CAPITULO 41

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—Te prometo que no va pasar.

El mira inseguro de mis palabras, cierras sus ojos y lo piensa por unos segundos, luego me mira fijamente y frunce el ceño, cuando mueve su cabeza en aceptación sonrío nerviosa y tomo su mano prometiéndole que le debía un favor, pero el me deja en claro que todo es responsabilidad mía, todo lo que llegue a pasar será mi responsabilidad y le dije que si.

Se muy bien que no lo va esperar y que dirá que no al creer que sería un trío de dos chicas con él, así que será suficiente para mantenerlo alejado de mí por un tiempo, el cree que porque mis hijos lo aceptaron tiene esperanzas conmigo y esta noche cuando diga que no... será una prueba de lo que digo

Había organizado todo para esta noche, le mentí a mis padres al decirles que me quedaría hasta tarde trabajando y que probablemente no llegaría hasta la mañana siguiente, hace tres días que lo hablé con Clark así que para que no supiera quien era usaría una máscara, bueno, todos la usaríamos y nadie se la quitaría hasta que Víctor se negara

<<¿Estas seguro de esto?>>

<<Si, te veo en la noche>>

<<Ok>>

Las horas iban corriendo en mi contra y ya pronto llegaría el momento en que debía irme, un abrigo largo cubre mi cuerpo de la lencería que usaría para enfadarlo y así yo ganaría cuando dijera que no.

Al bajarme del taxi pude ver a Clark esperándome, se acercó y me preguntó nuevamente si estaba segura de mi decisión porque el no estaba tan seguro de lo que estaba haciendo.

—Ya verás que se negará, es muy territorial para aceptar que otro se una al dúo.

—Mey... ¿no crees que lo estas subestimando?.

—No. —respondo tranquila —¿Te aseguraste de que nadie diga nada?.

—Si. —suspira ansioso —No porque demonios acepté.

—No te preocupes, todo saldrá bien.

Entramos y subimos al elevador, nos quedaríamos con la mejor suite ya que este hotel, es una de los muchos que le pertenecen a Clark, mi ahora mejor amigo. No nos tomaría mucho tiempo en que todo pasará así que lo habia pensado en todo, cuando el se niegue, Clark se iría a la habitación de al lado y esperaría a que él se fuera y me llevaría a casa porque el no volvería a molestarme

Nos preparamos ya que faltaba dos minutos para que el entrara porque Víctor tiene una costumbre de llegar dos minutos después de la hora indicada. Clark se coloca el antifaz en su rostro cuando la puerta principal fue abierta por alguien, Víctor no se percata de él aún hasta que levantó su rostro y lo ve a mis espaldas

—¿Listo Víctor?

Ladea una sonrisa mientras deja las llaves sobre una de las mesas de al lado de la puerta.

—Así que el trío es una chica y dos hombres. —acepto al decir que si —Menuda sorpresa que me has dado, creí que...

—Si rodeos Víctor. —dejo caer el abrigo, el eleva ambas cejas, muerde su labio inferior mientras sonríe —Dijiste que harías cualquier cosa.

—Bueno, pues... no lo acepto. —sonrío cuando lo dice, volteo y observo de reojo a Clark porque es tal y como lo dije —Es lo que esperas que diga no es así Mey. —fruncí el ceño confundida porque no se veía molesto —En fin... entonces hay que empezar.

—¿Espera que? —me paralizó cuando el se me acerca —Una conejita tan traviesa debe ser castigada severamente por sus ilícitos deseos.

Mi cuerpo comenzó a temblar ya que esto no es lo que yo había planeado, sus labios se apoderan de los míos mientras sus manos sujetan mi cuello sin lastimarme y fue de pronto cuando sentí que otras manos sujetan mis caderas mientras reparten besos sobre mi cuello y al mismo tiempo mordisquea sutilmente, "Clark... que haces".

No podía articular una sola palabra y de una forma extraña mi cuerpo comenzó a arder cuando las manos de Clark masajean mis senos mientras que una de las manos de Víctor viaja hasta mi intimidad y desliza sus dedos humedeciéndome aún mas al tocar ese punto sensible, mi corazón se enloquece y mi mente se queda en blanco, y en un rápido movimiento Víctor me hizo girar hasta quedar frente a Clark y sin darme tiempo de respirar aprisiona mis labios en un beso salvaje y caliente

Víctor no deja de tocarme y Clark tira sutilmente de mis pezones haciéndome gemir entre besos y todo empeora cuando Víctor me penetra doblemente, al lograr librar mis labios miro hacia abajo y me quedo petrificada cuando vi un juguete sexual, "Un maldito dildo"

Clark se mantiene en silencio y continúa un beso tan feroz e intenso que me deja sin aliento mientras tanto Víctor mueve el dildo en un moviendo que me vuelve loca, jadeo y gimo porque de un momento a otro me estaba follando

Que demonios este juego, como es que terminé en esta posición, nada de esto debería estar pasando, ¿porqué está haciendo esto? , mis ojos miran fijamente los grises de Clark y recuerdo sus palabras en mi cabeza "Lo que pase es tu responsabilidad, no la mía" y yo tontamente acepté porque me confié en que él no aceptaría y terminó siendo lo contrario

Sin darme cuenta Víctor me había quitado lencería y estaba completamente desnuda frente a ellos, Clark me volteo y me encontré con la cara del idiota de Víctor que se veía extasiado y excitado al ver mi cara roja y mis labios enrojecidos

—Nadie juega conmigo, conejita... —se acerca a mi oído, siento su aliento demasiado caliente y su respiración agitada —Creíste que me negaría, pero aún no sabes de lo que soy capaz. Se muy bien trajiste a Clark para esto, pero es aquí, donde ambos verán que... tú me perteneces solo a mí.

Un grito de susto se escapa de mi cuando carga en sus brazos pero al mismo tiempo un gemido gutural se escapa haciendo que me aferre a su cuello cuando lo siento dentro de mí, mi cara arde y el no se mueve después de unos segundos de silencio, las estocadas toman intensidad y fue cuando sentí una penetración más, Víctor me besa en el momento que sentí la penetración de Clark, su beso intenso ahoga mi quejido por el dolor que iba desapareciendo para luego sentir placer cuando el se mueve.

—Víctor.. Cla..

—Shh.. no te preocupes conejita, esto solo es el comienzo de una noche larga.

placer Ilicito Donde viven las historias. Descúbrelo ahora