Capítulo 18 (Sanando Heridas)

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Ya había pasado seis meses de la partida de Jaqueline, Eder estaba volviendo a brillar, Belén y yo éramos cada vez los mejores amigos, el año se estaba yendo, un año que poco a poco estaba brillando, todo estaba bien, los problemas se estaban yendo, las pruebas estaban finalizando, mi mejor regalo del cielo es aquella que he conocido, ahora puedo ver lo importante que es Belén para mí, sé que poco a poco Dios pondrá todo en nuestro corazón, a su debido tiempo, por el momento solo tocaba seguir creciendo, pacientemente, dejando todo en sus manos, poco a poco lo que había pasado ya hace seis meses se estaba sanando, nosotros cada mes íbamos a visitarla en el cementerio, nunca perdimos contacto con su madre, ahora estábamos al cien por los exámenes, después de que pase esta época estresante, Belén y yo viajaríamos por el mundo, aprovechando nuestras vacaciones, cierto, muchos dicen que no estaba acostumbrado a viajar, pero no era así, es solo que no tenía con quién hacerlo, pero ahora que si lo tengo, y ella me tiene, aprovecharemos cada momento juntos, pues quizás el día de mañana, ambos simplemente ya no estemos, a veces me pregunto, de cómo puede uno amar por medio de intereses, pero bueno, cada persona está en su burbuja.

Suena mi celular, era mi amigo preguntándome un ejercicio de Bioquímica, ya que sería la primera materia en rendir, le mando un audio explicándole, me daba las ganas de escribir a Belén, pero nos prometimos que no nos hincharíamos en estas épocas, entonces me arriesgue a que se enoje conmigo y le escribo: "Hola quieres venir a casa a estudiar? xD", ojalá no se enoje, si lo hace, bueno, a empezar desde cero, de pronto suena mi celular, veo un mensaje de ella:

Belén: Ven tú, así me enseñas bioquímica, preparare jugo mientras

Crosh: Está bien, te veo en una hora

Inmediatamente dejo de estudiar, me doy una ducha, me despido de mi madre diciéndole que no vendré a comer al medio día, agarro las llaves y voy rumbo a su casa, bueno, espero que estudiemos, no sea que nos pasemos hablando de otras cosas, pero en estos casos lo que más amaba de ella era su seriedad, su serenidad y su gran potencial, ella era muy inteligente, quizás un poco mejor que yo, pero poco a poco íbamos descubriendo nuestros talentos ocultos.

Al llegar a su casa, la verdad estaba un poco vacío ya que nos solíamos reunir con Eder aquí a estudiar, él fue trasladado a la filial en Santa Rosa, por lo tanto, ya no lo veríamos, solo estábamos ella y yo luchando en la universidad, las heridas iban sanando poco a poco, todo era diferente desde que se fue Jaqueline, pero, ahí estábamos, en la lucha. Veo a Belén un poco apagada, le pregunto que le pasaba, inmediatamente me da un fuerte abrazo, yo le comprendía, dos personas importantes para ambos ya no estaban, entonces le separo un poco diciendo: "Por algo pasan las cosas, no tengas miedo pequeña, que la voluntad de Dios se haga en nosotros", ella sonríe, pasamos a su sala, pero me dice que vayamos a su habitación, allí estaríamos estudiando mejor, vaya, por primera vez entraría a su habitación, eso era algo lindo, pero un poco incomodo, no sabía del porque pero estaba un poco nervioso la verdad, ella había preparado una rica limonada, pues hacía un calor horrible, estábamos caminando ya en noviembre, el penúltimo mes del año, ya entrando en el verano, la idea era pasar todo en esta primera oportunidad, para luego tener vacaciones hasta marzo del año que viene, todo estaba dando sus frutos, todo era de acuerdo a la voluntad de Dios.

Ya estábamos en el penúltimo capítulo, vaya habíamos avanzado bastante en tan solo cinco horas, sin darnos nuestra ya eran las tres de la tarde, la verdad la juzgue mal, porque aparte de todo, es mi mejor compañera de estudio, ya sea con quién estudiar para las otras materias que vienen, cada día nos estábamos poniendo más fuerte, a pesar de las críticas que a veces solíamos recibir, siempre estábamos allí, a veces pienso si en verdad es ella mi regalo del Cielo, aquel regalo que tanto pedí a Dios, solo con el tiempo lo podremos descubrir, ella era especial, diferente. mientras descansábamos, aprovecho para hacerle una llamada a Eder, quizás ya esté en su casa, él nos contesta y ambos le saludamos, pongo en alta voz, al parecer se sorprende, le sorprende que después de todo, sigamos juntos, bueno, tal vez sea el destino, él solo nos dijo: "Cuando será la boda", nosotros simplemente nos reímos y le respondimos con un "estás loco", entonces él nos devuelve diciéndonos: "Quizás, pero reconozco cuando dos personas se quieren, no me digan luego decir un "se los dije"" nosotros solo reímos y le dijimos que lo apostaríamos, él se río y acepto. Hablamos un poco de todo, me alegra saber que ya estaba al cien, tal vez la extrañaba, pero se que poco a poco esas heridas que habían quedado iban sanando poco a poco, lastimosamente nos separamos, pero aquí estoy con alguien que se había quedado para cuidarme y para ser cuidada por mí.

Eran las ocho de la noche cuando terminamos nuestras sesiones de estudio, la verdad ya estábamos dominando todo, nuestro examen de mañana sería un éxito total, todo estaba tranquilo, ya estaba llegando la hora de ir a casa, pero Belén me dijo si quería cenar algo antes, yo acepte, vimos que podíamos preparar y nos pusimos manos a la obra, haríamos unas ricas hamburguesas a la parrilla, era tan perfecto estar con ella, es como si fuese que todo el universo estaba a nuestro lado, todo iba fluyendo como debe ser, sin apresurar las cosas, sin dejar de lado nuestros sueños ni estudios, sino fortaleciendo nuestra relación como amigos, y porque no más adelante como pareja, pero aún faltaba mucho para llegar a eso. Las hamburguesas ya estaban listas, fue un día muy productivo para ambos, y bueno llego la hora de disfrutar de todo nuestro esfuerzo de este día con una rica cena.

Durante la cena, comenzamos a reír, repasar todo lo que ya habíamos aprendió, también recordábamos todo lo que pasamos en estos últimos meses, ella me dijo que era momento de cambiar todo, de sanar las heridas que quedaron, porque ahora Jaqueline vivía en cada uno de nosotros, una nueva página se abría, cada día sería una nueva oportunidad para compartir a su lado, para cuidarla, una nueva oportunidad de vivir, así que ambos decidimos aprovecharla al máximo, decidimos por lo menos salir juntos una vez por semana en estás épocas de exámenes, para distraernos y que no nos agarre el cansancio ni mucho menos la depresión, porque eso influía en nuestras actividades.

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