algunas son traicioneras.
Pensé que no vendría pero después de seguir esperando su llegada al lado de mi jefe, lo vi entrar, pero cuando lo vi acompañado de una mujer se me hizo un nudo enorme en la garganta porque pensé que vendría solo.
—¡¡Oh por dios!!... Dani me jala del brazo —Es el papasito de Víctor Santoro, ash, es una lastima que sea casado.
—¿Qué? —mi corazón se hizo una bolita cuando Dani dijo eso —¿Es.. casado?
—Claro mi reina, todo mundo sabe que esta casado y que tiene dos hijos de diferentes chicas, —suspira al verlo —Quisiera haber nacido siendo chica, le daría todos los hijos que quiera.
Pues,... yo no sabia que estaba casado, él... me engañó.

 me engañó

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
placer Ilicito Donde viven las historias. Descúbrelo ahora