୧ ׅ𖥔 ۫ 𝑻𝒘𝒆𝒏𝒕𝒚 𝒕𝒉𝒓𝒆𝒆 ⋄ 𓍯

682 81 9
                                    

El sultán miraba a su familia desde el balcón, Mahidevran se veía más joven a sus ojos por estar riendo con sus hijos. Selim y Bayaceto jugaban a las espadas mientras Mihrimah y Mehmed hablaban con Mustafa y Turhan. Raziye estaba hablando con su madre contándole chistes para hacerla reír y poder olvidar el mal rato que habían pasado hace unos minutos. Süleyman suspiro mientras se alejaba sentándose en su cama, tenía dolores de cabeza constantes y solo miró hacia el techo

-Hürrem ¿que estoy haciendo mal?- Pregunto a la nada mientras se frotaba las sienes -Estoy intentando ser un buen marido pero siento que solo estoy haciéndoles daño- Se sentía solo, a pesar de que Mahidevran era su esposa, sabía que no lo amaba y el a ella tampoco -Casare a Raziye ¿recuerdas cuando era una niña?- Siguió con sus preguntas, una parte suya añoraba que la pelirroja entrara a sus aposentos con prisa -Por Allah, te extraño mucho- Sintió sus lágrimas caer mientras suspiraba.

Hace tiempo tenía alucinaciones con la pelirroja y eso lo hacía sentir fatal. Cuando pasó la noche con Rashta, su cerebro le hizo una mala pasada y pensó que era Hürrem, por eso la había recibido en sus aposentos y por eso sentía que debía tenerla a su lado. Pero eso provocó la muerte de su madre, el alejamiento de Mahidevran y el leve odio que recibía de parte de sus hijos luego de hacer a la castaña llorar.
No estaba cuerdo, desde hace tiempo que había perdido las ganas de gobernar y pensaba en dejar como regente oficial a Mustafa con ayuda de Mahidevran

-Su majestad- Entró Ibrahim de forma apresurada mientras hacía una reverencia
-Ibrahim ¿que sucede?- Preguntó el sultán mientras se levantaba
-La señorita Rashta, está dando a luz- Murmuro el pasha mientras levantaba la mirada, detrás suyo estaba Mahidevran con el semblante descompuesto seguida del guardia
-¿Qué?- Preguntó Süleyman saliendo del trance para levantarse -¡Vamos!- Ordenó a Ibrahim mientras salían hacia los aposentos de Rashta

Mahidevran hizo una reverencia leve hacia el sultán aunque mantuvo la mirada en el suelo hasta que se alejaron, se sentó en el suelo y cubrió su cara con ambas manos mientras sentía las lágrimas caer sobre sus mejillas. Se sentía débil, se sentía tonta por sentir algo por ese hombre. Segundos después, sintió los brazos de un joven por lo que levantó la cabeza topándose con el cabello de Akar, la estaba abrazando, rompiendo cualquier ley o protocolo que debía seguirse conforme al palacio. Por solo unos segundos, quiso alejarlo demostrando que estaba mal pero lo abrazo con suavidad mientras seguía llorando en silencio, se sentía raramente protegida por aquel hombre que conocía hace tres días y solo guardó silencio
-Sultana, porfavor no llore- Murmuro el guardia mientras se separaba y le limpiaba las lágrimas con cuidado
-Akar, te pueden ejecutar por esto- Susurro Mahidevran mientras lo miraba
-No importa- Contestó mientras se levantaba y le extendía la mano para levantarla
-Claro que importa- Le reprochó mientras empezaba a caminar hacia sus aposentos
-Sultana- Murmuro Ibrahim mientras hacía una reverencia, luego levantó la mirada -La acompañó a sus aposentos- Dijo mirando a Akar para que los acompañara

Mahidevran caminaba hacia sus aposentos, se notaba cansada y se acercó hasta la puerta tomando la perilla. Se oían las risas de sus hijos en sus aposentos y no quería arruinar el momento
-Sadika, pásame una capucha- Pidió en un murmullo hacia la concubina para que le pasara la capucha para poder salir. Al tenerla en sus manos, se la puso y miró a ambos hombres -Ibrahim creo que deberías ir con el sultán, en cualquier momento podría..-
-¡Mahidevran!- Gritó Hatice mientras caminaba (casi corría) hacia ella -La ceremonia del nuevo hijo del sultán está por comenzar, su majestad te quiere ahí- Replicó mientras miraba a los dos hombres
-Claro, vamos- Dijo mientras se bajaba la capucha y caminaba hacia los nuevos aposentos de Rashta.

Su rostro era notoriamente incómodo, había dicho nuevo hijo del sultán. La albina había dado a luz a un varón y eso le causaría problemas en un futuro. Al entrar a los aposentos, miró a las hermanas del sultán las cuales la miraba de forma comprensiva y veía como Rashta tenía una sonrisa triunfante en el rostro. Süleyman sostenía al bebé que lloraba en sus brazos mientras miraba a Mahidevran sin expresión alguna. Akar se mantuvo al lado de su sultana mientras miraba la escena con molestia y segundos después entró Raziye haciendo una reverencia hacia su padre y recibiendo la reverencia de sus tías

-Madre- Fue lo único que dijo mientras se ponía a su lado -Mustafa llegara en unos momentos- Dijo hacia nadie en especial mientras tomaba la mano de su madre
-Madre- Dijo Mustafa haciendo una reverencia hacia su madre pero mirando a su padre sin educación alguna, luego miró hacia él niño con asco y tomó la otra mano de su madre
-Empezaremos la ceremonia...- susurró Süleyman y empezó la ceremonia. Miraba a su familia con pena, mientras empezaba a nombrar al niño -Te llamaras Kadir...te llamaras Kadir...te llamaras Kadir...- Beso la frente del niño -Tu nombre significa hombre fuerte, porque serás igual de fuerte que...- Miró a su hijo mayor y al ver su mirada de asco, cambio el diálogo -igual de fuerte que yo...- Suspiro mientras regresaba al niño a su madre -Rashta, tu título es de sultana, eres mi segunda esposa ahora-
-Gracias su majestad- Agradeció la albina mientras le sonreía y arruyaba a su bebé

𝑶𝒑𝒐𝒓𝒕𝒖𝒏𝒊𝒅𝒂𝒅𝒆𝒔- 𝑴𝒂𝒉𝒊𝒅𝒆𝒗𝒓𝒂𝒏 𝑺𝒖𝒍𝒕𝒂𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora