Prometo

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Weno, antesala de empezar quiero que sepan que esoy profundamente agradecido con todos ustedes 😁. Gracias por aquellos comentarios de apoyo para que continue con esta historia. Y espero que estas palabras logren expresar mi profunda gratitud hacia ustedes, porque sin ustedes no tendria el valor para continuar. Aunque estas palabras creo, le quedan corto a la gratitud que siento 😊😁

Prometo que daré lo mejor de mi en esta historia 😉, la continuaré hasta el final. Aunque tenga que luchar contra viento y marea. Lo lograre, aunque me tarde un poco. Y aré que sea de su agrado. Solo por ustedes 😃😊

Nuevamente, muchas gracias por su apoyo😊😘.

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Dylan: ¡¿qu-que?! —dije sorprendido.

Marck: lo que escuchaste —reafirmó las palabras que antes dijo— quiero ayudarte.

Dylan: Marck, si esto es una broma, dejame decirte; que es de muy mal gusto —dije separándome de él dando un paso hacia atrás, con molestia por esta broma. Pero me tomó nuevamente de la cintura, y me atrajo a él.

Marck: no, no lo es —rectificó mis palabras colocando su pata en mi mejilla acariciando con su pulgar. Mirándome con suplica acercando su rostro— ya no aguanto más —susurro a centímetros de mis labios intentando besarme.

Los nervios me dominaban, y la confusión me torturaba. Por instinto ante el intento de besarme y la cercanía de Marck, lo aparte colocando mis patas en su pecho dando un paso hacia atrás, y alejadolo a la vez.

Dylan: ¿que te pasa? —pregunto confundido y exaltado— ¿intentaste...basarme?. Marck, por favor explícame porque me estas confundiendo —ordene, ya frustrado por sus inexplicables acciones.

Marck: ¿no lo entiendes? —preguntó, acercándose de nuevo a mí. A lo que respondí dando un paso atrás, manteniendo la distancia.

El solo seguía acercándose con una sonrisa ladina en su rostro. Acercándose más y más mientras que yo daba pasos hacia atras para alejarme y mantener distancia. Todo esto me esta confundiendo mucho, y es molesto. 

¿Por que actua así? ¿es una broma? ¿esta ebrio?. Esas preguntas rebotaban en mi cabeza, sin hallar respuestas.

El espacio se acabó para mi cuando sentí mi espalda chocar con la pared y Marck aprovechando esto, se acercó y colocó su pata izquierda en mi cadera, mientras que la derecha la colocó al costado de mi cabeza.

Ahí estaba yo. Acorralado contra la pared por un gran macho musculoso, que sin explicacion me atrapo en esta posición.

Los nervios me dominaban por la cercanía causando que mirara a todos lados evitando la miranda del tigre, esperando a que esto sea solo una broma que acabaría en cualquier momento. Quiero creer que es una estupida broma, que difinitivamente no le perdonaré en mucho tiempo.

Marck colocó su dedo en mi mentón y levanto mi rostro para que nuestros ojos se encontraran, conectando nuestras miradas. Despues su mirada se desvio y bajo hasta mis labios, luego hasta mi cuello. Se acercó al lugar y repartió besos lugrando jadeos de mi parte.

Quería detenerlo, pero no pude. Esos besos se sentían tan bien, que mi cuerpo me traicionó y aparte mi cabeza para darle más acceso.

Se sentía muy bien.

Marck: Dylan...—me nombró deteniendo sus besos—...te amo...ya no puedo ocultarlo más...—dijo tomando mi rostro entre sus patas, y yo lo miraba confundido—...te amo...me enamore de tí desde el dia en el que nos reencontramos. Me enamoré de la persona más gentil, amable, y sexy de este mundo...—dijo acariciando mi mejilla con su pulgar—...te amo Dylan Evans. Quiero ser yo quien despierte cada dia a tu lado, y te abrace al dormir. Quiero tener todos tus besos, y abrazos...quiero estar en tu celo y hacerte el amor hasta el amanecer...y quizás adopgar unos cuantos cachoros...yo puedo protegerte y darte lo que necesites. Bajaría las estrellas del cielo por tí si quisieras, mi amor...no importa si tengo que entregar mi vida a cambio de la tuya...yo te amo, y...lo daria todo por tí...—terminó su declaración de amor con aquellas palabras. Tomando mis patas con las suyas entrelazando nuestros dedos. 

Tomando mis manos se acercó a mí y me dio un beso. Que tuve que rechazar. No sentía nada por el mas que amistad, y aunque me dijera todas aquellas hermosas palabras, no puedo decir que lo amo...

Dylan: Marck...escucha; te agradesco todas estas hermosas palabras. Pero lo siento, no siento lo mismo por tí. Yo solo te veo como un amigo, nada más. Yo no te amo...—rechaze. No quería herir sus sentimientos, pero era necesario dejar las cosas claras.

Marck: t-te...entiendo...yo...am...creo que debo irme...—fue lo que dijo antes de salir del lugar y luego de la casa entre unas cuantas lágrimas. Pero antes de salir escuche decir—...adios...

Esa fue la ultima vez que lo vi, antes de que las cosas se pusieran de cabeza.

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Semanas después.

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Dylan: ¡Max, han pasado dos semana. Y no aparece! —exclamé con preocupación sentado en el sofá, junto a Max. Pensando en lo que le pudo haber ocurrido a Marck.

Max: calmate, el está bien —dijo colocando su pata en mi hombro, dandome apoyo— Marck es fuerte. El regresará pronto, por favor calmate amigo —dijo con seguridad trarando de calmarme. Pero no pudo.

La culpa me esta matando. Si algo le sucede a Marck, no se que haría. Después de que rechaze a Marck, él salio de casa y no ha vuelto desde entonces. Quiero salir a buscarlo, pero por mi trabajo no puedo hacerlo.

No se que hacer, me estoy volviendo loco. Pero gracias al cielo hoy es sabado, y puedo salir a buscarlo sin preocupaciones.

Dylan: ¿y si...le pasó algo. Y es mi culpa?...—dije con la voz quebradiza. Me duele solo pensar que Marck este herido— ¡Max, tenemos que encontrarlo! —exclamé poniendome de pie y empezando a caminar a la puerta principal para salir.

Max: hey, calmate. Solo esperemos un poco más ¿si?—ordeno con tranquilidad, tomando mi brazo deteniendo mi andar.

 Dylan: Max...si algo se pasa a Marck, no me lo perdonaría...—dije con mis ojos cristalizados y voz quebrada, mirandolo con tristeza.

Max: escucha; se que te sientes preocupado y culpable por rechazarlo. Pero debes entender que no es así —dijo firme, tratando de hacerme entender su punto de vista. Pero el mío era completamente distinto. Me miró, y sedió— ven. Debes comer, o tendras energia para encontrarlo —dijo llevandkme ala mesa, y despues fue a la cocina y preparo unos huevos revueltos con pan tostado que teajo servido en un plato. Se veía delicioso.

Dylan: gracias —agradecí su preocupación. Luego empecé a comer, aunquesin mucho apetito.

Max: de nada, para eso estamos los amigos—dijo sonriendo— tu come, mientras yo pensare en donde puede estar —dijo antes de caminar hasta la sala de estar, y sentarse en el sofá a pensar.

¡Lo daria todo por ti!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora