Capítulo 27

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Narrador omnisciente

— Te dije que era imposible encontrar su rastro con la lluvia — Le dijo Amelia desde atrás mientras caminaban juntos bajo la lluvia.

La tormenta caía y el agua era una especie de reactivo para las flores silvestres, ya que estas reacciona por la lluvia combinación de la lluvia con la oscuridad, transformándose en luminiscentes. Era un hermoso paisaje para apreciar, pero a ninguno de ellos dos les importaba el brillo de las flores.

— Deberíamos dirigirnos directamente hacia Nación, tal vez ella esté ahí.

Sin embargo Daryl se encontraba muy consternado y bastante preocupado. Muy dentro suyo, en el fondo, podía sentir que algo estaba muy mal y eso le agitaba el corazón.

(...)

Cuando la tormenta paró, recién Amelia y Daryl acababan de llegar a Nación.

Las puertas les fueron abiertas una vez que se identificaron y Conner lo recibió a Daryl con un reconfortante y aliviador abrazo recíproco.

Pero en cuanto terminó el abrazo, el hombre recién llegado, observó por todas partes. Y preguntó con la duda carcomiendolo por dentro.

— ¿Mi esposa está aquí? — Pero el estático rostro lleno de angustia de Conner, no fue una buena respuesta.

— Como tú y ella no aparecían, pensé dos cosas, que habían sobrevivido y estaban juntos o temí lo peor... Que habían muerto.

Pero Daryl se negó a creer lo segundo y se decidió firmemente a extirpar ese pensamiento de su mente.

Se dio la vuelta listo y decidido a volver a salir para encontrar a su esposa.

— ¿A dónde vas? — Lo detuvo su hermano.

A encontrala. — Su semblante era oscuro y decidido. — No pienses siquiera en detenerme.

Conner quien lo miraba con seriedad, terminó apoyándolo — A dónde vas solo, iba a decir — Daryl frunció el ceño — Mi esposa no está aquí también hermano. — ala angustia era evidente en su rostro — Organicé un grupo de búsqueda he íbamos a ir para buscar a los desaparecidos.

Pero justo en ese momento Amelia los interrumpió.

— Entonces... ¿Qué sucedió con la guerra?

Cuando Conner se volteó a verla con el rostro completamente serio, ella sabía que no era anda bueno — Hay algo que debo decirte...

Él le explicó que su manada había sido tomada por colmillo rojo, que sus ciudadanos habían muerto y los que trataron de recuperar sus tierras en su ausencia también. Los pocos que habían llegado a sobrevivir, decidieron, abandonarla como ella lo hizo con ellos y se unieron a Nación.

La mujer no lo tomó para nada bien, y estaba completamente furiosa. Aún así decidió calmarse he ir a tratar de buscar a los desaparecidos o heridos.

(...)

Conner y Daryl estaban sumamente desesperado cuando no encontraban rastros de sus esposas, era como si se  hubieran esfumado o desaparecido de la faz de la tierra.

Magnus también había participado en la búsqueda de su madre y al igual que su padre y tío, no pegó un ojo en toda la noche.

Encontraron varios que habían logrado salvarse y otros que estaban tumbados en el suelo muy mal heridos.

Pero ningún rastro de la Reina ni de Austria.

Las facciones de dolor parecieron llegar para quedarse impresas en el rostro de Daryl.

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