El fotógrafo(Aidan Gallagher Y tu)

El síndrome de DiGeorge

La gente en el hospital se movía de manera lenta y pacífica, todo con el fin de crear un ambiente tranquilo y cálido para los pacientes quienes necesitaban estar en calma y en reposo.

Parecía ser una noche tranquila en el lugar pues en la hora que Noah y t/n llevaban sentados en la sala de espera no había pasado ningún accidente o alguna situación parecida, por suerte.

T/n abrazaba con preocupación las cosas de Aidan, como su saco, las llaves de su auto, y la pequeña cámara instantánea qué al parecer siempre llevaba a todos lados.

Ella y su primo adoptivo seguían en shock, pero habían logrado conducir el auto de Aidan llevando a este mismo inconsciente en los asientos traceros. Noah quien estaba más consciente lograba recordar como entre el y t/n lo habían cargado hasta su auto y el al tomar el volante había sonado el calxon desesperadamente, nada más llegar a las puertas del hospital.

Acto seguido un par de enfermeras salieron y con ayuda de unos camilleros sacaron a Aidan del auto y ahora estaba ahí junto a la castaña, sin saber nada del chico.

No era capaz de decir ni una sola palabra, podía ver la desesperación camuflada en las lágrimas qué salían de los ojos de t/n, ella tenía miedo... Miedo de volver a perder a alguien querido.

Sin pensarlo tomo su mano, tal y como lo hacía de niños entrelazando cuidadosamente los dedos acariciando los nudillos agenos en busca de calmarla.

-tengo que llamar a su madre, ella debe estar preocupada-t/n hablaba en susurros suficientemente altos como para que Noah la entendiera.

-tienes el número de su casa o algo así-preguntó el castaño mientras buscaba con la vista algún teléfono.

-no-respondió-pero si se quien podría tenerlo-dijo mientras el recuerdo de un amigo rubio llegaba a su memoria.

...

Toronto Canadá.

El teléfono en la recepción del hotel sonaba insistentemente hasta que la chica de recepción luego de dejar su manzana de lado lo tomo.

-The Drake hotel a su servicio buenas noches-

-hola-dijo t/n mientras se recargaba en la blanca pared del hospital-estoy buscando a Solane Hargreeves, esta de luna de miel en su hotel-

-permitame un momento-respondió la chica para dejar el teléfono de lado y buscar en el librio de registros, una vez encontrada la habitación tomo nuevamente el teléfono-en efecto señorita, ella y su esposo el señor Hargreeves están hospedados aquí ¿decea qué la comunique?-

-si por favor-

-¿de parte de quien?-

-t/n-respondió y la música de espera comenzó a sonar.

-t/n- tras aproximadamente un minuto Solane respondió-qué lindo es que me llames-

-hola-dijo sintiendo qué pronto rompería en llanto.

-¿qué sucede linda?- la rubia respondió preocupada.

-Luther esta contigo-

-si, estamos cenando ¿porque?-

-¿puedes pasármelo?-

-t/n me estas asustando ¿estas bien? ¿Las chicas están bien?-

-todo esta bien, solo necesito que luther me haga un favor-y enseguida logró escuchar como la recién casada llamaba a su esposo.