Hasta Que La Vida Nos Separe

CAPITULO 30

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🎶Se recomienda escuchar
Snowman / Sia 🎶
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CAPITULO 30
AÑO NUEVO
─═❦𝑫𝑨𝑹𝑰𝑬𝑵❦═─

Nuestra idea era pasar la noche de fin de año con la familia de Serena pero ante una tormenta de nieve, nos complicó todo.
Los vuelos habían Sido cancelados hasta nuevo aviso, no se nos permitía salir del Hotel ya que afuera era tan fuerte la tormenta que se podía ver todo blanco.
Al menos el hotel nos había ofrecido barra y bufet libre durante los días de tormenta así que estábamos aprovechando lo que nos daban.

Hoy exactamente era 31 de diciembre, estábamos a tan solo pocas horas para finalizar el año e iniciar uno nuevo. Un nuevo año junto con Serena, un nuevo año donde no tengo idea de las cosas que vendrán, si serán mejor o peor. Había una cosa de la que me preocupaba para iniciar este año pero no debía pensar en eso, solo debía concentrarme en otra cosa.

Salí del cuarto de baño, Serena estaba dándome la espalda pero sabía que estaba dormida. Su pausada respiración me lo confirmaba.
Aún que no me lo decía directamente, yo sabía que algo malo le pasaba. Constantemente se le dificultaba respirar, tenía dolor de cabeza y se cansaba a pesar en decir que no le sucedía nada. Sus mentiras no me las creía pero aún así hacía mi intento de asegurarme de que estuviera bien en todo momento.
La observaba durante todo el día tratando de ver hasta el más mínimo detalle. Debía admitir que Serena era buena fingiendo pero cuando ella creía que no la estaba observando, hacía caras de dolor. Eso me preocupaba demasiado.

Me acerqué a ella pasando mis dedos por su cabello y detenerme en su frente, la temperatura era normal, respiraba con tranquilidad. Al menos estaba bien pero ¿Y si no lo está?
La preocupación empezó a surgir en todo mi cuerpo.

—Hey.

Parpadeé, su suave voz ronca me hizo mirarla.

—Hey, ¿Cómo estás? —le sonreí pasando mis dedos sobre su mejilla.

—E tenido un buen descanso —bostezó—. ¿Y tú qué has hecho?

—He tomado una ducha.

—Sin mí —inquirió con una sonrisa seductora.

De igual manera le devolví la sonrisa.
Soy insaciable con ella pero al notar las ojeras en su rostro me hizo suspirar y cambiar el rumbo de la conversación.

—¿Tienes hambre? Han hecho una cena especial para los huéspedes, podemos bajar y comer en el restaurante o pedimos la comida y la pasamos aquí.

Serena pensó la respuesta, se incorporó.

—No tengo muchas ganas de salir podemos pedirla y ver un maratón de Harry Potter —sonrió—. El principe mestizo siempre ha Sido nuestra favorita.

Me reí.

—Hecho, pediré la cena.

Le dí un leve beso antes de ponerme en pie.
Dentro de media hora nuestra cena sería traída así que teníamos tiempo suficiente. Regresé a la habitación, ahora Serena estaba en pie observando hacia el balcón. La nieve seguía cayendo con fuerza dejando ver la lluvia Blanca, las luces de los edificios. Era una hermosa vista para los ojos indicados.
Me acerqué a ella abrazándola por detrás dejando un leve beso en su hombro.