Regalo Del Cielo

Capítulo 17 (El Cielo Gris)

Cuando Belén y yo llegamos al lugar, estaban todos sus amigos, familia, y estaba Eder completamente destrozado, el cielo comenzaba a tornarse gris, el ambiente no ayudaba en mucho, todos estábamos de negro mirando aquel ataúd, ella ya descansaba, ya se había ido de esta tierra, a veces me hubiese encantado conocerla más, pero Dios tiene un propósito que nos dará la mayor recompensa a su debido tiempo, no había nada que hacer, el verdadero sentido de la vida estaba escrito por cada ser humano, se acerca Eder, le doy un fuerte abrazo, a la madre de Jaqueline le doy mis pésame, Belén ya no estaba bien, tenía los ojos lloroso, pero al acercarnos poco a poco, la vi por última vez a Jaqueline, ella comenzó a llorar, yo simplemente le atraje hacia mí y la abrace, ella me miro, yo solo le dije que estuviera tranquila, pues, ella estaba dolida, pero no estaba sola, en fin, todos estábamos dolidos, habíamos perdido a una gran compañera, ya estábamos a mitad de año, todo estaba de color gris, el Cielo lloraba, las gotas comenzaban a caer, todo se iba oscureciendo, ahora la universidad estaría más silencioso, ya nada sería igual, solo Dios sabe hasta cuando estaremos cada uno en esta tierra.

La ceremonia del entierro había comenzado, nosotros nos quedamos observando a lo lejos, realmente había una incomodidad por un lado, se sentía un ambiente un poco tenso, bueno, era evidente, porque todavía quedaba mucho por delate, ella era un chica joven que solo quería cumplir con sus sueños, así como Belén y yo estábamos luchando por aquello, estábamos luchando cada día por estar más cerca de nuestro verdadero sueño, verdadero sentido de vida, realmente estábamos un poco asustados por todo lo que estaba pasando, pero, ella había sido la luz en medio de mi tormenta, desde que la conocí super que algo raro estaba en ella, capaz sea el regalo que el cielo me está dando, o solo una persona en la que debo aprender algo, luego marcharme y ambos seguiríamos nuestros rumbos de manera separada, pero nadie sabe lo que pasaría.

Ya todo había terminado, las flores se iban arrojando encima de su tumba, ya la estaban bajando, poco a poco se iba terminando su esencia, aquella tarde estaba nublada, con llovizna, aquella llovizna que demostraba la tristeza, aquello que todo se estaba cayendo a pedazos, todo iba dando paso a una enorme tormenta, Belén y yo nos despedimos, nos alejamos para estar solos, nos despedimos de Eder quién se quedaría a acompañar a la madre de Jaqueline. Belén subió al coche, yo me quedo mirando un rato a la nada, tenía miedo, miedo de perderla, sé que todavía lo nuestro con Belén no era nada oficial, pero ya me estaba dando miedo de perderla para siempre, una briza suave me saco de mis pensamientos, voy de vuelta al coche, para ya dirigirnos a su casa, de verdad le quería mucho a esa chica, poco a poco, se estaba poniendo cada cosa en su lugar.

Al llegar a casa de Belén, la tormenta se había instalado, el viento era fuerte, la oscuridad reinaba y apenas eran las cinco de la tarde, ambos nos sentamos en el sofá para recordar aquellos momentos que pasamos con Jaqueline, era todo raro, parecía que un vacío se instalaba entre nosotros, pero bueno, llego el momento de pasar una página, de seguir adelante, recibimos un mensaje de Eder diciéndonos donde estábamos, ella me dijo que le mande la dirección para que pueda venir a distraerse, le mando, él nos dice que llegará en media hora, entonces Belén y yo nos ponemos a preparar palomitas, para distraernos un poco de todo lo que estaba pasando.

Al llegar Eder lo recibimos y observamos de que la tormenta estaba en curso, bueno, hacía un frío de aproximadamente 14 a 10 grados, nosotros nos miramos un rato, ya que por lo menos yo que debía volver a casa no había traído ropa abrigada, vemos que Eder ha venido en bus, entonces me tocaba llevarlo a su casa, por lo menos dentro del coche no sentiría frío, o eso lo esperaba, entramos, nos acomodamos y comenzamos a ver una película de humor, para reírnos un poco, para distraernos, despejarnos de este trago tan amargo que nos acaba de pasar, por lo menos a mi amigo.

EDER:

Yo la busque desde mi juventud, ahora que estaba cerca de ella, se va, todo pasa por algo, no lo sé, pero a veces dudo mucho de la presencia de Dios, porque me parece injusto todo lo que está pasando, me parece que el mundo se está volviendo malvado, que las personas ya no respetan a los otros, ya no aman con el corazón, sino aman por medio de intereses, por ejemplo por dinero, a veces pienso que Dios da más privilegios a aquellos que poseen el poder, pero muy en el fondo me dice que no es así, todo estaba de color gris, el amor del mundo ya no era un amor como el de antes, solo se mira el bolsillo de cada uno, pero quizás solo quizás haya algunas excepciones, así como Crosh y Belén que poco a poco están superando las barreras, no hay nada mejor que un amor con el amor de Dios, pues todo este mundo está congelado, como en una gran nevera, los corazones de las personas ya no sienten la maldad, la vergüenza ya no hay, porque el mundo se está volviendo vacío, el amor está perdiendo la batalla, pero a pesar de todo, siempre habrá un verdadero amor, y vaya, puedo decir que es una alegría, un milagro si se encuentra a la persona indicada en esta actualidad, año 2022, todo está cambiando, el amor va saliendo de la vida de las personas, las familias se van dispersando, no he encontrado a nadie igual que a Jaqueline, pero lastimosamente, ella ahora ya no está, ha dejado de brillar, las esperanzas ya no hay, porque desde la frialdad del mundo, ya no hay nada nuevo por esperar.

Al terminar la película, me sentía un poco vacío, así que le die a Crosh que ya me iba, él me dijo para que me llevara, pues apenas eran las seis y media, no quería molestarlo, así que le dije que no se preocupara, que iría en bus. Al llegar a la parada, el viento estaba cada vez más frío, hacía frío, el amor en mi ser se estaba extinguiendo, llega mi bus, subo y pongo mi música en mi auricular, ya rumbo a mi casa, un camino que durará por lo menos 2 horitas, me hubiese encantado que el viaje dure más, así quizás pueda reencontrarme con ella, con aquella que se llevó una parte mía.