VENGANZA DESEADA (LIBRO I SAGA MUJERES DE LA MAFIA)

CAP 62

¿Cuál es el nombre de Lombardi?

MIKHAEL.

--Creo que he enloquecido. -opina Amira mirando a los árboles.

--¿Que sucede? -cuestiono encendiendo el auto de Andrés para irnos.

--Creo haber visto a alguien...-voltea a mirarme- ¿Que pasaría si yo llegara a matar a Alessandra?

Cuestiona con demasiado interés a mí parecer.
Niego deseando paciencia.

--Pues todo se volvería un caos porque aunque lo niegue Alessandra es alguien importante, llevó a mí hijo en su vientre por nueve meses. -explico acelerando al escuchar los disparos.

Amira bufa con rabia y la veo marcar un número.

--Hola Brittany. -acomodo mi mano en su pierna y escucho la conversación- Necesito un favor.

Un silencio inunda el auto y yo solo hago círculos en la pierna de la muñeca manteniendo mi atención en la carretera.

--Esa misma, dile a Carolin...--Amira corta la llamada- Mikhael no se porque siento que viene la peor parte de la guerra.

Su voz es baja, volteo a mirarla, ha apoyado su cabeza en la ventana del auto.
Regreso mí mirada a la carretera.

--Siempre confía en tus presentimientos. -digo estacionando el auto en la orilla- Te noto apagada, ¿Algo que no me hallas dicho?

Amira chasquea su lengua y se acomoda de lado en el asiento para mirarme a los ojos.

--He visitado la tumba de Samuel...-asiento sabiendo lo mucho que le afectó esa muerte- Sé que han pasado meses pero... Aún duele Mikhael.

Me repara con tristeza retenida.

--No te gustará lo que diré pero...Amira Rinaldi eres la mujer más valiente que he conocido. -suspira mirándome con rabia.

--Ya te he dicho que no me gusta ser valiente. --me recuerda mordiendo su labio.

La observo con tanta intensidad que ella se retuerce en el asiento.

--Pero no lo puedes evitar. -digo quitando mí mirada de ella para evitar sentimientos estúpidos- Amas a Samuel y eso no cambiara.

--Mikhael siento que si lo suelto me olvidaré de su rostro y de como se oía su voz...-suspira- No quiero olvidarme de él, siento que si lo hago le fallaré como mejor amiga.

--Amira no lo olvidarás, estás aprendiendo a superar y eso es bueno, superar no significa olvidar. --enciendo el auto y conduzco nuevamente.

--Faltan pocos días para mi cumpleaños. -dice cómo si yo lo fuera a olvidar.

--Tambien para tu boda. -le recuerdo apretando mi mandíbula.

--Ahhh sí, lo había olvidado. --su desinterés me alivia pero no lo suficiente.

No quiero verla vestida de blanco llegando al altar en él cual la recibirá un inepto, creo que no asistiré a esa boda, me niego a ver como se convierte en una mujer casada.
Después de minutos llegamos a mí casa y ella baja del auto, me acerco a la muñeca para que se apoye en mí hombro, juntos entramos.

--Traeme un botiquín. -le pido a una sirvienta mientras siento a Amira en el sillon.

--Mikhael no quería preguntarte pero, ¿Que hiciste con el cuerpo de Gerónimo? -trago en seco ante la mención de mí padre.

Suspiro y esquivo su mirada queriendo que no note lo mucho que me duele, yo quiero y debo ser fuerte.

--Las cenizas han sido tiradas al mar. -susurro con un sabor amargo en la boca.