HOLAAAAAAAA:) PRIMERO VOTEN Y NOS VEMOS AL FINAL DEL CAPITULO PARA CHARLAR UN POCO.
Amelia.
Luego de haber pasado hasta casi la madrugada con mis padres recordando momentos de pequeña, me desvisto y tomo una ducha fría para poder sacar todo el estrés y la tensión de mi cuerpo.
Cenar con Daniel y Sebas fue algo muy bonito, algo que no podría ni siquiera explicar. Mi gran problema ahora es Alex, que me encontró allí y lo peor de todo es que antes de que me acercara en la reunión cuando mi papá hablaba con Daniel yo le había texteado a Alex, excusándome que no podría ir porque tenía que pasar toda la noche con el.
Me acuesto en mi cama y me pongo a revisar unos apuntes de la universidad, necesito mantener un poco la mente ocupada.
Pasa alrededor de una hora y me empieza a doler la cabeza por lo que guardo todo en su sitio y me dispongo por ir a la cocina por una pastilla cuando el sonido de notificación de mi celular suena, lo tomo y se me ensancha una sonrisa al ver de quien es el mensaje.
-¿Estás despierta?
-No.
-¿Cómo me respondiste entonces? Acaso eres una sonámbula.
-Si y puede que un día llegue a tu casa así sonámbula y te golpee sin querer.
-Ah puede que aproveche ese momento y te bese-al leer ese mensaje me sonrojo.
-Estupido.
-Tonta.
-Imbecil.
-Fea.
-¡¿Me haz dicho fea?!
-Fea.
-Horrible.
-Fea.
Dejaaaa de decirme feaaaaaaa!!!!!
-Fea
-FEA
-FEA
-FEA
No aguanto mas y lo llamo, al instante contesta.
-¿Qué pasó fea?
-¡DEJA DE DECIRME FEA ANIMAL!
-PUES DEJA DE DECIRME COSAS FEAS A MI.
-IDIOTA.
-FEA.
-BASTAAAA
-YAYA...¿Qué haces?
-Nada aquí aburrida.
-¿Quieres hacer facetime y te enseño como a quedado dormido Sebastián en el sofá?
-Mhmmm deja que lo pienso...SIII.
-Ahora si mira-voltea la cámara y me deja ver al chiquillo que se ha quedado dormido encima de un carro de juguete, por suerte este le aguanta todo su cuerpo.
-¿Por qué no lo llevas a la cama?-pregunto-se puede hacer daño la columna-lo riño.
-Porque se me hace gracioso como se ha quedado dormido en su nuevo juguete, apenas te envié el mensaje de que había llegado a casa, Sebastián no demoro ni cinco minutos para ducharse ponerse la pijama y sentarse bajo el árbol para abrir sus regalos-conversa y voltea la cámara haciendo que enfoque todo su rostro.
-¿Y que vas hacer ahora?-pregunto.
-Pues dejaré aquí el teléfono para que veas como llevo a mi hijo a su cama...espérame-parece acomodar el celular y se aleja-¿si me ves?-pregunta y trago grueso cuando al alejarse veo que no tiene camisa solo anda con un pantalón de pijama navideña.

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El doctor imbécil
Teen FictionSoy muy aficionada del gimnasio, no puedo faltar porque dependo emocionalmente de el y según mi psicóloga dice que es algo malo pero eso no es el problema. Sino que estos últimos días no he podido ir al gimnasio porque he tenido una incomodidad allí...